Lady Beckett

¶| Sinopsis | ¶

Lady Cheryl Beckett supo que había quedado engatusada de aquél hombre desde el primer momento en que lo vio y él despertó en ella todas aquellas terminaciones nerviosas que desconocía tener. Siendo el único hombre con el cual ha sentido su corazón bambolearle frenético en el pecho, no ha tardado en considerarlo como su futuro «esposo elegido»

Y ahora que sabe que dicho hombre regresa a Londres, pretende usar todas la osadía y las artimañas necesarias para casarse con él.

Cosa que, sin dudas, será una gran proeza.

Porque Lady Beckett sabe que tiene más de una traba de obstáculo en su propósito de enamorar a Derek Evanson:

1. Es un capitán americano. ¡Vaya patatús sufriría su padre, el gran marqués de Wenchister, si se enterase de semejante barbaridad! Una jovencita como ella está destinada a ser desposada por algún joven noble, heredero de algún importante título nobiliario, como el también marido marqués de su hermana.

2. Es hermano de la esposa de su tío Landon. ¡Un doble patatús acabaría con su padre si supiera que se trata específicamente de uno de esos condenados Evanson! ¡Y ni decir de sus apreciados tíos, quienes también odian a muerte a esos destetables hombres con lo que se vieron obligados a emparentarse!

3. Aquél Evanson en particular le dobla la edad ¡Ahora sería su madre quien sin dudas convulsionaría! ¡Que escándalo! Un hombre ya maduro como él y una jovencita que apenas ha sido presentada en sociedad forman una ecuación simplemente insólita.

4. El susodicho hombre ha dejado de ver a las mujeres como algo más que buenas acompañantes en la cama. ¡Le huye al compromiso y ha cerrado el pestillo de su corazón al amor!

5. Es un cascarrabias que odia el mundo aristocrático al que ella pertenece, odia Inglaterra y sobretodo odia a los hombres Beckett. Para él, ella no es más que la hija pequeña de uno de esos bastardos.

Así que la cosa no pinta para nada a su favor.

Pero Lady Beckett está determinada a enamorarlo a toda costa.

Y aunque Derek Evanson no quiere tener nada que ver con esa atrevida jovencita, lo cierto es que consigue atraerlo de sobremanera. Aunque él pone en práctica todos sus vanos esfuerzos para evadirla, el empeño de Lady Beckett le hace la misión difícil con sus persecuciones y hábiles dotes para seducirlo.

Pero, pese al rechazo de él, Lady Beckett no se niega a dejar de metérsele en la cabeza y en buscar residencia en su corazón.