Apocalypse ❇ KookMin

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La caminata por aquella zona de cuarentena estaba siendo algo aburrida, parecía que esas dos personas de la entrada eran todos los que quedaban del bando.
Miraban a todos lados y no veían nada, habían puros edificios vacíos y un monton de cosas tiradas en el piso, continuaron avanzando y al escuchar como dispararon un arma detras de ellos, voltearon. Encontrandose con un grupo grande de personas.

- así que tu eres el niño que mató a un grupo de vigilancia -señalo a Jimin con el arma- y ustedes dos las que mataron a los de la entrada -pasaron de apuntar al castaño, dejando el arma apuntada hacia las dos chicas- ¿a que han venido? -rió un poco.

- solo queremos que nos dejen pasar -agregó el castaño algo tímido.

- claro, vayan -dijo el señor que se encontraba frente a ellos.

Los cinco se miraron algo sorprendidos, pero por obvias razones era un trampa, cuando empezarón a caminar en dirección al final de la zona de cuarentena, los demás rieron un poco y empezaron a disparar en varías direcciones y los cinco chicos rápidamente se escondieron detrás de unas paredes que habían por ahí.
Jungkook se asomó un poco y apuntó con la pistola a uno de los de ahí y disparó, matando a uno. Cuando aquel chico calló al piso todos fueron a esconderse detrás de ciertos objetos que los mantendrían vivo por unos segundos hasta antes de que todos empiecen a disparar entre sí. Cualquiera pensaría que los cinco chicos morirían ante las 17 personas que se encontraban frente a ellos con el único fín de matarlos, pero parecía que aquel día la suerte estaba a su favor, unas balas estuvieron apunto de caerles, pero aún así no había ningún herido en aquel pequeño grupo, mientras que en el del frente varíos morían, así hasta quedar todo vacío.

- ¿esos son todos? -preguntó Rose saliendo de la escondite.

El lugar parecía bastante tranquilo y si hubieran más personas hace rato tendrían que estar abajo intentando matarlos.

- debemos cruzar el edificio rojo -mencionó Hoseok señalando aquella edificación que se encontraba a unos cuantos pasos de ellos- solo que debemos de pasar las rejas de esta zona de cuarentena...

Los demás asintieron, pero Jimin andaba algo distraído al notar que había una tienda de música cerca a donde ellos estaban. El pelinegro noto a Jimin algo desconcentrado y se acercó a preguntarle que sucedía.

- ¿esta todo bien?

Jimin volteó a mirarlo y le sonrió.

- todo bien, ¿pueden ir avanzando sin mi?, quiero ver algo

Jungkook fruncio un poco el ceño al escuchar que Jimin queria quedarse.

- solo quiero ver algo, los alcanzo al toqué

El pelinegro finalmente asintió y fue tras el grupo de los demas chicos.

Era mala idea separarse del grupo, pero Jimin queria ver aquel hermoso piano que parecía intacto, ya que realmente andaba algo sucio. Se puso frente al piano y dejo su mochila al lado para después acariciar un para de teclas, no sonaba tan mal por lo que Jimin sonrió y se sentó en el banquito, empezó a tocar una suave melodía que había aprendido hace mucho tiempo cuando aún vivía junto a su madre, pero no todo puede ir tan bien que digamos.
Jimin abrió los ojos al sentir como lo agarraron del cuello y taparon su boca con una mano.

- este niño sera suficiente para matar a todos esos chicos -dijo aquel señor que se encontraba tapando la boca del castaño.

Jimin hacía muchisima fuerza con tal de liberarse, pero sus intentos parecían no funcionar por lo que sin pensarlo mordió la mano de aquel señor el cual gritó al sentir los dientes del Jimin en su mano y lo soltó. Jimin buscó su arma para disparar a las personas que se encontraban frente a el y luego noto que dejo su mochila lejos de el. Iba a ir en busca de su mochila pero un golpe en la cabeza lo hizo caer inconciente, viendo como se acercaban a el, siendo esto lo último que vio antes de cerrar los ojos y ver todo negro.

.    .    .

El pelinegro volteó a mirar al escuchar un fuerte grito proveniente del lugar al cual Jimin iba a estar, ahí pensó y se dio cuenta del terrible error que cometió al dejar que el castaño vaya a aquel lugar solo.
Se separó del grupo y los chicos lo miraron algo confundido pero aún asi siguieron al peliengro el cual al llegar a aquella tienda no vio nada, buscó por todos lados y solo encontró aquella mochila que Jimin escogió cuando se conocieron. Se acercó corriendo a la mochila y la recogió, miró a todos lados pero no había señal del castaño, Jungkook en esos momentos se sentía culpable, no se iba a perdonar nunca si Jimin moría.

- Debemos buscar a Jimin, ¡No puede morir! -exclamó- el... Esta bien de eso estoy seguro, ayudenme

Los otros tres se miraron entre sí y luego de unos segundos asintieron.

- será algo difícil Kook, pero te ayudaremos a rescatar a Jimin.

La pregunta aquí era, ¿dónde se podría encontrar el castaño?. Esa duda podría seguir en pie si es que no se hubiera escuchado como un carro era encendido y arrancaba. El peliengro salió por la puerta trasera de la tienda aún con la mochila de Jimin en manos y vio como aquel auto se iba a toda velocidad, pero estaba llendo hacía una dirección.

El edificio rojo y era ahí donde iban a entrar para rescatar a Jimin.