Capítulo 28

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Cuatro días después

Daniela Calle

Reviso la hora en mi celular 3:38 p.m.

Como los últimos dos días, estoy esperando que Poché salga de su consulta con una psicóloga que consiguió mi papá.

Después de haber escuchado todo aquello que me dijo en mi cuarto, sentí un miedo que jamás había sentido.

Todo me estaba sobrepasando, sabía que por mucho que lo intentase, yo no tendría las herramientas para ayudarla.

Es por eso que esperé que se durmiera después de estarla tranquilizando contra mi pecho, fui con mi papá y le conté todo. Mi mamá también estuvo presente y juntos ayudaron a conseguir a una de las mejores psicólogas del país.

Revisando su historia médica, la psicóloga nos comentó que a pesar que su tía trató de llevarla a terapias, tenía varios meses donde no estaba asistiendo de forma regular.

Además, no estaba bajo ningún tratamiento, no estaba consumiendo algún medicamento que le ayudase.

Simplemente estaba avanzado hasta dónde ella misma podía.

Mi corazón se arrugó ante eso, mi pobre Poché, incluso con todo lo que pasaba, lo hacia ella sola. Se levantaba cada día y soportaba cada pedrada ella sola.

Sin ayuda de nadie.

Los cuerpos de la tía de Poché y de Mario los entregaron al segundo día luego de haberles practicado la autopsia.

No sé qué habrán arrojado los resultados, es algo que no me tienen permitido saber. Y quizás sea mejor así, mi estómago no podría aguantar tantos detalles espantosos.

Suelto un suspiro.

Realmente no sé qué pueda pasar con Poché y eso me llena de pánico.

Aún no se sabe nada de Valentina, supuestamente han buscado en todos los lugares, pero la verdad no creo en la policía de este país, son todos unos incompetentes, eso me quedó claro cuando no tuvieron ni siquiera la pizca de empatía al mostrarle y decirle esas cosas horribles a una niña como Poché.

Aprieto los puños llena de frustración.

Quiero poder aliviar sus penas y evitar que el mundo se le siga viniendo encima.

— Poch. –murmuró Kim y por un momento recordé que ella también estaba aquí.

Kim se levantó y fija la vista en la puerta haciendo que yo también me levante inmediatamente. Poché está saliendo con la psicóloga que le dice unas cosas mientras ella mantiene su vista en el piso sin decir nada.

Nos aceramos y también lo hacen mis papás.

— ¿Cómo estuvo hoy? –preguntó con suavidad mi mamá a la psicóloga mientras tiene su vista en mi bonita.

TOC Trastorno Obsesivo-Compulsivo | TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora