Capítulo 31

7.5K 676 1.1K
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Daniela Calle

Han pasado 8 días en los que no hemos sabido nada de Valentina.

La policía, los detectives privados contratados por mi papá, incluso un coronel del ejército padre de Laura, ha estado buscando en todas partes sin éxito.

«Laura» cada vez que recuerdo ese nombre me empieza a hervir la sangre y me da dolor de cabeza.

Luego de esa tarde lluviosa en el parque donde tuve a mi bonita entre mis brazos mientras se rompía en miles de pedazos, la llevé hasta la casa de Kim, se opuso totalmente a volver a mi casa y eso me entristeció, pero no tanto como los reportes que me da mi prima, ya que ahora Poché está renuente a verme. No entiendo que fue lo que hice mal, y tampoco sé que hacer para remediarlo.

Trato de pensar que quizás es su propia cabeza, su propio cerebro el que le hace imaginar cosas que no son, que quizás está buscando hacer la tonta jugada de alejarme para no lastimarme. «Pero, ¿cómo le explico que con eso me está haciendo más daño?»

Sigo repasando lo que ha pasado, sigo pensando en todo lo que hemos vivido en tan pocos meses, incluso nuestra propia relación que solo hemos disfrutado normalmente un par de días.

Kim me ha contado como las porristas siguen visitando a Poché buscando animarla un poco, sobre todo Laura, esa chica se ha acercado a Poché tanto que incluso mi bonita no siente miedo al momento de estar cerca de ella. Odio eso.

No sé qué demonios quiere Laura, no sé qué planea, no sé porque ese interés tan repentino en Poché. Kim trata de hacerme entender que solo buscan ser sus amigas, pero yo no lo tengo del todo seguro; le doy vueltas y vueltas y no veo ninguna razón por la cual se acerquen tan de la nada, esas hermanas Villa no me dan buena espina y me enerva que no pueda estar cerca de Poché para protegerla.

He retomado la asistencia al instituto, no estaba entre mis planes, pero por órdenes de mis padres tengo que venir, es por eso que estoy ahora aquí, escuchando a la Señora Maricarmen mientras da su aburrida clase de Ciencias Sociales.

Miro a mi alrededor y apretó fuerte el lápiz que tengo en mi mano, todo es tan normal, todos siguen el curso como si no pasara nada. Solo puedo ver la cara de tristeza en el rostro de mi prima, el resto está completamente normal, eso me pone de los nervios.

Veo hacia el lugar donde suele sentarse Poché y mi corazón siente algo muy feo.

Sigue vacío.

Desde que empezó todo esto, ella no ha asistido, mi prima se encarga de llevarle las tareas que a duras penas logra hacer.

Sigo en piloto automático por un par de horas más, las necesarias para aguantar este día y todos los que vengan.

12 días sin Valentina.

TOC Trastorno Obsesivo-Compulsivo | TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora