Capítulo 32

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[N/A: Primero que nada buenas noches, segundo que nada...TEMO-POR-MI-VIDA

Y tercero que nada... Cada capitulo tiene detalles que van de la mano siguiendo un hilo narrativo, pistas que les voy dejando, es por eso que es necesario que lean y analicen cada cosa, cada personaje]





Tercera persona.

60 Días sin Valentina

El olor a humedad se mezclaba con el hedor de las sobras de comida que llevaban días en el mismo sitio (el suelo), las larvas que comenzaron a formarse en los días pasados ya eran nidos y nidos de los cuales salían cientos de moscas que sobrevolaban el reducido espacio. Ratas y cucarachas acompañaban también a los animales voladores, como si el infierno vivido no fuese suficiente.

Una luz colgada que se movía sobre su propio eje en una viga cada cierto tiempo era la única iluminación del lugar. Se podría decir que, si alguien llega a caer en ese agujero, es porque nunca más va a salir, porque del infierno, ciertamente, no se regresa.

Es impredecible las decisiones que toman los seres humanos, y mucho más cuando están enfermos. Ahora, suma a eso que la persona tenga un trastorno de identidad disociativo.

¿Somos culpables de las acciones que desencadenan nuestras decisiones? Por supuesto que sí.

Pero, ¿Cómo asume la culpa alguien cuando su mente está dividida en varias personas?

De un momento a otro nuestra vida cambia y no podemos tomar algún tipo de control remoto para detenerlo, devolverlo y volver a darle play para evitarlo. Simplemente pasa, jodiendonos por dentro y destrozando cada esperanza que se tenga por la humanidad.

Se tiene que tener mucha valentía para poder enfrentarse al demonio que tenemos dentro y poder salir airoso.

Bien dicen, que el peor enemigo que tenemos, somos nosotros mismos.

Mark Ruiz, es un hombre de cuarenta y tres años, de familia humilde procedente de un municipio de Colombia llamado Santa Fe de Antioquia, ubicado al occidente de Antioquia. De sus padres no hay nada relevante que decir, más que trataron de darle lo mejor a sus cuatro hijos. Inculcándoles que, la humildad siempre debía ser su lema.

A pesar de estar establecidos en Santa Fe, de tener su familia allí y una finca a la cual sacarle algún provecho, su objetivo fue muy claro desde pequeño (ser alguien). Vaya paradoja si lo vemos en retrospectiva, no solo fue alguien, fue varios y fue ninguno.

Su ambición siempre lo impulsó por querer lo mejor, además de tener una inteligencia muy avanzada para su edad cuando vivía la niñez. A medida que crecía, el pueblo humilde se le fue haciendo pequeño. Cuando tuvo la oportunidad de irse a la universidad en Bogotá, no lo pensó. Ni siquiera vio el dolor en el rostro de sus padres, no quiso sentimentalismos, solo se fue.

TOC Trastorno Obsesivo-Compulsivo | TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora