Capítulo 16. Amún (parte 2)

22.4K 2.6K 3.1K
                                    

Amún

Recorro su cuerpo mientras repito mil veces en su oído que es mía y mordisqueo su cuello. Cuando dijo que estaba comprometida con el viejo O'Connor tuve ganas de estrangularla de verdad, ella no puede casarse con nadie porque es malditamente mía.

La escucho respirar profundamente, el color de su respiración es lo mas estimulante del mundo, sólo oírla respirar es música para mí.

La odio tanto.

Odio lo bien que se siente tenerla pegada a mi, odio querer tenerla así para siempre, odio que haya regresado cuando había decidido sacarla de mi mente, cuando estaba logrando no pensar tanto en ella y de pronto está aquí, respirando sobre mi piel, besándome, acariciándome, recordándome todo eso que ella me provoca, todo eso que nadie mas logra hacerme sentir, sólo ella.

Abtikari.

Quiero azotarla por hacerme esto, quiero oírla gritar y que me pida perdón por haberme abandonado como lo hizo, quiero que me suplique compasión y se abra de piernas implorando que la haga mía.

Deseo volver a sentir el sabor de su sangre en mi boca, hacerla estremecer entre mis brazos enterrándome en ella tan fuerte que no pueda olvidar mi posesión en días, sentarla en mis piernas y tocar el piano y vuelva a mirarme con esa adoración como en el pasado.

Es mía, mía, mía, malditamente mía.

—Dime porqué lo hiciste —pregunta interrumpiendo mis pensamientos oscuros— ¿Por qué esta venganza sin sentido?

¿Por qué?

Ya ni recordaba el motivo que la trajo a mi vida, eso pasó a un plano sin importancia cuando ella se fue, me dediqué a odiarla por no estar conmigo y dejé de lado el hecho de que ella es la causante de la muerte de mi madre.

Frunzo el ceño buscando las palabras adecuadas para expresarle mis pensamientos, creo que nadie ha entendido hasta el día de hoy mis motivos, pero ella podría porque es igual a mi.

—Para mí tenía sentido Abtikari, por tu culpa murió la única persona que me ha querido un poco, la única que se ha preocupado por mi.

—Ella no te quería Amún —susurra— Una madre no hace lo que te hizo Marie, no encierra a sus hijos en sótanos oscuros ni lo tiene aislado del mundo, eso no es querer.

Claro que se puede querer así, es lo que yo deseo con ella, encerrarla para siempre conmigo en la oscuridad y no vuelva a abandonarme nunca. Entiendo que mi madre no fue la mejor mujer del mundo, incluso la he llegado a odiar por todo lo que me hizo y por dejarme, pero sé que en algo tenía razón, mi padre me odiaba, siempre lo hizo, hasta su último día, hasta el último instante mientras lo miraba a los ojos y veía su vida apagarse entre mis manos, ella me protegió de él al menos por un tiempo.

—Mi madre me quería, a su manera pero lo hacía.

—No Amún —insiste y tenso mis brazos al rededor de su cuerpo para que se calle, su respiración se dificulta porque la estoy apretando demasiado— Hablé con Marek hace unos días y me contó cosas que tú y tu hermano no saben.

Inmediatamente aflojo mi agarre y la miro fijamente, nunca he querido saber lo que tuvo que vivir mi madre siendo una esclava pero la intriga que siembran sus palabras es acusante, sus ojos celeste me dicen que hay algo que no debería escuchar pero que quiero hacerlo.

—¿Qué te dijo?

—Él liberó a Marie y le dio dinero para regresar a Dubái a buscar a su hijo y ella no quiso, decidió quedarse con él.

—Eso no es cierto —la empujo y me pongo de pie— Cuando trajo el cuerpo de mi madre Marek dijo que ella quería volver pero la asesinaron.

—Dijo eso para no herir al niño que acababa de perder a su madre.

TINIEBLASDonde viven las historias. Descúbrelo ahora