monique, is a London boy :) h.s

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—Toma, Harry me ha hecho su mensajera personal— dijo Amelie entregándome una caja negra. Ella estaba en la puerta de mi departamento esperando que la dejara entrar.

—¿Por qué no vino él?

—¿Tienen una cita, no?

—Si.

—Debe estar ocupado con eso. Tú deberías también estar arreglándote, Harry ama la puntualidad— tomé la caja de las manos de mi amiga y ambas entramos caminamos hacia el comedor. Ella dejó su bolso y luego se tiró en el sofá.

—Harry me ha enviado un regalo por nuestra cita, es muy lindo, ¿no crees?

—A mi me parece cursi— rodeé los ojos al escuchar su pesimismo.

—Gracias por haberme traído el regalo.

—No hay nada que agradecer, me pagaron por hacerlo— contestó y me reí.

—¿Cómo vas con Molly? Con lo del bebé...

—Bien. Tenemos nuestra primer cita programada en la clínica para dentro de dos meses. No hay prisa, solo nervios.

—¿2 meses? Parece bastante tiempo.

—Lo sé, pero todo a su tiempo. Tendrás sobrino pronto.

—¿Sabes lo bueno de todo esto? Que seré muy feliz siendo tía... tan fácil como devolverte a tu bendición si llora.

—Oh no, vas a ser tía con responsabilidad.

—Claro, con la responsabilidad de malcriarlo... pero no tanto, luego lloran mucho— ambas nos reímos.

—¿Qué dices acerca de tener hijos?— preguntó Amelie. —Hace dos meses cuando yo no deseaba tener hijos, tú sí lo deseabas.

—Ahora no me veo con bebés en este momento, creo que es un trabajo de 24 horas y yo ya tengo uno que me consume mucho tiempo. Tal vez en unos 3 años más vuelva a considerarlo, pero soy feliz así.

—¿No deseas cambiar pañales? ¿O ver a un humano pequeñito balbuceando con una sonrisa?— lo reconsidere.

—Eso no es muy anticonceptivo de tu parte.

—Lo sé. Me voy, suerte en tu cita— Amelie me abrazo y salió del departamento.

Me acerqué a la caja, había una nota encima de ella y la tomé para leerla.

"Este vestido tiene algo de ti, Amelie lo escogió pero eso no importa. Tenemos una cita a las 8."

Dejé la nota sobre la mesa y vi la gran caja negra que Harry me había mandado con Amelie. Él no había aparecido en todo el día.

Teníamos una cita porque él quería que tuviéramos algo especial. No era nuestro aniversario, ni tampoco un cumpleaños, solo quería que tuviéramos un momento romántico. Yo estaba nerviosa, no sabía que íbamos a hacer, ni a qué lugar íbamos a ir, solo sabía que con él, todo era precioso.

Abrí la caja, y vi un hermoso vestido blanco, con mangas en forma de moño rosas. Amelie hacia buen trabajo siempre.

Lo tomé en mis manos, y caminé hacia mi habitación para probármelo. Me hacía mucha ilusión ese momento, no podía esperar más por esa cita que teníamos.