✨LO QUE ELLA PROVOCA✨
ASKELLA
Me han traído el desayuno directo a la cama y es todo un sueño.
Anoche dormí muy poco debido a que trajeron al equipaje de mis muñecas y yo estuve horas acomodando a las que traje conmigo. Tuve que dejar a las otras en la mansión, lo cual me desanimó un poco, pero con mis seis favoritas tengo más que suficiente. Y ahora puedo decir que sus vestidos compiten con los que se encuentran en mi armario de princesa.
Porque eso es lo que soy, una princesa.
No de manera oficial, claro está, todavía tengo que firmar a los papeles de compromiso para que se me reconozca como la prometida de Darek.
...Si es que él no me mata o se aburre de mí.
Hay muchas probabilidades y pocas son favorables, no conozco nada del mundo exterior y tengo que aparentar que lo sé todo para así evitar que mi cabeza termine rodando. Lo último que pude investigar del Este de Géminorum es que aquí les encanta ejecutar mediante la decapitación con una espada, en el Sur son más populares las hogueras.
Un error y yo podría ser la siguiente en un cadalso con los ojos vendados, mientras el verdugo me indica que no me mueva para así tener un corte limpio.
¿Qué voy a hacer cuando me pregunte sobre mi familia? Ni yo sé la verdad sobre papá y Julia, según que ambos se dedicaban a investigar la nervosis y yo encontré la mano de alguien aparentemente sano dentro de una bolsa. Además, no puedo hablar de la información que yo misma descifré y robé durante años porque entonces sí que habría una razón válida para acabar muerta.
Tampoco me he olvidado de que papá hizo un trato con un serpentum y, como yo soy su hija, también estoy involucrada en sus asuntos.
Miro en dirección al estante de madera blanca donde conseguí reunir a mis muñecas. Al menos ellas se encuentran disfrutando del hermosísimo cuarto que me han dado y me preguntan si yo también estoy feliz. Yo ya no puedo contestarles porque, al parecer, no es normal que alguien vivo hable con objetos inanimados. Una sirvienta me miró asustada cuando me escuchó conversar con Huni.
Huni se ha tenido que sentar al lado de Hazel. A Theresa y a Octavia nadie las interrumpe. Y Maude ya se ha hecho más cercana a Anita.
En cambio yo, sigo sola.
—Alteza, ya está listo su baño —informa Elinor desde la puerta del baño, con una pequeña reverencia.
Yo termino de comer a las gachas de avena, que han preparado con frambuesa y miel, para luego asegurarme de que la bata de algodón no se me caerá al levantarme y me dirijo al cuarto de baño.
Me deslizo por la puerta sintiendo el fresco mármol bajo mis pies descalzos. La habitación es amplia, con paredes adornadas en delicados tonos de lila y dorado.
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Sidereal
Fantasía«Del tiempo surgió el caos del universo, y las estrellas, con sus secretos, se encargaron de escribir al destino.»