✨UN PEQUEÑO SECRETO✨
GENEVIEVE
Me he sentido extraña desde mi último encuentro con Isham. No sé cómo explicarlo, pero es como si una semilla se hubiese plantado en lo profundo del ser y ahora tuviera dentro a una enredadera que busca atraerme más a su existencia.
Lo atribuyo al hecho de que me mantuvo a salvo en una situación en la que yo pude haber acabado muerta. Me brindó su ayuda y no pidió nada a cambio. Sé que eso no debería de ser suficiente para sacudir a mi corazón, pero mi mayor debilidad es alguien que me trate bien y se preocupe por mí.
Esa es la razón por la cual quise André: Fue el primero en mostrarme genuina amabilidad y como nadie más conversaba conmigo, pues pensé que una linda historia de amor ya esperaba por mí. No obstante, fui una tonta; André quería una sola cosa de mí y aquello no era el amor que sentía por él.
Yo era una muchacha inocente, que apenas si se atrevía a soñar con el primer beso.
Pero con Isham no hay ingenuidad de por medio. Mi cuerpo reaccionó muy bien ante su presencia, como si ya estuviese acostumbrada a la manera en que sujetó a mi cintura y me apegó a su espalda. El corazón me latió tan rápido como nunca antes y lo acompañó un cosquilleo que paralizó a mi interior y se deslizó por mi cuerpo hasta convertirse en un calor que trajo consigo a una sensación de necesidad.
Lo miré como jamás lo había hecho con alguien más. Me tomé mi tiempo para grabar bien a esos detalles de su cuerpo y rostro que me encandilaron, porque algo en mí se negó a soltar a su presencia.
Sé que debería estar preocupada por Alexis, pero ¿a quién le interesa una sombra con nombre? Isham es lo que pude experimentar y el hombre que acudió en mi ayuda, es lógico que busque conocerlo y no sólo por el hecho de que también es un Violeta, como yo solía serlo.
Me gusta. Me gusta mucho.
Doy otra vuelta sobre la cama mientras trato de ignorar a esa pequeña voz. ¿Qué quiere decirme mi propia mente? Cada idea está plagada de algún rasgo o parte de Isham. Hay mucho que decir sobre su físico y si me preguntaran qué es lo que más llamó mi atención, no podría quedarme callada. ¿Cómo lograrlo? Es imposible.
El ámbar de sus iris me pareció antinatural, como si en aquel tono se albergaran los deseos más intensos del desierto. Tenía los párpados enmarcados por pestañas oscuras y largas.
Su cabello enmarcaba sus facciones con un toque salvaje que añadía un aire de misterio a su apariencia. También le presté especial atención a su piel morena y cómo contrastó con la palidez de la mía.
...Y eso fue lo que me llevó a observar al resto de su complexión.
Su cuerpo era una manifestación de fuerza y virilidad, esculpido como si hubiera sido forjado por un dios antiguo. Su torso amplio y robusto mostraba músculos bien definidos, que se delineaban claramente bajo su piel morena: Los pectorales firmes y esculpidos y los abdominales marcados en un patrón que parecía tallado en piedra.
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Sidereal
Fantasy«Del tiempo surgió el caos del universo, y las estrellas, con sus secretos, se encargaron de escribir al destino.»