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Recuerdos random del pasado de Ale :)

Third Reich esperaba a su hijo en la puerta del colegio, mientras observaba a otros niños (muchos de ellos, países), salir por aquella puerta.

Por fin, vio a su hijo salir del colegio y acercarse a él. Al mayor le extrañó mucho que no corriera hasta él y le abrazara con fuerza, como de costumbre, sino que esa vez se acercó andando y algo triste.

De todos modos, Third Reich le abrazó y le sonrió, pues había notado que Alemania estaba un poco raro y quería animarle.

—¿Qué hiciste hoy en el cole, hijo?—Preguntó, mientras comenzaba a caminar con el niño de seis años de la mano, hacia casa. Alemania se quedó callado varios segundos, con aire triste.

—Nada—respondió, sin mirarle. Third Reich le miró durante algunos segundos, y luego habló.

—Ale, ¿Pasa algo?—Le preguntó. Vio cómo a Alemania se le llenaban los ojos de lágrimas. Levantó la cabeza para mirarle.

—Es que... Hoy en clase todos hicieron una tarjeta para sus mamás y...—Dijo el niño, mientras empezaba a llorar un poco. El mayor entendió al instante lo que pasaba, mientras su hijo continuaba llorando.—¿Por qué yo no tengo mamá?

Third Reich cargó a su hijo en brazos y le abrazó, para luego mirarle con una sonrisa para animarle.

—Pero me tienes a mí. Yo soy mejor que una mamá ¿No crees?—Le preguntó. Alemania se secó las lágrimas, aún llorando.

—Pero yo quiero una mamá... Una de verdad—habló. Luego se le ocurrió una idea y sonrió, con los ojos brillantes de emoción. Mientras miraba con alegría a su padre.

—¡Papi, se me ha ocurrido una cosa!—Bajó de los brazos de su padre.— Cierra los ojos y espérame aquí.

Third Reich suspiró levemente y le hizo caso a su hijo, mientras se apoyaba en un árbol, se cruzaba de brazos y cerraba los ojos. Alemania, en ese instante, comenzó a correr hacia cierta  dirección.

Había pasado ya un minuto desde que Alemania se había ido, y Third Reich comenzaba a preocuparse, tanto que pensó en abrir los ojos, pero al final decidió esperar un poco más, pues su hijo no debería tardar mucho más en volver.

En cierto momento, sintió cómo una mano tiraba de la manga de su uniforme militar. Entonces pudo abrir los ojos, y trató de creer lo que estaba viendo frente a sus ojos.

Alemania sonrió tiernamente y miró a su padre, como si estuviera orgulloso de lo que había hecho.

—Papi, ¡Te presento a mi nueva mamá!—Dijo, mientras abrazaba el brazo de URSS con fuerza, como si de verdad fuesen familia. El ruso miró al alemán menor con una ceja alzada. Third Reich suspiró con paciencia.

—Ale... Las cosas no funcionan así. Tu "mamá" no puede ser una persona ajena a la familia.—Trató de explicarle Third Reich. Alemania le miró e hizo un puchero.

—Porfaaaaa... —rogó.—¡Así Rusia y yo podemos ser hermanos!

—¡Hala!—Habló Rusia, asombrado y emocionado.—¡Es verdad, si tu padre y mi padre son pareja, entonces nosotros somos hermanos!

Third Reich resopló, molesto, mientras su hijo y el de URSS celebraban que eran "hermanos".

—Vámonos, Alemania—dijo el mayor, tirando del brazo del alemán menor, de mal humor, para llevárselo de allí y perder de vista a URSS y a Rusia.

Rusia y su único pretendiente ☆ ❀ CountryHumans ✔︎Donde viven las historias. Descúbrelo ahora