Rowoon

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Jugabas con el vaso de bebida en tus manos, sin mucho ánimo, Rowoon tenía la mirada fija en ti, cruzado de brazos y con el ceño fruncido, no notaste su mirada en ningún momento ya que estabas perdida en tus pensamientos.

—Me gustaría saber que te pasa —Al escuchar su voz levantaste la mirada para dirigirla hacia él— Desde hace mucho querías venir a la playa, disfrutar el lugar pero ahora solo estas ahí, sentada sin ánimos de nada.

—Solo estoy pensando, si quieres ve a jugar con los chicos, iré en un rato —Susurraste sin mirarlo, escuchaste su suspiro y no supiste como sentirte.

—_______, llevas días pensativa, dime que esta mal —Tomo tu mano acariciandola, soltaste las palabras sin pensarlo y su silencio y mirada perdida te asustaban.

—¿Rowoon? —Hablaste con voz temblorosa, te costaba respirar y más al ver que te devolvió la mirada.

—¿Embarazada? —Preguntó en un susurro, asentiste.

—No se como sucedió, siempre nos cuidamos pero ahora estoy embarazada y asustada —Pasaste tus manos por tu rostro sin saber que hacer y él no ayudaba mucho— Joder, di algo.

—¿Qué quieres hacer? —Pregunto con seriedad y una tranquilidad que te sorprendió.

—¿¡Cómo demonios puedes estar tan tranquilo con la situación?.

—Alterarnos no mejorará nada, debemos mantener la calma —Se sentó junto a ti, apretando suavemente tu muslo— _______ haremos lo que tu quieras.

—¿Tu qué quieres hacer? —Preguntaste poniendo tu frente en su hombro, él tomó tu barbilla para que lo miraras, en su rostro había una dulce sonrisa.

—Amor, haré lo que tú quieras, aceptaré tu decisión, es tu cuerpo. Debes saber que estaré junto a ti en todo momento, no te dejaré sola —Apoyaste tu espalda en la silla, aliviada— Estoy asustado, la idea de tener un hijo me gusta desde hace mucho pero no esperaba que sucediera tan pronto y justo ahora, somos muy jóvenes aún.

—Lo se y pienso igual, creo que ambos debemos tomar esta decisión.







—¡Voy morir! —Casi gritaste apretando la mano del pelinegro, apartó el cabello de tu rostro con una sonrisa— ¡Borra esa estúpida y linda sonrisa de tu rostro! ¿No ves que estoy sufriendo?.

—Un poco más, se que puedes y tendremos a nuestro bebé —Te acarició la mejilla y cerraste los ojos con fuerza.

—Este niño me quiere matar —Gritaste esta vez con lágrimas en los ojos, el dolor era insoportable, te preguntabas como existían mujeres con tantos hijos. Unos minutos después escuchaste un llanto y suspiraste aliviada— Puedo morir en paz.

—No seas dramática, uno de los dos tiene que estar consciente —Susurro, estabas por preguntarle a que se refería, hasta que viste como su cuerpo aterrizó en el piso. Mal momento para desmayarse.





Caminabas junto a tu padre, viendo como Rowoon te esperaba junto a altar con una sonrisa y un traje, viéndose tan hermoso como siempre. Pensaste que ibas a vomitar en cualquier momento ¡Estabas por desmayarte! ¡No podías hacerlo! ¡No en ese momento! Tomaste aire y lo soltaste todo, en la primera fila se encontraba tu familia con el pequeño Luke, que casi corrió hacia ti al verte, gracias al cielo que su abuela lo detuvo. Llegaste junto a Rowoon y sonreiste.

—Sigue haciendo un buen trabajo, confío en que cuidaras a dos de mis amores —Dijo tu padre a Rowoon, quien había estado aprendiendo español.

—Lo haré —Dijo haciendo una leve reverencia hacia tu padre, lo miraste con una ceja alzada— ¿Por qué me miras así? No he hecho nada.

—Dijiste que Luke estaba durmiendo, casi corre hacia mí.

—¡Y lo estaba! Durmió unos cinco minutos además es tu culpa por ser una gran mamá —Se defendió, rodaste los ojos con una sonrisa.

—No se te ocurra desmayarte de nuevo —Le dijiste antes de voltear, te miro con una sonrisa que no viste.

—No, no lo haré.







—Luke ¡Quedate tranquilo o me enojare! —Hablaste viendo al niño correr por toda la habitación, miraste a tu ahora esposo con una mirada suplicante— ¡Roni! Ayudame.

—Luke ¿Recuerdas que debes hacerle caso a mamá? Se pondrá muy triste —El chico tomó al niño en sus brazos, Luke hizo un puchero estirando sus brazos hacia ti, no dudaste un momento para recibirlo en tus brazos.

—Lo siento, mami —Escondió su rostro en tu cuello mientras te abrazaba con fuerza.

—Cariño, papá y yo tendremos que viajar pero no puedes venir con nosotros así que te quedaras con tus abuelos ¿Te portaras bien? —El asintió jugando con la tira de tu camisa, Rowoon camino hacia ustedes y los abrazo.

—¿Por qué no puedo ir con ustedes? —Pregunto mirando a su pequeño hijo, río viéndote.

—Es un viaje especial, solo iremos mamá y yo.

—¡No quiero que mami se vaya!.

—¿Y yo? —Pregunto actuando triste, el niño te miró y luego a él.

—Creo que te extrañare —Dijo su hijo palmeando el hombro de su padre, reíste a carcajadas ante su respuesta y la cara de Rowoon.

—¿Dijo "creo"? —Te pregunto Roni, asentiste con una sonrisa—Si, debería estar acostumbrado a ser el segundo en esta relación.

—Se nos hace tarde —Le susurraste a tu esposo, salieron de la habitación y la música se escucho de nuevo. Encontraron a la madre de Rowoon poco después.

—¡Chicos! ¡Se hace tarde! —Dijo su madre— Yo me encargo del bebé.

—Necesita una distracción o llorara al vernos salir —Hablo el pelinegro.

—Luke, cariño ¿Quieres pastel de chocolate? —Los ojos del niño brillaron y salto de tus brazos para tomar la mano de su abuela, empujandola hacia el patio— ¡Disfruten!.

—Vamos antes de que regrese y me robe a su madre.

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