Capítulo 20

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Tyler:
-¿Estas bien?-Pregunto preocupado.

-Tiene fiebre, le ha sentado algo mal-me dice Alex-Voy con Liam, cuida de ella y si pasa algo más me avisas, vendré de vez en cuando a verla-dice y le da un beso en la coronilla a su hermana en modo de despedida.

-¡Que asco!-digo al ver tanto vómito después de un buen rato en el que dejó de vomitar.

-Tyler, no ayudas, sujetame el pelo-dice posando su frente en su mano.

-No es lo mismo cuando nos emborrachábamos a ahora-me excuso-Cuando estábamos borrachos yo era el que vomitaba y tú la que te reías de mí-me río ante ese recuerdo.

-¿Te acuerdas la primera vez que me emborraché?-dice riendo un poco.

-Como olvidarlo, tenías 15 años, Hailey me llamo desperada, también borracha, media hora después tu hermano nos pillo y casi te mata, yo no paraba de reírme-digo riendo.

-Y Liam solo sacaba fotos mientras que Rayan, Adrián y Mario posaban a mí lado-dice riendo.-Y luego esas fotos acabaron en el periódico escolar-dice dejando de reír.

-Y nos tocó gritar a Liam, aunque él no fué-digo suspirando con gracia.

-Y resulta que fué Alexa Hecken-dice negando con la cabeza.

-Por que estaba celosa de tí-digo abrazándola por la espalda.

-Normal, has visto que tíos más buenos tengo de amigos-bromea.

-Sobretodo tu mejor amigo-digo sacando mi lado egocéntrico.

-Te quiero mucho, Ty, siempre estás ahí-dice poniéndose ñoña, como siempre que está mala.

-Y yo, tu también estás siempre para mí-digo dándole un beso en la coronilla.

-Creo que me gusta Liam-dice bajito.

-Yo también lo creo, estás enamorada de él-digo con una pequeña sonrisa.

-No quiero estarlo, me da miedo-me confiesa con lágrimas en los ojos, no sé si de tanto esfuerzo por vomitar o por la confesión.

-No tienes que tener miedo, conozco a Liam, jamás te hará ningún tipo de daño, tampoco le conviene o acabará mal-digo acariciándole la espalda.

-También conocíais a Zack y mira lo que me hizo-dice en un susurro, solo para que le oiga yo.

-Pero Zack resultó ser un lobo disfrazado de oveja-digo con rabia al recordar todo lo que ese cabrón le hizo pasar.

-Zack es un cabrón, no vale la pena recordarle-dice quitándole importancia aunque puedo ver el dolor en sus ojos todavía al hablar de su ex.

Alex:
-¡Tío deja de potar!, ¡Huele mal!-me quejo.

-¡Como si yo quisiera vomitar!,
Imbécil-dice molesto.

-¡Pues si no quieres no lo hagas!-digo obvio.

-Claro, espera que le digo a mi garganta que deje de vomitar, que te molesta-dice rodando los ojos.

-Pues no estaría mal-digo pasando mi mano por mi pelo.

-Vete a la mierda, Alex, se supone que estás aquí para ayudarme no para joderme más-dice rodando los ojos.

-Estás sudando tío, normal que oliera mal, además yo te estoy ayudando-digo indignado, en realidad Liam tenía razón, solo le estaba jodiendo, pero jamás admitiría que tiene razón.

-Como no quieres que sude, llevo vomitando una hora y diecisiete minutos-dice cansado.

-Dejame volver a ponerte el termómetro-digo poniéndoselo-39'8°, estás ardiendo, date una ducha de agua fría para que se baje la fiebre-digo saliendo del baño y yendo a ver a mi hermana.

Entro al baño y me encuentro a Alba tirada en el suelo y a Tyler acariciándole la espalda ay sujetándole el pelo.

-¿Como estás?-digo bostezando, son las 5:47 de la madrugada y llevamos desde las 4:30 que han empezado a vomitar.

-Mal-dice Alba-Me duele la cabeza-dice suspirando.

-Alex, vete a dormir, ya me encargo yo-dice Tyler.

-Liam tiene mucha fiebre, se está duchando para que me baje la fiebre, voy a despertar a Rayan y a Mario para hacer turnos-digo cansado.

-Que Rayan se encargue de Liam y Mario de Alba, si no Rayan estará molestando a Alba-dice Tyler levantándose del suelo.

-Ponte el termómetro-le digo poniéndoselo-39'4, tú también tienes fiebre, date una ducha, Tyler, tráele ropa, yo le voy a llevar ropa a Liam.

Salgo del baño, camino hasta el armario y le cojo una camiseta gris y unos pantalones cortos negros, de chándal, para que esté más cómodo y por último los bóxer, una vez tengo todo camino hasta mi baño, se lo dejo y le cierro la puerta para darle intimidad.

-Ya está-me avisa y entro al baño.

-¿Estas mejor?-Pregunto tocándole la frente.

-No, pero quiero dormir-dice bostezando-Voy a mí habitación-dice y sale de mi habitación/baño.

-Vas a estar escuchando vomitar a Alba-digo yendo tras él.

-Tío, ¿Estás mejor?-Le pregunta Tyler saliendo del baño, supongo que después de haberle dejado el nuevo pijama a Alba.

-No, solo quiero dormir-dice Liam tirándose a la cama.

-¿Qué es todo este ruido?-pregunta un adormilado Rayan y al lado suyo un Mario, apoyado en el marco de la puerta, también medio dormido.

-Nos habéis despertado-dice Mario.

-Liam y Alba están malos, tiene mucha fiebre y no paran de vomitar-digo señalando a Liam.

-¿Por qué? ¿Les ha sentado algo mal?-pregunta Rayan acercándose a Liam.

-Yo no comí nada después de la cena-dice Liam incorporándose en la cama.

-Pues te habrá hecho mal la cena, pero es raro-dice Mario.

-Ya me he duchado-dice saliendo del baño Alba, bajo la atenta mirada de todos.

-¿Y tu cómo estás?-Le pregunta Mario.

-Me duele todo y tengo sueño-dice apoyándose en mi hombro.

-Será mejor que los dos duerman aquí, si no pueden pegarnoslo a los demás-dice Tyler.

-Tienes razón, si necesitáis algo avisarnos-dice Rayan para luego salir de la habitación junto los demás y dejarlos descansar.

-Voy a llamar a mi madre, no se qué pueden comer los vomitadores-bromeo sacando el móvil y marcando a mi madre, tres tonos después me coge.

-¿Que pasa hijo?-pregunta mi madre adormilada.

-Liam y Alba están malos, ¿Que comen los vomitadores?-Pregunto rascándome nuca mientras camino hasta mi cuarto.

-¿Están bien?, Pásame con ellos-dice mi padre rápidamente.

-¿Que pasa?-escucho a mí padre por detrás.

-Los niños están malos, Alex-le responde mi madre.

-Ahora están durmiendo, no pueden hablar-digo bostezando-Les hemos metido en la habitación de Liam para que no contagien a nadie más-digo sentándome en mi cama.

-Bien hecho, aunque vómitos no se contagian, para comer cosas blandas, sopa, puré, yogures naturales, arroz blanco, cosas así, nada de beber ni refrescos-dice mi padre.

-Gracias-les agradezco toda la lista que me han hecho.

-Y si se siguen encontrando mal, que vayan al médico-dice mi madre.

-Gracias, me voy a dormir, Adiós, si, si, yo también os quiero, adiós-me despido y cuelgo, sin pensarlo me meto en la cama a dormir.

Van a ser unos días difíciles.

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