CAPÍTULO 17

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Se encontraban ahora caminando por el sendero que habían visto desde la ventana del restaurante, Jin llevaba en sus manos las flores que Nam le había dado. El sendero conducía a un pequeño camino con árboles a cada lado, el matiz de las hojas de los arboles hacían lucir cálido el ambiente pese a la fría brisa que recorría, meciendo levemente sus ramas aunado al atardecer, con los leves rayos rojizos del sol que amenazaba con ocultarse. Se encontraba aproximadamente a la mitad del camino cuando Nam se detuvo.

-Jin... -el chico había avanzado unos pasos más, no se había percatado que el moreno se había detenido de repente, y es que iba demasiado asombrado con el paisaje nuevo que estaba descubriendo, nunca había estado en un lugar así, y el estar ahí con el parecía todo un sueño. El chico salió de su letargo, volteo hacia quien le estaba hablando.

- ¿Pasa algo? –se encontraba desconcertado por su abrupta manera en la que se había detenido.

Nam se acercó a él y lo tomo de la mano, la sostuvo durante unos segundos, sin mencionar palabra alguna, pareciera que se debatía sobre algo y no sabía cómo abordar el tema. Jin por su parte lo miraba tratando de descifrar que era aquello que estaba aquejando al chico, pero tampoco se atrevía a mencionar palabra, dándole el tiempo necesario. Dejando salir un pesado suspiro introdujo su mano al abrigo ocultando algo completamente en ella, tomo la mano del pelinegro y le deposito en ella. Miró lo que Nam había colocado en su mano. Eran dos collares de plata, uno con un dije de luna a juego y el otro con un sol, el conjunto formaba un eclipse; los miro fascinado, realmente la joyería era muy bella.

-Realmente pensé en darte un anillo de parejas, ya que no te di nada cuando aceptaste mis sentimientos, pero... no sabía cómo lo tomarías, ya que nuestra relación aún no ha sido gritada a los cuatro vientos y en la escuela pueden sospechar que usemos anillos, así que... -Jin no le dejo continuar, se había acercado a él dándole un beso suave el cual fue como un tranquilizante para el chico que se encontraba bastante nervioso, dejándose llevar por la suavidad de los labios que rosaban los suyos.

-No me importa que no tengamos anillos de pareja, eso solo es una formalidad que no necesitamos, lo que tenemos es lo que importa –decía Jin mientras lo abrazaba por el torso, para poco después separarse.

Cada uno de los dijes tenía el nombre del otro, con una pequeña frase, Nam le colocó el collar con el dije del sol a Jin, el cual tenía el nombre del moreno y escrito "Llegaste como un sol en mis días de lluvia". El collar con el dije de luna tenía el nombre del pelinegro y escrito "Eres la luna que ilumina mis noches oscuras". Jin miraba el dije de ese collar, la frase en ella se la había dicho a Nam cuando fue dado de alta después del incidente, no podía creer que hubiera oído a detalle las palabras que había dicho en un susurro por pena a lo que pudiera pensar y que siempre había creído que éste no las había escuchado.

-Tu... ¿Oíste cuando dije esto? –el chico parecía anonadado.

-Si... te escuché decirlas, pero no quise mencionar nada en ese entonces, ya que las dijiste casi en un susurro, solo las guardé en mi corazón y ahora quiero que las portes con orgullo, porque de ahora en adelante me llevaras contigo como a ti te llevaré conmigo. –se unieron en un beso cargado con las emociones que cada uno albergaba-. Feliz cumpleaños mi amor...

La noche ya comenzaba a abrirse paso, regresaron tomados de la mano al hotel, Jin se encontraba muy feliz, había sido el mejor cumpleaños que había tenido y estar con el chico al que tanto amaba para él era más que suficiente, se encargaba de llenarlo de detalles, las flores nunca faltaban y el collar, ahora el moreno estaría con él en todo momento.

(¨*•. Encuentro.•*¨) [NamJin] •Terminada•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora