(¨*•. Encuentro.•*¨) [NamJin] •Terminada•

CAPÍTULO 52 FINAL

El día de la tan anhelada boda había llegado, ésta se llevaría a cabo en el jardín de la casa de Jin y Nam. El jardín era considerablemente grande con su césped, las flores que daban cierto aire primaveral al ya iniciado otoño, aunado a la vista del fondo, el lago y el espeso bosque. Pese a que los padres de Yoongi no les había hecho gracia la idea, el castaño se había aferrado a no querer usar un salón, ni siquiera el jardín de la casa de sus padres para albergar a un sinnúmero de personas llenas de hipocresía y felicitaciones falsas.

El jardín estaba arreglado con unas cuantas mesas redondas con capacidad para 6 personas cada una con centros florales con rosas rojas y un girasol, habían colocado farolas e improvisado una pequeña pista de baile. Ademas contaba con un árbol que, aunque desconocían su nombre, daba pequeñas flores blancas; bajo de él, habían colocado un arco de madera con telas de seda blanca adornado con rosas blancas y rosas. La casa estaba inundada por las risas, y el bullicio de todos los que entraban y salían perfeccionando todo para el evento al que quedaba casi nada por iniciar. Las demás habitaciones de la casa se habían condicionado para los novios, cada quien ocupaba una, Jin se encontraba con Yoongi y Nam con Hobi.

-Es la primera vez que te noto nervioso -Yoongi se encontraba mirando a través del ventanal a las personas que poco a poco iban llegando.

-Lo estoy, siento que voy a hacer el ridículo.

-No tienes porque pensar eso.

-Hubiera sido mejor que no tuviéramos gente... -el castaño miraba a Jin que se encontraba sentado sobre la cama-, ¿aún estoy a tiempo para salir corriendo verdad? -Jin le dio una mueca de desaprobación.

-Esta bien que estés nervioso, es normal, y no, no vas a hacer el ridículo, cuando salgas por la puerta piensa en que solo están Hobi y tú, solo céntrate en él y olvídate de todos nosotros. Se supone que debes estar feliz, no angustiado.

-Lo sé, pero esto se sale de mi control.

-Sera mejor que termines de arreglarte, ya falta poco -el pelinegro se puso de pie-, te esperamos abajo.

El silencio inundó la habitación, realmente Yoongi no daba crédito a su nerviosismo, siendo una persona de negocios, inteligente que inclusive influía temor ante algunas personas por su arrogancia y prepotencia y ahí estaba muerto de miedo por una ceremonia o talvez es simplemente felicidad disfrazada de nerviosismo por cumplir un sueño oculto.

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En la habitación contigua la situación era totalmente diferente, Hobi estaba feliz, con cierto nerviosismo, pero su sonrisa no lo delataba.

-Namjoon-ah me siento tan feliz, no creí que esto alguna vez sucedería -Nam se encontraba arreglando la corbata de Hobi.

-Entiendo tu felicidad, pero recuerda que esto es solo un simple formalismo.

-Lo sé, su amor siempre me ha pertenecido, pero siempre quise que las cosas con él fueran correctas.

-Y lo lograste, sus padres te aceptaron pese a que en un principio te alejaron de él.

-Sabes Namjoon-ah, es triste darte cuenta que a veces el amor no basta, y que para sus padres sea más importante mi renombre.

-Lo sé Hobi, pero para Yoongi no lo es, nunca lo fue, y tu lo sabes, lo escuchaste de su boca.

-No entiendo a que te refieres.

-Te vi esa vez, nuestros amores estaban hablando sobre la boda. Yoongi dijo que no necesitaba esto, él era feliz con el simple hecho de que se mudaran a vivir juntos, tu quieres darle una boda por quedar bien ante la sociedad a la que él pertenece, no realmente porque tu lo desees.