Domingo, 31 de octubre del 2021.
—Te odio con todo mi corazón, Hades Blackford—le dije, mientras él me jalaba y nos adentrábamos más dentro de aquel lugar de cuerpos sudados y mucha bebida alcohólica que en algún momento te caía encima.
La música estaba tan alta que era muy posible que no haya escuchado mi grito. Santo diablo, como odiaba a Ambrosia con todo mi corazón. La gente estaba más exaltada este día, saltando, bailando, gritando, ligando... todo estaba peor hoy.
Hades siguió tironeando de mi muñeca hasta llegar a la puerta que separaba la zona VIP del salón común, lo dejaron pasar inmediatamente al reconocerlo y yo pasé junto a él. aquí había menos ruido que abajo y le agradecía mentalmente a Hades que por lo menos tuviera la decencia de llevarme a un lugar donde podría no sentir que el suelo retumbaba.
—No puedes odiarme—al parecer si me escuchó—. ¿Cómo alguien podría odiarme?
—Es por eso exactamente que alguien podría odiarte—dije, hastiada.
Él me soltó y se giró. Sonrió.
Mierda, debí vestirlo con una bolsa de papas.
Vestirlo como el príncipe heredero, Callisto Regulus, de uno de mis manhwas favoritos, había sido a la vez un error y la mejor idea que se me había ocurrido. El traje le quedaba tan bien que me daba miedo, los lentes de contacto color rubí eran como si hubiera nacido con ellos naturalmente y el cabello rubio... le quedaba perfecto.
Maldito chico que le queda todo bien.
—No lo creo—dijo sin percatarse que yo lo miraba como si fuera el verdadero amor de mi vida—. Y todavía me pregunto de qué rayos me disfrazaste, Jazmín.
Rodé los ojos.
—Un príncipe bonito—jamás en mi vida le diría de que andaba vestido, iba a matarme si lo supiera.
—Lo bonito lo estoy dando yo, Chaki chan—se sentó y me senté frente a él cruzando mis piernas.
Perdón, pero Callisto es mucho más atractivo que tu, loco y obsesivo, pero más bonito que tu—quise decir.
—Ya, claro—dije en su lugar—. ¿Y qué haremos?
Me miró alzando una ceja.
— ¿Qué crees que haremos?
—Tú fuiste él que me trajo aquí, algo debiste haber pensado—me encogí de hombros
—Chaki chan, es una fiesta ¿Qué coño se hacen en las fiestas?
— ¿Beber? ¿Bailar? ¿Ligar? ¿Quedar como animal atropellado?
—Lo último es cosa de cada quien—miró hacia abajo a las personas que bailaban—. Ahora que estoy aquí... no tengo ganas de nada de lo que dijiste.
— ¡¿Qué?! —chillé. Él me miró en cuanto me levanté como un resorte.
Levantó los hombros con desinterés.
—Eso, no tengo ganas de nada excepto de estar aquí.
Me dio un tic en el ojo.
—Hades—respiré hondo y me acerqué hasta casi chocar mis piernas con las suyas. Él tuvo que inclinar la cabeza para mirarme a los ojos—. No me puse un puñetero traje de Jazmín y salí contigo para que luego me digas que no tienes ganas de existir—lo señalé—. Te vas a levantar de este sofá y vas a disfrutar esta noche.
Hizo una mueca y miró de nuevo hacia abajo.
—La verdad, no tengo ganas de ligar con alguien...
— ¡Y quién habló de ligar! —Me miró de nuevo y sonreí—. Hades, una follada no es la única forma de pasar una buena noche. Baila, ríe, bebe. Joder, puedes hasta fumar si quieres, pero no voy a permitir que te quedes ahí como todo un tonto pensando en tu ex—le extendí mi mano—. ¿Bajamos y disfrutamos hasta que nos salgan heridas en los pies?

ESTÁS LEYENDO
El caos que somos [BORRADOR]
FanfictionHades era una tormenta caótica. Analise fue un cielo soleado y otras veces con lloviznas. Para Hades, tener a su novia a miles de kilómetros de distancia nunca fue fácil. Nunca. Mucho menos cuando se encuentra cara a cara con una inquisitiva mujer d...