El caos que somos [BORRADOR]

Capítulo 8| La fiesta

Martes, 19 de octubre del 2021.

A la mañana siguiente luego de volver de la universidad de lo más tarde, Hades me ayudó a traer las cosas de la casa de mi abuela. Ya casi a las diez de las noches terminamos de los más exhaustos.

—Te dejo con que te arreglas, tus cajas pesan. Me voy a dormir—fue lo que me dijo y se metió a su habitación.

Coloqué la caja que sostenía encima de la cama. El tacón de mis botas hacían un suave crack contra el piso de madera oscuro, observé a mí alrededor y me rasqué el brazo; el armario era algo grande y empotrado en la pared de color azul claro, no había televisor y apenas dos ventanas. Me acerqué a una y la abrí, en ella me di cuenta que había estaba la escalera de incendios, miré hacia el frente y me distraje con la vista de la ciudad.

Listo.

Volvía a vivir cerca de la universidad.

Sonreí.

Volví a entrar y cerré la ventana, me tiré en la cama y miré el techo blanco y levanté mi mano como si lo fuera a tocar. Cerré los ojos y respiré pesadamente, cansada. De pronto volví a abrirlos y fruncí el ceño, levantándome. Me acerqué a la puerta y la abrí, lo que escuché se hizo mucho más fuerte y me acerqué a la sala, ahí estaba Hades con el celular cerca de la oreja.

— ¿En serio, Zoe?... ¡No! ¡Estamos peleando por la misma mierda desde hace una semana! ¡No creas que-!...—Se rió sin humor, su mirada estaba oscurecida mirando un punto de la pared—. Zoe...

Me estremecí.

Su voz...

—Vale—cortó y tiró el móvil al sofá del frente, se tiró en el sofá detrás de él y miró el techo.

Decidí que era mejor irme, pero... se veía bastante mal. Miré a mí alrededor y noté una mesita en el pasillo en donde estaban sus cigarrillos. Volví a mirarlo y noté que se registraba los bolsillos. Lo tomé.

—Hey—me miró.

—Regla numero dos—murmuró, volviendo a mirar la pared.

—Me importa una mierda tu vida, Hades—dije, lo más indiferente que pude—. Salí porque gritas mucho.

Sonrió falsamente, pero no dijo nada.

—Toma—le lancé los cigarrillos y los tomó por reflejo.

Me miró y luego la caja, volviendo a mirarme. Alzó una ceja.

—A veces gritar no mejora las cosas—murmuré, volviendo a irme por donde vine.

***

Sábado, 23 de octubre del 2021.

—Entonces vives con Hades—dijo María como quien no quiere la cosa.

—Ajá—la música estaba alta en el club, ella tomó de su chupito y me miró por encima del vaso—. ¿Qué?

—No es por nada—sonrió con diversión—. Solo te miro.

Rodé los ojos. María soltó una risilla y se fue hacia la mesa donde estaban todos los demás excepto Marlon que como siempre no me permitía una fiestecita, así que se quedó para seguir estudiando. Me pasé una mano por el cabello y lo llevé hacia un lado, tomé un trago de mi vaso y observé las personas en la pista de baile, volví a mirar mi vaso.

Esto era aburrido.

— ¡Eh, Analise!

Miré hacia atrás y los chicos me estaban llamando con la mano. Suspiré y caminé hacia ellos. Me senté al lado de Hades y miré a Josh. Ahí me di cuenta de que todos me estaban mirando.