Capítulo 69

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Narra Zdenka:

La costumbre de las velas ocurre con menor sentimentalismo del que yo hubiera imaginado hace unas semanas. Digo algunas palabras sobre Suzane, pero están huecas, porque no las siento. 

Después de que dejamos las velas consumiéndose, muchos bajan las gradas para reincorporarse a la sala, tengo la misma intención, pero Saúl me toma del brazo para atajarme, me pide charlar, afirmo con la cabeza, Priya y Hyung vienen por detrás, sin embargo Saúl reacciona de inmediato con reticencia hasta que se da la vuelta:

—Si no les molesta, quiero hablar sólo con ella—trata de ser tajante, y me fastidia que lo diga con tono autoritario, como si yo no tendría poder de decisión.

—En realidad, creo que Arián sabe mucho más que yo sobre esto. Es a él a quien debemos escuchar. 

—Como digas—Me suelta enseguida y camina hacia la que era su habitación. Frunzo el ceño y luego elevo los hombros.

—Tu amigo es un poco raro—Chae hace una observación bajando la cabeza unos grados para no lucir demasiado alto—¿Eran novios?

—No.

Hyungwon entra agachando un poco la cabeza, con las manos en los bolsillos del saco. Me muestra una silla y después se sienta a mi lado, a un costado, cerca de la puerta. Priya está a mi lado izquierdo, me codea aguantando la risa, mirando a Saúl sentarse en la cama, con cara de pocos amigos, después de que éste cierra la puerta.

Un silencio tenso se siente al interior del cuarto, no sé como romperlo. Así que decido dejarle esa carga a alguien más.

—Supongo que debemos iniciar por mi teoría. ¿Están de acuerdo?—Me limito a afirmar con la cabeza—Ok... Hace tiempo estuve investigando sobre cultos religiosos y sectas, entre ellas salió el nombre de "La órden del templo lunar", donde se presume están metidos desde personas comunes, hasta dueños de medios, autoridades judiciales...—Suspira— Creo que eso explicaría que el caso de la Bestia no esté avanzando. Garrel, un amigo de la policía, me dijo que desde hace tiempo han estado ocurriendo hechos sangrientos que dejan de figurar en los registros. 

—¿En serio crees que mi hermana tenía que ver con esa gente?—Saúl me mira indignado, sus hombros lucen más grandes por la posición que ha elegido para sentarse. Entreabro los labios, no sé que responder

—Pienso que independientemente de los errores que haya cometido una persona, es necesario no dejar de verla como la víctima de un crimen. Hay que tener una mente abierta a las posibilidades que se nos presenten.

—No me respondiste ¿Sí o no?

—Tu mismo dijiste que Suzane era extraña desde que eran niños, no comprendo porqué ahora te sientes atacado.

—¿Quién dijo que me siento atacado?

—Bueno bro, tu actitud lo deja en evidencia—Interviene Priya. 

—Mendoza me dijo que estaban muy cerca de atrapar al asesino, sólo me pone nervioso la idea de que arruinen las investigaciones de la policía.

—¿Realmente le creíste a Mendoza?—Hyungwon lanza la pregunta de repente, su rostro luce diferente, como si fuera un debate y ya se encontrara harto de escuchar estupideces—Él ni siquiera arma interrogatorios para este caso—Suelta un bufido. 

—Es por esto que sólo quería hablar contigo—Saúl me mira fijamente, como reclamándome. 

—Básicamente, es toda la información que tenemos. Te conté que el problema de personalidad de Suzane parecía haberse agravado, nunca la creí ser capaz de... tener un... amante por dinero. Ahora, Chae fue a investigar al lugar al que iba tu hermana, descubrió que no había nada chueco, pero hoy habrá una especie de fiesta y consiguió que constáramos en una lista para poder entrar

—¿Porqué quieren ir si es que no había nada chueco?

—Porque hay algo que no comenté, el complejo de cabañas al que fui tiene "un problema" con sus cámaras, funcionan con normalidad hasta la medianoche por el sistema de alimentación de energía, pero existe un lapso entre las una y las cuatro de la madrugada que es información perdida. 

—Entonces tratas de decirme que no tienes idea de lo que podría pasar o a qué estás exponiéndolas

—Es un buen punto. No obligaré a nadie a hacer algo que no quiere—Enseguida gira su cabeza para verme—Si no te sientes segura de esto, chavalita, puedo sólo llevarte a tu casa. 

Acaricio su antebrazo y lo estrecho, analizo si estoy siendo muy irresponsable al exponerme, pero una parte de mi necesita saber y no le teme a la muerte... en realidad... la busca.

—Yo estoy bien, no tengo dudas, pero comprendería si tu o Priya no quieren ir.

Cuando ladeo la cara para mirarla, Priya curvea la boca hacia abajo y mueve la cabeza.

—Neh... Yo tampoco tengo dudas, de todas formas ustedes dos serán los que corran más riesgos, yo solo tendré que esperar afuera o en el peor de los casos, llamar a la policía. 

—Lo que van a hacer es muy estúpido ¿Planean ir desarmados?

Chae carraspea y resopla después, como si estaría harto de los peros

—Tengo permiso para portar armas, así que traje una. ¿Y si en lugar de quejarte sobre el plan sólo vienes con nosotros y te encargas de que todo esto salga bien? 



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