CHARLOTTE.
No puedo sacarme de la mente la imagen que tuve está madrugada antes de partir. Por más vueltas que le doy me es imposible borrarla.
Dimitry en el sillón especial, con una pierna arriba del respaldo, la cabeza mal posicionada, en el brazo izquierdo Dereck durmiendo pacíficamente mientras que Anelisse lo hacía por igual en el derecho.
Los días con ellos están contados y mi corazón parece que no va a soportarlo, mucho más cuando parece que me pescado alguna infección porque me siento enferma. Moví la cabeza en señal de afirmación a lo que Alejandra preguntó sin siquiera haberla oído.
Tenemos comunicación, vamos a lograrlo. Baje de la camioneta mirando a los alrededores dónde apenas pocos locales estaban en el lugar. Mucho mejor.
—¿Carlotta Kozlova?—Quiso saber ella acomodando los lentes de Sol.
—Si—dije abriendo el maletero.—Te darás con rapidez que es ella, no pertenece a ese lugar.
Baje la vista a sus pies.
—¿Vas a poder correr con eso en caso de ser necesario?—Señale sus tacones rojos.
Me guiño un ojo sonriendo.
—Me has visto hacerlo corriendo ebria.
—Cierto—dije con rapidez, mientras trataba de respirar lo mejor que podía.
—¿Te sientes bien?
—Me he estado sintiendo mal estos días—le reste importancia—, algo de lo que cocino Rita debio cacerme mal.
—¿Estas segura?—Sus ojos miel me miraron con cierta preocupación.
—Sí, no te preocupes.
Félix acomodo su camiseta tomando un suspiro. Alejandra se acercó a él y enganchó su brazo con el suyo.
—Vamos, marido ruso de mentiras—ella me miró.—Ten presente que no llevamos armas.
Se colgó su bolso y los dos caminaron rumbo a la prisión. Mire al mafioso multiusos que rompió el cristal de un local abandonado, me señaló las mochilas en silencio que tomé cerrando nuevamente.
Siempre con traje.
Lo seguí en silencio, el olor a viejo y guardado estaba en el ambiente, lo que hizo que mi malestar aumentara. Se lo que trata de hacer, lo que tratamos de hacer. Y es lo mejor para no confundir las cosas entre ambos. Solamente tenemos sexo. Buen sexo para ser sincera.
Cometí el error de admitir mis sentimientos en voz alta para después ser traicionada. No lo volveré a cometer. Un "te amo" de mi boca no volverá a salir. Y a eso me quiero seguir aferrando a pesar de que mis barreras esten disminuyendo.
Pateó la puerta con fuerza que daba para la azotea, giré el rostro al escuchar el silbido con fuerza a pocos metros de nosotros.
Orlando me sonrió y levantó el brazo, sus gafas cubrían sus ojos oliva.
—Horuna está en la torre norte esperando—avise sacando el rifle.
—Bien. Trabajaré hasta tarde en acabar la toxina—dijo sin mirarme.
Desenfundo el misil en silencio. Yo por mi parte me instalé boca abajo abriendo las piernas para estirarme. Ajuste la lentilla comenzando mi trabajo.
Cuatro torres custodiadas por guardias.
—¿Yo dos y tú otras dos?—Oí a Orlando por el intercomunicador.
—Bien—hable.
Hice el primer disparo dando el blanco, seguí con su compañero. Los tiros de Orlando también fueron limpios.
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PASIÓN & PODER: 𝗟𝗜𝗕𝗥𝗢 𝗜 & 𝗜𝗜 | 𝗦𝗘𝗥𝗜𝗘 𝗣𝗢𝗗𝗘𝗥 #1.
Ficción General𝗦𝗘𝗥𝗜𝗘 𝗣𝗢𝗗𝗘𝗥: 𝗟𝗜𝗕𝗥𝗢 𝗜 & 𝗜𝗜 | 𝗖𝗢𝗠𝗣𝗟𝗘𝗧𝗔. «SINOPSIS EN EL INTERIOR.» Se dice que en el juego del poder, la reina es la pieza más importante del tablero. Tras haber cometido insubordinación la agente Charlotte Brown fue reubica...