❤️‍🔥CAPÍTULO 4.

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MIRIAM HARRISON.

Soy la única señora De Alba.

La única que tiene el poder suficiente para tener asegurado el futuro de mis hijos.

He tenido una buena vida pues al fin logré deshacerme de esa mujer vulgar y corriente que solamente estaba detrás de mi marido. Mis hijos son los únicos que pueden seguir con el legado de su padre.

Mis gemelos y mi niña de solo ocho meses.

La próxima generación De Alba Harrison.

Tengo el puesto de subdirectora de la OMING. Stefan me concedió el honor de tenerlo y no a uno de sus hijos. Pero se que Hugo y Samuel no están contentos con eso, sin embargo no pueden hacer nada.

Para eso tendrían que comenzar una petición y aquí nadie se atreve a contradecirme.

Sé que logré acabar con Charlotte Morozova Eiisman. No he tenido noticias sobre ella después de que Ángela me diera la noticia de que podríamos mandar drogarla tras que diera a luz a su pequeño bastardo que murió a las pocas horas de nacer, pues el ruso solamente nos dió la llave para convertirla en adicta.

Mi esposo me ama y no se cansa de confirmarlo día con día. Tenemos nuestra familia feliz. La OMING sigue siendo la mejor a pesar de las pocas fallas que hemos presentado, aún así somos la ley.

Siempre supe que una chiquilla bonita no sería una rival para mí. Todos la vimos derrumbarse cuando su mocoso murió en la explosión, sin embargo, nadie habla del día en dónde fue rescatada de la Bratva.

Llegó en silencio, sin sus estúpidos aires de superioridad, cabizbaja como siempre debió ser.

Sin embargo, nadie se esperaba que se convirtiera en la mayor criminal a nivel internacional. La noticia de que asesinó a mi cuñado estuvo por meses en el aire. Una mujer que logró hacer tal magnitud en las narices de la mayor seguridad en el mundo.

Ella acabó consigo misma. Y si sobrevivo en prisión en Irak no. Quién manejaba sus transferencias era mi marido junto con Stefan.

—¡Nicolás!—Grité antes de poner una sonrisa a los cabos que se detuvieron ante mi arrebato.—Ven aquí, Nicolás.

Nicolás y Jared son los herederos de la OMING. Natalia es la princesita de Vladimir.

—Quiero ver a los soldados, mami—me dice tras llegar a mí todo sucio y polvoriento.

Mi problema con este niño es que es insoportable, entiendo que ame este mundo militar pero todo tiene un límite.

—No, tienes que quedarte aquí—lo jale de brazo haciendo que se sentara a mi lado.

Angela suspiro negando la cabeza, si a ella la saca de quicio a mí que soy su madre es inimaginable.

—Tu padre es el dueño de todo esto, así que debes tener compostura—añade Ángela.

Los ojos aguamarina de Nicolás son tan intensos que nunca he podido soportar verlo tanto tiempo.

—Sí, abuela, pero Jared...

—Jared ama estar con sus videojuegos—lo cortó ella—, ahora vete a la oficina de tu padre.

Él asiente yéndose en dirección a la oficina de Vladimir que desde ayer se encuentra sola.

La caída de los Morozova fue fácil y limpia.

No tienen sangre para ser criminales, fundar una organización militar y quitarles el poder fue mejor de lo que se planeó.

—¿Cómo van las cosas con mi hijo?—Me pregunto Ángela quién sostiene su taza de té.

Ganarme su amor, cariño y confianza al final no fue demasiado difícil. Ambas tenemos bien claras las metas.

Pasión & Poder: 𝗟𝗜𝗕𝗥𝗢 𝗜 & 𝗜𝗜 | 𝗦𝗘𝗥𝗜𝗘 𝗣𝗢𝗗𝗘𝗥 #1.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora