CAPÍTULO 6: La reinauguración

6.8K 398 390
                                    

Lorraine

Hoy es un gran día por dos motivos prinicipales. Uno, es el primer día de escuela de los más peques de la casa y dos, hoy se reinaugura el Sweet Paradise Café.

He estado trabajando mano a mano con Lily durante las últimas semanas y ciertamente hemos quedado muy complacidas con el resultado. Ahora luce más como una cafetería para todo el público donde podrías pasar una linda tarde en lugar de dar la apariencia de un sitio sofisticado.

Mateo asistirá al mismo colegio de Jessie ya que los padres de la pequeña son demasiado testarudos como para escuchar o tomar en cuenta mis objeciones. Pero yo tampoco les permití exponer las suyas cuando insistí en que trabajaría hasta pagarles el último centavo por todo lo que han hecho por mí. Según ellos, Mat y yo somos como mi tía para ellos y están encantados con nuestra estancia en su hogar, pero sé muy bien que es diferente y tarde o temprano tendré que valerme por mí misma para sostener a mi hijo.

—¿Estás listo, cariño? —le sonreí a mi pequeño.

El uniforme le queda excelente. Este consiste en una camisa blanca, una chaqueta rojo vino con bordes negros, una corbata y pantalones del mismo color. Su cabello rubio estaba perfectamente peinado y sus nuevas zapatillas vans a juego con el uniforme completaban su look.

—¡Super listo! —asintió repetidas veces haciéndome reír.

—Entonces vamos.

Tomé su mochila de Spider-man —su superhéroe favorito— y  a continuación descendimos al primer piso para posteriormente ingresar al comedor. Allí nos esperaban todos mientras Fiona servía el desayuno con ayuda de Lils. Si hay algo que rescato mucho es que en esta mansión no se trata a la servidumbre como personas inferiores, al contrario. Es admirable cómo todos son tratados como iguales e incluso los ayudan efectuar el trabajo por el que se les paga, ahora entiendo a lo que se referían Miriam y Estrella cuando llegué, mantienen una relación estrecha más allá de lo profesional.

—Buenos días —saludamos Mat y yo al unísono mientras tomábamos asiento junto a nuestra tía.

—Buenos días —respondieron todos a coro.

—Ey, Mateo, déjame verte —le sonrió Evan a lo que el pequeño se levantó y ''modeló'' para él, de un tiempo para acá se están llevando muchísimo mejor—. ¡Wow! Es como una versión en miniatura de Zack.

Según sé, Zack es uno de los mejores amigos de Evan. Cuanto más me cuentan de ellos, más crecen mis ganas de conocerlos. Hoy, al ser el día de la reinauguración del café, todos asistirán y los conoceré por fin.

—Yo también quiero desfilar —chilló Jessie antes de levantarse de su asiento y rodear la mesa contoneando sus pequeñas y casi inexistentes caderas, su uniforme es igual al de Mateo a excepción de que ella usa una falda—. ¿Cómo me veo? —posó sus manitas en su cintura haciendo una pose...¿sensual?

—Tú siempre te ves hermosa, princesa.

Nos dispusimos a desayunar, cosa que los niños hicieron muy rápido en vista de lo emocionados que se encontraban por el primer día de clases. Al concluir, nos dirigimos a la sala de estar en donde Lily y yo nos dimos la tarea de retratar a nuestros pequeños hasta el cansancio, o bueno, hasta que ambos alegaron que ya no podían sonreír ni un segundo más.

—Se ven tan tiernos —Lils pellizcó las mejillas de ambos.

—Los uniformes les quedan genial, se ven tan lindos —chillé sin poder evitarlo, esas preciosuras lo ameritan.

—¿Listos para el primer día? —preguntó la tía.

—Sí —afirmaron ambos al unísono.

—Fred nos espera afuera —anunció Evan entrando al salón—. Vamos, niños.

Contrato: "Familia en Arreglo"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora