Capítulo| 57

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Charlotte

–¿Estás segura de que quieres emborracharte? –asiento decidida a la pregunta de Mack y bebo mi chupito número dos. Menos mal que en este sitio no importa si eres menor de edad.

Hoy se cumple nuestro tercer día aquí. Hemos salido, visitado, ido a tiendas a comprar y todo ha ido bien. Me sorprendió y alegro que, al día siguiente de la pelea, Jake se haya disculpado con todos, y se lo demostré esa misma noche en nuestra habitación. Hablé con Jaiden un montón al igual que con Nath y me dijeron que estaban felices por haberme encontrado aquí y saber que estarían conmigo.

Hemos ido a la playa y gracias a eso tengo un bonito color tostado en la piel. Aún recuerdo la cara de Matt, Louis y Jake al vernos con nuestros biquinis. Lo máximo.

Mañana es mi cumpleaños y he decidido comenzarlo borracha. No es algo usual en mí, de hecho, casi no bebo alcohol, pero hoy es una excepción. Además, que los chicos se encuentran a dos mesas de nosotras así que no me preocupo.

Se supone que era una salida de chicas a solas, pero ellos dijeron que así vestidas no nos iban a dejar. Por más que les insistimos no dieron su brazo a torcer. Y es que no entiendo cuál era el problema con los vestidos; Mack llevaba uno corto con escote halter y la espalda abierta, todo él cubierto con lentejuelas plateadas, Ally llevaba uno negro por encima de las rodillas, atado al cuello y la mitad de la espalda al aire libre, y yo un vestido azul cielo sencillo y sin mangas, ceñido a mi figura, corto hasta unas dos manos más arriba de las rodillas y de una tela muy cómoda.

Como dije, no entiendo el escándalo de los vestidos.

–¿Charlie? ¿Ya estás borracha? –miro mal a Alice.

–Claro que no, estaba pensando –agarro otro chupito y lo bebo de golpe.

–Joder, bájale un poco. Pareces una mujer despechada queriendo olvidar.

Suelto una carcajada y ellas me miran como si estuviera loca. Borracha tal vez, pero loca nunca.

–¿Qué cosas dices, Ally? –me sigo riendo y más al verle la cara a Jake, la está pasando fatal sin poder acercarse, se lo prohibí. Dentro de poco inicia mi cumpleaños y quiero pasarlo con mis amigas, ya luego tendré tiempo con él.

–Charlie, vamos a bailar. Estás bebiendo sentada y tú tienes cero tolerancias al alcohol.

–¡Sí! Bailar... wustaa me, yo... bailar, ¡Yeah! –arrastro las palabras y suelto una carcajada–. Quiero cantar, hace mucho que no canto.

Creo que ya estoy borracha.

Las chicas me ayudan a levantar y miro la hora antes de ir a bailar. 11:55pm. Solo cinco minutos más; camino junto a las chicas y veo como Alice hace señas a alguien a nuestras espaldas. En menos de un segundo me encuentro bailando junto a las chicas y de un momento a otro siento unas manos sujetar con fuerza mi cintura, me volteo y sonrío al ver a Jake.

Está bueno, mi novio.

–¿Te diviertes? –me dice al oído debido al volumen de la música y siento como se me eriza la piel, joder sí, estoy borracha.

–Claro que sí, amor. ¿Y tú? –él asiente y se acerca para posar sus labios sobre los míos. Enredo mis manos en su nuca y siento las suyas recorrer mi cuerpo. Nos separamos y él sonríe.

–Feliz Cumpleaños, Preciosa –dice y lo vuelvo a besar con más ganas.

–¡Cumpleaños a mí feliz! –grito alzando las manos y moviéndome al son de la música. Siento como Jake agarra el borde del vestido he intenta mantenerlo en su lugar, pero lo empujo contra una pared y le empiezo a besar el cuello–. ¿Quieres un bailecito, cariño?

Simplemente túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora