—¿No tienes nada mejor que eso? —digo arqueando una ceja por todo lo que acaba de decir—. Te recuerdo que eso lo puedes saber en cualquier momento o por cualquier persona, no es como que fuera un secreto. Y además, ¿Quién Diablos te dijo lo de Boston?
Me mira fijamente y yo me obligo hacer lo mismo. Está muy equivocado si cree que me va a amilanar.
—Tengo mis fuentes —dice al fin mientras se sienta en el mueble—. Pero eso no es lo importante —enarco una ceja—. Ahora sí, dime Charlotte, ¿Qué hacías con Matthew?
No debería darle ninguna explicación, pero no comprendo que tanto le importa a él lo que yo haga y deje de hacer.
—¿Y a ti que más te da? —pregunto y me siento a la otra punta del mueble.
—Ya lo sabes —rueda los ojos.
—No, en realidad no.
—Pues ya deberías saberlo —susurra mirando hacia otro lado.
—No tengo tiempo para esto Jacob —digo colocandome de pie—. Si quieres en otro momento hablamos o no lo sé, pero es tarde y debo volver antes de que mis padres se preocupen.
Asiente sin levantarse del mueble y me vuelve a mirar fijamente. Agarro mi bolso y me dirijo a la puerta, pero antes de llegar tengo a Jacob tras de mí, a tan solo diez centímetros pero sin llegar a tocarme.
—¿Sabes que me jode? —susurra en mi oído haciendo que los vellos de mi piel se erizen inconcientemente. Niego con la cabeza aún de espaldas a él—. Saber que no me dijiste a mí que te acompañara aún estando conmigo, a pesar de que te conté una parte muy... Muy dolorosa de mi vida, y sobre todo, que nadie la sabía. Siendo sinceros esperaba más de ti.
Lo entiendo, de verdad lo hago, yo lo pensé y me sentí mal por no contarle pero aún así no creí que fuera correcto decirle algo de lo cual no estaba segura qué era.
—No creí que te importara —susurro volteando para quedar cara a cara—. Además ya habías quedado con Emmy y no quise interferir.
—No lo hubieras hecho creeme. Pero igual preferiste a Matthew.
—No es cuestión de preferencia Jacob —aclaro—. Solo le pedí que me acompañara y ya, no creí que te importara, además, al final terminamos en el mismo sitio.
—Sí, pero no juntos.
Lo miro. Aún no entiendo que es lo que pasa entre nosotros pero desde luego no quiero saberlo aún, me gusta, lo sé, pero no lo conozco lo suficiente y está Emmy a la cual también le gusta y aparte de eso puede ser mi hermanastra. Claro que no será un impedimento si llegará a pasar algo entre él y yo pero no sé cuál es su relación entre ellos en estos momentos y no me gustaría estar en el medio. Viendo que prácticamente en el inicio quería darle celos a ella conmigo.
—¿Qué piensas? —pregunta al ver que sólo lo miro.
—En que no te conozco lo suficiente Jacob. En qué no sé que tienes con Emmy y en qué desde luego es muy tarde —abro la puerta y salgo pero antes volteo y digo—. Nos vemos luego, Jake.
Al llegar a casa, las luces están encendidas, es tarde, y sé que me va a caer una buena. Abro la puerta intentando hacer el menos ruido posible. Camino de puntillas hasta las escaleras pero antes de poder dar un movimiento más, oigo a mis espaldas.
—¡Charlotte Hudson! ¿Donde demonios estabas? —pregunta mamá y me volteo—. Mira la hora. Estuviste fuera todo el santo día y ni siquiera un mensaje. Podrías haberme avisado que llegarias tarde o algo. Estaba muy preocupada.
—Estuve con las chicas —miento. Aún no quiero sacar el tema de Rebecca.
—Y si estuviste con las chicas ¿Por qué ellas vinieron a buscarte esta tarde? —rayos—. No me mientas Charlotte.
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Simplemente tú
Teen Fiction~Y cuando mejor te va, es cuando más cuidado debes tener~ La vida da más vueltas de las que esperábamos, si no preguntenle a Charlotte, una chica la cual a crecido creyendo que las personas a las que ama nunca le mienten. Pero lo que ella no sabe es...