Sam
Lucía entra por la puerta de casa sin hacer ningún ruido, pero yo me despierto porque tengo sed y voy a la cocina a por agua.
Cuando salgo de mi habitación la veo que intenta no hacer ruido.
— ¿No crees que es un poco tarde para llegar?— bromeo como si fuera su madre.
— Qué susto me has dado, ¿no puedes dormir por todo el alcohol que has bebido?— pregunta riéndose.
— En realidad casi no he bebido, ha sido una pequeña actuación ya que si salía mal podría echarle la culpa al alcohol.
— Entonces hay algo que contar— le hago un gesto para que me siga.
Vamos hasta la puerta de mi cuarto y le digo que mire, ve a Leo durmiendo en mi cama sin camiseta, nos metemos al cuarto de Lucía.
— No me digas que tú y él...
— No, le he dicho de que se quede a dormir a aceptado y pues ahí está.
— Al fin me has hecho caso y has derribado el muro que estabas construyendo.
— Más o menos— me mira confusa— yo no quiero tener ninguna relación seria con nadie, pero bueno creo que a un lío puedo tener.
— Vamos avanzando poco a poco, ¿pero habéis hablado?
— No nos ha dado tiempo a hablar las cosas, supongo que lo hablaremos mañana a la mañana, bueno me voy que yo iba a por agua, buenas noches— salgo de su cuarto y me dirijo a la cocina a por el agua.
Y si debería salir con él, pero no sé si voy a estar aquí el año que viene, pero supongo que no podremos estar los meses que me quedan así, o sí, quién sabe, tengo que hablarlo con él y no me puedo encerrar en mi misma.
Cuando acabo el vaso de agua lo dejo en la fregadera y me vuelvo al cuarto. Al tumbarme en la cama Leo se mueve y me abraza— sus abrazos son tan increíbles hasta cuando no se da cuenta de que los da... — me agarro a uno de sus brazos y me vuelvo a dormir.
ESTÁS LEYENDO
¿Y Si No Vuelvo? #1
JugendliteraturSam lleva cinco años separada de su familia y amigos, se ha negado durante mucho tiempo a rehacer su vida en el nuevo lugar, en la nueva ciudad pero hace relativamente poco decidió dejar de perder el tiempo y volver a hacer su vida, sin la gente del...