¿Por qué? ¿Por qué aquel sentimiento la invadía? _____ dejó que aquel llanto se apoderara de ella. Había pasado tanto tiempo queriendo morir. Había pasado tanto tiempo pensando que era un error que ella hubiera sobrevivido a aquel asesinato. Pero cu...
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El entierro llegó a su fin. En el camino de bajada a la montaña, Zenitsu se mantenía insistiendo en que quería tener a Shoichi junto a él.
-¡Shoichi-kun es muy fuerte!¡Shoichi-kun me protegió!-decía agarrando y dejando ir al pequeño niño.
-¿¡Acaso no ves que Shoichi-kun no quiere!?-peleaba Tanjiro con el chico rubio. Entonces fue cuándo los tres chicos se prometieron no hacer enojar a la chica de ojos blanquecinos.
Después de que el pelirrojo regañara a Zenitsu, la de ojos perlados, perdiendo la paciencia noqueó a Zenitsu de un golpe en el cuello. El rubio cayó inconsciente, Inosuke y Tanjiro la veían sorprendidos por su actuación.
-¿Qué? Estaba empezando a perder la paciencia-la tsuguko se encogió de hombros.
Después de eso, el cuervo de la sucesora del Pilar del Viento escupió una bolsa con un fuerte olor a vómito... y a flores de glicina. Cómo es capaz de repeler demonios, fue llevado por la "sangre especial", Kiyoshi.
-Muchas gracias a todos, ahora podemos volver a nuestro hogar sin problemas-los tres niños agradecieron haciendo una profunda reverencia a los cuatro espadachines. La de hebras negras se acercó a los niños y de su haori sacó tres onigiris, y les dio uno a cada uno.
Sacudió con algo cercano al cariño el cabello de Shoichi. ¿Era extraño que aquel chico le recordara a su hermano menor? _____ había tenido un hermano menor y otro mayor, pero ellos... estaban en un mundo mejor. La mayoría de los cazadores de demonios lo habían perdido todo. Después de aquello, los cuatro espadachines siguieron su camino.
Tanjiro se preguntaba acerca de la misteriosa chica a su lado, que le provocaba una sensación desconocida, pero agradable, a su opinión. Hasta que el cuervo los interrumpió. Más que nada era una atracción física, pues no podía decir que conociese a la chica.
-¡Muy bien, síganme!-graznó el cuervo.
-¿Eso me incluye?-inquirió la de ojos blanquecinos, dudando acerca de si acompañar a los tres espadachines, pues ella tenía deberes cómo tsuguko.
-¡La tsuguko _____ Sasaki también debe seguirme!-dijo el cuervo volando alrededor del grupito. Los tres siguieron al cuervo.
_____ estaba decidida a cargar con Zenitsu, a quién había dejado inconsciente, pero Tanjiro insistió tanto en llevarlo él, que la tsuguko no tuvo otra opción.
-Ya veo, así que Inosuke creció en las montañas-dijo Tanjiro tratando de entablar una conversación en el silencio del pequeño grupito.
-No pienses en mí cómo alguien con quien puedas identificarte. No tengo padres ni hermanos-contestó Inosuke. A pesar de lo que dijo Inosuke, _____ de alguna forma se sintió identificada con él, ella ya no le sobraba, tampoco, a nadie a quién amar, ni un corazón que ella pudiera amar ni uno que la amara a ella. Esa era la triste historia de la mayoría de los cazadores de demonios-¡Poner a prueba mi fuerza con otras criaturas!-dijo repentinamente-¡Esa es mi única afición!
