Capitulo 11

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Blake

Después de platicar por bastante tiempo con Liam le dedicamos lo que resto del día para organizar, planificar e iniciar procesos sobre nuestra nueva Dirección de Turismo. El noventa por ciento de el puerto más importante de Estambul y de Emiratos Árabes Unidos, ahora me pertenece.

Pagamos un pastal por adquirir eso, pero es inversión segura.

Abotono mi camisa y entro en el saco negro acomodando las solapas del mismo, aseguro el mismo reloj que uso siempre y salgo pasando por la puerta de Kant, me pregunto que estará haciendo o que hará ahora que le di la noche libre.

Bajo las escaleras y voy directo a mi nave negra, un autoregalo que me hice, Lamborghini, último modelo, una bala en potencia.

El guardia de vigilancia me abre los portones y salgo como tiro.

Extrañaba andar solo, manejar mi carro, que nadie me acompañe ni me esté vigilando, a veces puede ser muy exasperante, aunque poco me molesta que esos verdes me tengan en la mira y estén pendientes a cada movimiento que hago.

—Por llegar —respondo a la llamada entrante desde la pantalla, es Liam.

—¡Esto está que explota! —suelta— Te espero dentro.

Río y cuelgo.

Mientras manejo coloco un cigarro y lo prendo en tanto me agarra un semáforo, el auto va volando y para cuando llego, lo estaciono en la esquina lejos de la puerta principal del antro, que me de libertades no significa que busque llamar la atención y menos que ahora que mi alejamiento da frutos a tener a los medios medianamente lejos de mis movimientos personales.

Acomodo mi traje cuando bajo y me encamino a la entrada , hay una fila enorme pero como el personal de seguridad ya me conoce y soy una de las personas exclusivas, me dan la entrada libre y el acceso rápido sin hacer fila.

Tomo una máscara que cubre mis ojos y me encamino en el pasillo es extenso, a ambos lados hay unas vitrinas enormes donde adentro hay un árbol con manzanas rojas fosforescentes que resaltan en la oscuridad, al igual que el nido de víboras que se desplazan al rededor del árbol y por el piso. Las luces rojas salen desde los costados del suelo y sigo por la larga alfombra negra aterciopelada. Al igual que las vitrinas dan un ambiente mucho más atractivo, la música suena mucho más fuerte cada vez que nos acercamos «Artic Monkeys».

Cada vez que Luxury abre sus puertas tienen un tema diferente, la última vez que estuve acá, el foco principal fue empleos habituales de la sociedad.

Llegamos al salón principal y una extensa pasarela es la única iluminada con reflectores violetas y rojas enfocan a las mujeres que desfilan con disfraces eroticos.

En el techo hay una mujer colgada sometida con bondage gira a su alrededor las tiras de la soga que defiende caen al piso y debajo sumisos gatean al rededor con disfraces particulares. Su extenso cabello llega al suelo dando una imagen extravagante.

Este club tiene esos aires.

La música acompaña el tema y ahora lo que se escucha es el sonido natural pero exótico de la selva y el aire libre. Hay leonas, trigresas, mujeres disfrazadas de animales que sirven al igual que varones disfrazados de animales. Para todos gustos colores.

En la esquina hay una burbuja de vidrio donde una mujer está sometiendo a un hombre arrodillado y amordazado. En otro extremo del lugar hay una enorme X «barra de bondage», y una mujer está maniatada mientras «su amo» la somete.

Hay tres reglas que se deben cumplir en ambientes como estos:

Uno. Nada de dispositivos tecnológicos.

Protegido (+21) [Libro 1] ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora