Protegido (+21) [Libro 1] ✔️

Capitulo 58

Alexa

Cuatro horas antes

Abro mis ojos.

Veo en donde estoy y aún sigo en la cama de Blake, el ambiente es oscuro por lo que noto que aún es de madrugada. Giro mi rostro hacia la izquierda pero, a diferencia de como me he acomodado para dormir, es Blake quien apoya su cara en mi pecho y mantiene cruzadas nuestras piernas acorralándome entre su brazo sobre mi abdomen.

Joder.

Llevo mi mirada a la puerta cuando oigo lo que creo haber dejado entre sueños, a alguien rondando, agudizo mis oídos y no oigo pasos pero si la sensación de que alguien entrará por esa puerta.

Cómo puedo y en mucho silencio y cuidado salgo de la cama acomodando a Blake sobre almohadas para que no se despierte. En puntas de pie me acerco hasta el escritorio de Blake en donde he dejado todo lo de anoche y tras tomar una pequeña navaja me acerco a la puerta para abrirla pero el picaporte de la misma comienza a bajarse muy lentamente y hace ubicarme detrás para retener a quien sea.

Efectivamente la puerta se abre y me voy sobre una espalda masculina imposibilitándolo de movimientos con mis piernas, trabando sus brazos con mi mano izquierda y con la derecha presionando con la punta del arma blanca sobre su carótida mientras caemos al piso.

—¡Joder, Alexa!

Abro mis ojos cuando oigo a Ward protestar en voz demasiado baja, casi en susurros, y lo suelto haciéndome hacia atrás para que él se incorpore. Miramos a Blake desde el piso cuando oímos una respiración profunda y observo que estira su mano moviéndola hasta que toca la almohada que he puesto.

Ward lo señala y luego señala tras él hacia el pasillo. Me pongo de pie siguiéndolo y cierro la puerta muy cuidadosamente.

Entra a mi habitación y todo luce como lo he dejado la última vez, lo sigo hasta el baño y ahora lo enfoco claramente cuando enciende la luz y deja la puerta a medio cerrar. Por lo que está haciendo se que quiere hablar de algo serio y, no podemos correr el riesgo de que alguien nos sorprenda o escuche tras la puerta. Aunque, bueno, las probabilidades de que eso pasen son mínimas más no se descartan.

—No voy a dejar que arruines todo esto —es lo primero que suelta y muevo mi rostro de la puerta hacia el en un segundo.

Se nota que no ha dormido.

—No voy a arruinar nada —me acerco negando.

—Lo vi, te conozco, lo vi en tu mirada... ¡Estuviste a punto de decirle a Grayson todo! Si no llegamos y llamo tu atención a tiempo, hubieras arruinado todo —suelta haciendo referencia a cuando aún seguíamos en la empresa y habíamos salido del ascensor.

No se que decir.

Él no entiende, él no está en donde yo estoy.

—Te dije que tus juegos nunca llegan lejos y si lo hacen hay que cortarlos a tiempo —agrega.

—Lo estoy manejando, jamás le diría algo que nos comprometa.

—¿Qué ha pasado la última vez? —ataca y abro mis ojos cuando lo hace de manera tan baja.

Doy un paso hacia atrás comenzando a cuidar de mi respiración.

—Mírate, mírate cómo actúas cuando apenas se menciona eso. No lo has superado, no deberías estar acá.

—Basta —niego comenzando a caminar hacia la puerta pero me detengo cuando él la cierra por completo.

—No evadas esto. Yo no soy tu madre y conmigo no podes fingir, pensé que lo habías superado. En cuanto estemos de vuelta espero que hagas lo que te corresponde hacer por cuenta propia porque sabes que yo no dudaré —comenta y comienzo a alterarme, no me puede estar amenazando. No con esto— Alexa, solo te quiero ver bien.