Adorable, lindo y tierno. [Seventeen]

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Hoshi se baja molesto del auto y azota la puerta sin pensarlo bien, se arrepiente en el segundo. Discutió un poco con Woozi en el camino por una tontería mientras que Seungkwan estaba dormido en el asiento trasero, y al llegar su enojo fue tanto que terminó despertando al niño. Sabe que está mal, y sabe que es realmente malo pelear con Woozi, no solo porque su bebé está presente, sino porque simplemente no quiere discutir con su esposo. Pero está hecho, en cuanto azota la puerta Woozi se baja del auto y pasa a cargar a Kwannie quien ahora llora.

Ah, Hoshi se siente tres veces peor al ver a su bebé llorar ¿fue él quien lo despertó? En realidad no importa, si Seungkwan está llorando por eso o por otra cosa realmente le preocupa porque su niño apenas tiene cuatro años. Debió asustarse. Intenta acercarse a ellos pero la mirada molesta de Woozi lo recibe y lo aleja. Entonces decide correr a la casa para abrir la puerta y que su esposo no tenga problemas al entrar.

Su bebé continua llorando aun cuando ya está en su habitación y Woozi lo prepara para dormir. Se asomó por la puerta sintiéndose apenado y Seungkwan lo mira extendiendo sus bracitos y haciendo un puchero. Hoshi imita su puchero porque quiere ir a cargarlo, pero Woozi está molesto y ahora se arrepiente mucho de haberse enojado antes. En realidad no quiere buscar culpables, no importa lo que haya pasado porque solo le importa lo triste que se ven su bebé y su bebé más grande. Baja la cabeza y respira.

—Woozi...— Lo llama con timidez, pero Woozi solo responde con un quejido que intenta ser una palabra. —¿puedo cargar a Kwannie?

Seungkwan de inmediato le extiendo los brazos.

—Solo ven y hazlo, no me preguntes.— Responde su esposo acomodando los juguetes que están regados en la cama.

Hoshi entra en la habitación y carga a su bebé quien llora en su hombro, Kwannie es tan bonito que le rompería el corazón a cualquiera verlo llorar. Lo mece alrededor del cuarto murmurándole palabras lindas y suaves para calmarlo. Le dice que todo está bien y que tiene que dormir porque mañana tiene clases. Y despues va hasta su cama, junto a Woozi, para dejarlo allí. Woozi lo arropa en silencio y se inclina para besar su frente, Hoshi hace lo mismo calmando al bebé. Y Kwannie los mira a los dos, uno a cada lado de la cama.

—¿aun se quieren?— Pregunta el niño y confunde a Hoshi.

—Claro que nos queremos bebé.— Responde con cariño tocando la nariz del niño. —Los amo a los dos. Mucho.

Seungkwan mira a Woozi entonces y este le sonríe.

—Te amo Kwannie.— Responde él y Hoshi se queda esperando con nerviosismo. Entonces Woozi lo mira. —También a ti.— Le dice con un tono que aparenta ser molesto.

Hoshi le sonríe de inmediato y puede ver el momento justo en el que su esposo deja ir su molestia. Bien, van a solucionar todo en su habitación. Pero la suave sonrisa de Woozi le dice todo. No planean ser la mejor pareja del mundo ni los mejores padres, pero hacen su mejor esfuerzo en ello, aun cuando tienen problemas.