Adorable, lindo y tierno. [Seventeen]

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La mamá de Dino es una mujer preciosa, el niño se parece un poco a ella y Jeonghan no puede apartar los ojos de la fotografía, es como conocer a una versión femenina y adulta de su hijo. Tal vez ella sería la primera en presumirle al mundo lo bonito que es Dino y lo lindo que sonríe. Dino no se parece tanto a Seungcheol, pero hay algo en el alma de ese pequeño que heredó de su padre.

—¡Papá! ¡Jeonghan está holgazaneando de nuevo!

Ah, Dino no le da ni un minuto de descanso, así que suspira y mira al niño que tiene un pañuelo en la cabeza y un pequeño delantal, y guantes, porque se preparó mucho para hacer la limpieza profunda del departamento. Jeonghan es el encargado de reacomodar los objetos y las fotografias para que él pueda poner retratos suyos regados por allí, porque es algo que dejó para despues dos años atrás.

Seungcheol y Dino le dijeron que si no lo hacia ese fin de semana entonces pondrían un cuadro enorme de kkuma en lugar de fotografías suyas en las paredes.

La familia de Seungcheol, incluyendo a Seungcheol, suelen colgar fotografias familiares por cada rincón de sus casas, la casa de los abuelos de Dino están repletas de ellas y tienen hasta el primo más lejano y hasta el tatarabuelo más viejo, la familia de Jeonghan nunca le ha dado importancia a los retratos, por eso Jeonghan solo lo aplazó.

Ahora tiene que encontrar los lugares donde colgar su fotografía, y hasta ahora lleva 0 de 9.

—Mira, kkuma tiene polvo en las patas.— señala a la perrita que corre de la cocina hasta la habitación de Dino dejando sus huellas.

—¡Kkuma! ¡Hay que limpiarte!

Y Jeonghan suspira regresando su atención a la fotografía de la mujer. Nunca la conoció, pero hay algo en su rostro que la hace parecer un poco seria pero amable, casi como Dino.

—No veas esa foto, tengo una sonrisa rara.— Seungcheol se queja tratando de ocultarse a si mismo, Jeonghan sonríe un poco. —Le dije a Hyorin que enmarcáramos la otra pero a ella le gustó esa. Fue injusto para mi.

—Me gusta como sonríes aquí.— Responde dejando el cuadro en su lugar. —Es una linda sonrisa, honesta.

—Me veo raro.

—Te ves feliz. Y un poco tonto. Si te hubiera conocido cuando tenias mi edad me habría burlado de ti.

—¡Eso es cruel!

Jeonghan se rie mientras que Seungcheol comienza con su pequeña rabieta.

—¿la extrañas?

Jeonghan no tiene miedo de preguntar porque no le teme a la respuesta, o eso quiere pensar porque la mayor parte del tiempo sus emociones son extrañas, Dino las entiende mucho más de lo que Jeonghan lo hace y eso le dice que hace un buen trabajo como papá. El berrinche de su novio se detiene y hay una pequeña mirada casi curiosa.

—Si. A veces pienso en lo que ella quería hacer junto a Dino, y en lo que quería enseñarle.

—Estoy seguro que ella tendría más disciplina que nosotros en cuanto a Dino. Dino es nuestro pequeño comandante.— Sonríe un poco tratando de animar un poco la momentánea tristeza de Seungcheol. —Tu eres demasiado rebelde y yo demasiado perezoso.

—Probablemente ellos tendrían que turnarse para ser comandantes.— Seungcheol se burló. —Pero entonces yo sería el único cadete, no quiero ser el único cadete, caes conmigo.

—Creo que nosotros dos apoyamos a que Dino sea un pequeño dictador, no le ponemos limites.

—¡No podemos ponerle limites porque él traza limites más cerrados que los nuestros! Como su hora de dormir, siempre va media hora antes de lo acordado porque nosotros somos "muy flexibles".

—Eso es culpa tuya, si eres flexible.

—¡Tú también! — Seungcheol suspira. — que Hyorin no te engañe, ella también habría cedido a Dino. Demasiado seria pero no lo suficiente como para negarle a Dino algo, ella solía levantarse cada media hora para revisar que Dino respirara.

—Los bebés dan miedo, no la culparía.

—Pero lo hacia aunque Dino estuviera llorando en mi hombro.

—Quizás solo revisaba que tú estuvieras respirando.

—Deja de distraerte y haz tu parte.— El pequeño berrinche vuelve a aparecer haciéndolo sonreír. —Llevas un mes diciendo que ahora si lo harás pero no veo ni una foto tuya colgada.

—Quizás...— titubea haciendo dibujos con el polvo y el dedo. —Quizás no quiera molestar a Hyorin... no sé... tal vez no quiera molestar a Dino, quería decir...

¿Por qué ahora está tan nervioso?

Apenas escucha el pequeño suspiro de Seungcheol y despues siente su brazo alrededor y su frente restregándose en su cabeza.

—Jeonghan, de lo único que ella estaría molesta es de no enseñarle a Dino a seguir las tradiciones. Y su tradición es colocar las fotografías de cada integrante de su familia. Eres el papá de Dino, y eres mi esposo.

—¡Futuro esposo!— grita Dino a sus espaldas. —¡Hasta que se casen esposos!

Y tanto Jeonghan como Seungcheol sonríen.

Bien, en realidad Jeonghan si reconoce ciertas emociones en él, está feliz de que Seungcheol se sienta tan cómodo y seguro de hablar con Jeonghan sobre la madre de Dino. Sobre lo que ella quería y pensaba.

Al final convence a Seungcheol y a Dino de que hagan todo el trabajo por él, a cambio tiene que encargarse de kkuma y sus huellitas de polvo.