Adorable, lindo y tierno. [Seventeen]

🦦😉🍋

Pocas veces Seungcheol puede tener una cita normal con Jeonghan, Dino siempre está allí, y los dos aman pasar tiempo con él y aman que los acompañe a todos lados, porque Seungcheol trabaja y no puede ver a su hijo todo el tiempo, así que no se le ha ocurrido tener una cita en el último año, y se siente mal por su pareja; Jeonghan siempre cuida de Dino, siempre cuida del departamento y aun tiene tiempo para cuidar de él cuando llega del trabajo. Así que darle una noche en la que Seungcheol lo cuide no tendría que ser mala idea.

Hizo una reservación en un lugar bonito y le pidió a su mamá que cuidara de Dino por esa noche, ella aceptó encantada así que tiene todo listo. Se viste para la ocasión perfumándose y peinándose lo mejor que puede, Jeonghan casi nunca lo ve de esa manera, y Seungcheol espera que su novio haga lo mismo; que se ponga aquella preciosa camisa rosada que resalta su piel y peine su cabello que ha crecido un poco, quiere ver a Jeonghan como la noche que lo conoció, precioso e impecable. Sin embargo...

Cuando entra a la habitación Jeonghan está sobre la cama; tiene el pijama puesto, el cabello despeinado, una mano sobre su estómago y las piernas extendidas, y Kkuma le muerde un pie.

—¿ya viste la hora que es? ¡Tenemos que irnos!— Casi grita revisando su reloj.

Jeonghan suspira dejando caer su cabeza entre las almohadas.

—No quiero salir. Dino me hizo correr todo el día.— Jeonghan se queja. —Me duelen los pies.

—¡Reserve un buen lugar para esta noche! Se supone que es una cita.— Está ligeramente molesto, a Jeonghan no parece interesarle y no se mueve ni un centímetro de su lugar. —¡Jeonghan!

—Tengamos una cita aquí.— Balbucea Jeonghan y Seungcheaol se hace a un lado para que Jeonghan vea lo sucio del departamento. Se supondría que limpiarían al día siguiente, ambos, antes de que llegara Dino. —No necesitamos todo el departamento.— Jeonghan vuelve a gemir haciendo un puchero.

—Se supone que tengamos una cita ¿Cómo vamos a tener una cita aquí en el departamento?— Jeonghan lo mira. Y mueve perezosamente su pierna derecha empujando a Kkuma. Técnicamente le abrió las piernas. —¡Eso no es una cita! ¡Cierra las piernas!— Jeonghan le muestra la lengua y comienza a quitarse el pijama. —¡Jeonghan!

—No seas tímido, ven aquí.— Jeonghan extiende sus brazos sin cerrar las piernas. Seungcheol siente sonrojarse. —Vamos, será como la primera cita.

—¡Deja de bromear!

—No estoy bromeando. Ya te hice espacio.— Y Jeonghan señala el espacio vacío en la cama.

Ah. Realmente increíble.

—Bueno.— Dice deshaciendo los botones de su camisa y acercándose a la cama.

Jeonghan tiene suerte de ser hermoso en todo momento. Ni siquiera limpian al día siguiente.