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—Si te portas bien y no te lo comes mientras no estoy te daré otro ¿está bien?

Dino ve el dulce sobre la mesa y despues ve a su maestra irse lentamente de la habitación. ¿Por qué no se puede comer el dulce? Supone que es otra cosa de adultos así que solo ve el dulce por unos cuantos segundos. Lo toma entre sus manos con curiosidad sin saber porque su maestra necesita que cuide del dulce. No necesita otro dulce, su papá le puede comprar muchos cuando llegue a casa, le comprará todos los que quiera y comprará también para Jeonghan, así que no sabe porque debería de esperar tener otro.

Aunque si espera un poco más tendrá dos dulces y esos dulces podría dárselos a Hansollie y a Seungkwannie, ya que no puede comprarles dulces a ellos porque casi nunca están cuando está su papá. Así les daría dulces a ellos y despues tendría varios dulces. Jeonghan no lo deja llevarse dulces a la escuela porque dice que la gente pensará que es un mal padre por darle dulces en lugar de una comida sana.

De cualquier manera, ahora tiene un dulce frente a él y está muy aburrido.

Su barbilla está sobre la mesa mientras él ve a un aburrido dulce existir.

Cierra los ojos por un segundo y cuando los abre el dulce ya no está.

—¡Ah! ¡Mi dulce!— Se queja bajándose de la silla y mirando bajo la mesa. Pero no está. —¡Mi dulce se fue!

Comienza a buscar por el pequeño cuarto, entre los papeles, los juguetes y las cosas en las esquinas, pero su desaparecido dulce no aparece por ninguna parte ¡Aunque no iba a comerse ese dulce aun así es suyo! La desaparición misteriosa del dulce lo alarma un poco, debería comenzar una investigación para dar con alguna pista e ir...

Cuando sale del pequeño cuarto se encuentra con Hansol y Seungkwan hechos bolita, con una envoltura y pedazos de dulces rotos. Ellos lo miran con sorpresa.

—No hay nada.— Dice Seungkwan ocultando la evidencia.

—Nos comimos tu dulce, la maestra nos dijo que no lo hiciéramos pero lo hicimos.— Dice Hansol y Seungkwan le da un pequeño golpe.

La profesora aparece corriendo de inmediato, ella se ve un poco agitada mientras les pregunta si todo está bien y explica que tuvo un pequeño problema pero que es bueno que no se fueran de allí, y también regaña un poco a Seungkwan y a Hansol por salir del salón.

—¿ah? ¿te comiste el dulce? ¿Dino?— Pregunta ella pero lanza una mirada sospechosa a Seungkwan y a Hansol. —Umm... se ven un poco sospechosos ¿Qué hicieron?

Hansol y Seungkwan se quedan callados.

—Les di mi dulce.— Dice Dino mirando a la maestra. —Me dijo que me daría otro si no me lo comía, y no me lo comí, se los di a ellos ¿puedo tener mi otro dulce ahora? Por favor.

La maestra inclina un poco la cabeza.

—Pero asi no funciona, Dino...

—Me porte bien y no me comí el dulce, esas eran las reglas. ¿Puedo tener el otro?

La maestra da un pequeño suspiro para despues sonreír y asentir, y ella le da el otro dulce, justo en la mano. Y Dino lo toma girando hacia Hansol y Seungkwan.

—¿vas a comértelo, Dino?— Pregunta Seungkwan.

—No, pero ustedes ya se comieron uno así que no se los daré.

Hansol y Seungkwan hacen un puchero. Así que Dino guarda su dulce. Y lo guarda todo el día hasta llegar a casa.

Le da una mitad a su papá y la otra a Jeonghan.


Adorable, lindo y tierno. [Seventeen]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora