Adorable, lindo y tierno. [Seventeen]

🦦🍋😉😉(💔)

Jeonghan siempre intenta estar al pendiente de Dino, siempre lo vigila y cuida de él, siempre está a su alrededor, y es fácil considerando que el pequeño en realidad no le gusta apartarse demasiado, puede aparentar ser más valiente de lo que cree, pero siempre busca a Jeonghan, y eso es un alivio porque es fácil de cuidar. Dino siempre ha sido fácil de cuidar. Así que a Jeonghan le gusta.

A Jeonghan le gusta ver a Dino jugar a sus espaldas mientras piensa que Jeonghan no presta atención, le gusta escucharlo hacer sus planes y dejarlo hacerlo. Dino es un buen niño, pero sigue siendo un niño y su pensamiento infantil es gracioso e inexplicable.

Jeonghan siempre sabe lo que está haciendo Dino. O casi siempre.

Es en un segundo cuando se distrae viendo el celular y mandando mensajes a Seungcheol, sabe que la puerta está cerrada pero de cualquier manera Dino no sale sin permiso, es el balcón el cual está abierto lo que podría preocuparle, pero no lo hace demasiado, recibe el fresco aire del día así que lo deja así. Aun escucha a Dino jugar y hablar con sus muñecos, lo escucha discutir sobre que Superman como juguete puede volar, pero Batman le dice que no, porque es un juguete. Y Jeonghan quizás no debería de mostrarle tantas veces Toy story.

"Trae la cena. No quiero cocinar." Le escribe a Seungcheol.

"No te dejaré cocinar, pero puedes pedir la cena. ¡No es tanto trabajo!"

"Si no es tanto trabajo trae la cena."

"¡Yo ya trabajo mucho!"

"Otra razón para traer la cena." Le manda un sticker y se ríe de ello.

Alza el rostro para revisar a Dino, y no está frente a él. Bien, no es como si el niño no pudiera moverse con libertad en su propia casa, Dino puede correr y jugar sin que Jeonghan lo vea.

—¡Dino!— Lo llama. —¿Qué quieres cenar?

No recibe respuesta. Bien, se pone de pie y camina mirando la cocina y el comedor, mira en la entrada.

—Dino.— Vuelve a llamarlo con calma y pereza. —¿juegas a las escondidas?— Abre la puerta de la habitación y echa un vistazo, no hay nada. Revisa su habitación y el baño. ¿A dónde puede ir un niño pequeño? —¡Dino!— Vuelve a gritar, ahora cansado y revisa entre los armarios, solo encuentra una lámpara en el suelo, parece rota pero no le da importancia. —¡Chan!

Ah. Camina de nuevo a la sala de estar y mira muy bien alrededor, los niños no desaparecen de la nada. Su cabeza se gira hacia el balcón y tuerce los labios caminando hacia él. Dino es un niño tan inteligente que no se lanzaría ¿cierto? Aunque hablara de volar, estaba seguro de que Dino estaba de lado de Batman la ultima vez que lo escuchó. Se asoma por el borde convenciéndose de que un niño pequeño no puede saltar la barda alta. Solo que Dino podría si se sube a las macetas cercanas. De hecho, Dino podría subirse al borde, pero cuando se asoma no hay niño aplastado en la acera. Es alto.

Ah. Está bien, Dino no pudo haber saltado. Una vez la hermana menor de Jeonghan saltó por la ventana y Jeonghan pudo saber que había saltado por los gritos, ella era pequeña y no era una ventana alta, solo se rompió una pierna pero aun así lo castigaron y lo regañaron. Jeonghan era pequeño esa vez pero su madre se enojó tanto que podía recordar los gritos, y el llanto. Pero Dino es más inteligente que su hermana. Y si Dino se hubiera lanzado Jeonghan lo sabría, así que deja la idea.

Deja la idea pero aun parpadea inclinado en el borde. ¿y si se lanzó de otra ventana? Podría haber niño aplastado en la acera en la otra parte del edificio. Espera no tener una estampa de Dino. Si Dino se cayó...

—Si te acercas demasiado puedes caerte.— Escucha la voz del niño detrás de él y gira encontrándose con el pequeño y Superman amarrado a una cuerda y a la parte superior de la lámpara que encontró tirada, como si fuera un paracaídas. —Es peligroso.

Ah. ajá. No hay estampa de Dino.

Parpadea un par de veces antes de caer en cuenta de que está llorando. ¿Por qué llora? ¿y porque no puede dejar de llorar?

—¡ah! ¡¿estás triste?!— Pregunta Dino buscando pañuelos. —¿quieres un abrazo?

—¿Dónde estabas?— Pregunta limpiándose el rostro, sollozando aun mientras intenta callar su propio llanto. Dino lo toma de la mano para llevarlo adentro, y Jeonghan cierra la puerta del balcón.

—Haciendo a Superman volar.— Explica Dino alzando el muñeco. —¿Por qué lloras? ¿Duele algo? ¿quieres un abrazo?

¿Quería un abrazo? Asintió arrodillándose para recibir al niño. Lo abraza fuerte.

—¿Por qué lloras?— Vuelve a preguntar Dino.

—No quería pedir la cena.

—¡Que la pida papá!