Amor en tiempos de tragedia...

Capitulo 4: Una larga semana

Ángel~

Mi novia ha estado fuera de la cuidad por varios días, no he tenído mucho tiempo para hablar con ella como he querido ya que la señal de teléfono esta de la mierda en ese lugar y no había nada que pudieramos hacer al respecto. Lo importante era que esta bien, se escuchaba muy emocionada cuando logro conseguir señal e hicimos una llamada. Aunque la percibí algo nostálgica, por lo que tuve que darle ánimos para que se relajara diciéndole que pronto nos íbamos a ver y que me tendría que contar todo lo que ha aprendido ahora que vuelva, mientras degustaramos las galletas de limón que tanto ama. Al parecer mi plan funcionó, porque noté en su voz un poco de tranquilidad.

En cuanto a mi, bueno, era lunes, me tocaba entrenamiento, así que todo el día tendría que entrenar muy duro ya que se acercaba un juego importante. Por eso mi amigo Alejandro pasaría por mi casa para que fueramos juntos a entrenar. Él era un amigo de la infancia, pero en secundaria se había mudado a otra ciudad, así que perdimos el contacto por varios años. Hasta que hace un tiempo regreso a vivir cerca de aquí otra vez, sorpresivamente estaba en la misma facultad que yo, desde entonces nuestra amistad se volvió mas grande, él fue quien me insistió para que entrara a jugar americano en el equipo de la escuela.

-¿Cómo vas con eso?-le pregunté refiriéndome al tobillo que se había lastimado en el entrenamiento pasado
-Ya mejor, mi madre me puso algunas pomadas y al parecer sirvieron.
-¡Que bien!, me da gusto que ya estes mejor, asi podré darte una paliza en el entrenamiento.
-Ya veremos- respondió riéndose un poco, despues se aclaró la garganta y dijo -Sabes, ojalá tuviera una novia como la tuya, que me de masajes cuando me lastime.
Al escuchar eso, comence a jugetear con el balón -Ella no me da masajes.
-Claro que si, la vez que te lastimaste el hombro, subiste historias a tu instagram presumiendo a tu increíble novia masajeandote.
-Bueno es cierto, ella me cuida mucho- al decir eso, comence a sentir una inexplicable felicidad en mi pecho. Desde que la conocí, siempre se ha preocupado por mi, así que no puedo evitar sonreír al ser consciente de lo afortunado que era.
-Ah no hermano, borra esa sonrisa presumida de tu boca.
-No estoy presumiendo. Solo estoy feliz de tener a Sandy en mi vida.
-Sé que te hace feliz y yo sé que tú la haces feliz a ella. De verdad les tengo envidia de la buena.
-¿Qué hay de Fernanda, la amiga de mi novia? Escuche que le gustas.
-No es cierto, no mientas.
-Es cierto, te lo prometo. Mi novia es su amiga más cercana. Yo tengo información de primera mano- Puse mi rostro serio para que se diera cuenta de que lo que estaba diciendo era real.
-¿En serio? Yo pense que le caia mal porque siempre me evitaba en las fiestas, por lo que no quisé incomodarla más y comence a evitarla también.
-Seguro se aleja porque le gustas, eres un idiota.
-No puedes llamarme idiota. ¿Cómo iba a saberlo?, yo no entiendo a las mujeres amigo, por eso estoy soltero.
-Deberías invitarla a salir.
-¿Pero cómo?- Pregunto de forma desesperada mientras yo queria reírme.
-Ahora que regrese Sandra, idearemos un plan, no te preocupes.
-Gracias Ángel, eres un buen amigo.
-Ya lo sé- Dije antes de lanzarme y hacerle cosquillas -¿Qué harías sin mi eh?
-Quedarme soltero toda la vida seguramente- respondio sarcástico - pero si me hubieras dicho esto antes, ya tendría novia.
-Jajaja es cierto, perdon hermano. No volvera a pasar.

Toda la tarde estuvimos entrenando duramente, mis músculos palpitaban así que con mucho trabajo llegue a mk auto y después a mi casa. Ya era de noche y yo estaba bastante agotado, me tumbe en mi cama boca abajo y le llame a mi novia.

-¿Hola cariño cómo estas?- Sonreí al escuchar su voz y agradecí que tuviera señal.
-Hola mi vida, yo estoy muy bien, solo un poco cansado y ¿tú?
-Que bueno amor, yo también ando cansada. Ahorita seguimos luchando con unos datos pero pronto estarán listos.
-Espero acaben pronto para que puedas descansar.
-Eso espero también. ¿Hoy entrenaste?
-Sí, estuve con Ale... De verás, recuerdas que una vez me contaste que a Fer le parecía atractivo Alejandro?
-Ajam, ¿Por?
-Es que creo que a Alejandro le interesaría salir en una cita con ella. ¿Te parece si ahora que regreses armamos una cita doble?
-¡Claro que si! Que emoción, vamos a ser cupidos de nuestros amigos.
-Algo así, ojalá funcione.
-Ya verás que si. A Fer de verdad le gusta pero como tu amigo siempre se alejaba pensó que no estaba interesado.
-Jajaja ambos son unos tontos.
-¿Por qué?
-Luego te cuento bebé, ya te dejo porque me meteré a bañar, espero termines pronto.
-Esta bien, te amo, cuidate mucho, te veo el viernes.
-Si, el viernes. Te amo. Adiós.
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