~Sandra~
Por un momento nos quedamos en silencio, mirando las hojas caer al suelo, tal vez de esto se trataba la vida, de una caída constante, todos vamos en la misma dirección hacia el mismo destino, llamémosle como quieran; suelo, muerte, el final…
—Lo entiendo— dije —inevitablemente, nos dirigimos al mismo lugar, todos.
—Gracias por amarme— cuando escuche las palabras salir de su boca, la piel se me hizo chinita, sentí escalofríos rodeando todo mi cuerpo.
—A ti por enseñarme a amar— tome su mano y la sostuve con ambas manos —Por eso debemos apreciar cada momento juntos.
—Lo haremos— y me mostró una cálida sonrisa llena de amor.
—Por cierto, ya nos detuvimos bastante tiempo aquí y yo enserio quiero ver una película.
—¿Tienes una en mente?
—mmm—Me quedé pensando —la verdad es que no.
—Entonces habrá que irnos ya, para analizar las opciones que hay en cartelera.
—Ojalá haya una romántica.
—Esperemos que no— me guiño el ojo mientras se burlaba porque sabía que lo iba a obligar a ver una de romance aunque no fueran sus favoritas.
—Es que a ustedes los hombres les gusta ver pura acción— giré mis ojos hacia arriba.
—No es cierto, a mi me gustan más las históricas o de misterio psicológico.
—Tienes un buen punto, al menos no te gustan las de superhéroes, porque yo las odio— dije recordando cuando mis amigos de la secundaria me obligaban a verlas en cines, ciertamente nunca fui fan de esas tramas.
—En eso concordamos, tampoco me gusta verlas— Una de las cosas que me habían atraído de Ángel, era que compartía el mismo desprecio por esas películas como yo.
****
El cine estaba medianamente lleno de personas pero no lleno, lo cual me alegraba bastante porque mientras más personas haya en un lugar tan reducido, eso hace que el calor se encerrara horriblemente y me sintiera severamente sofocada. Además también quería evitar lo que más pudiera, que mi novio tuviese un golpe de calor, ya que aún no teníamos tan controlada esa consecuencia de su lesión, la regulación de su temperatura corporal era un desastre.
—Buenas tardes, ¿qué película quiere ver?
—Hola señorita, quiero dos boletos para la película Orgullo y prejuicio por favor.
—Excelente, ¿quiere escoger sus asientos o prefiere que le asigne unos?
—Oh si, olvide decirle, que un boleto es para usuario de silla de ruedas, ¿si tiene disponible?
—Claro, sin problema. Nuestras salas cuentan con un lugar asignado para personas con alguna necesidad como está, tratamos de ser lo más inclusivos posibles.
—Muchas gracias. ¿Cuánto sería por los dos boletos?
—Serían $165 pesos.
—Aquí tiene— Tomé los boletos y voltee para verlo —ya los tenemos— dije moviendo los labios pronunciadamente para que pudiera leerlos en medio de tanto ruido.
—Señorita, su ticket— escuche la voz de la trabajadora detrás de mí y me voltee un poco apenada por distraerme, enseguida le di las gracias.
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Amor en tiempos de tragedia...
RomanceTe amo tanto que duele, no puedes dejarme con el corazón roto. ¡Tienes que resistir! .... ¿Me seguirás amando a pesar de...? ¿Cómo se puede hablar de amor, cuando no puedes tocarle, ni sentir sus caricias?. Cuando ni siquiera puedes besarle.. ¿Le d...