Capitulo 13: La forma de comunicarnos

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~Sandra~

Estaba desayunando en mi casa mientras miraba el reloj esperando que diera la hora para irme al hospital. El día anterior sedaron a Ángel porque se había alterado un poco cuando recibió la noticia de su estado. El doctor nos dijo que no despertaría hasta el día de hoy, así que nos pidió que nos fuéramos a casa ya que no tendría sentido quedarnos con él esa noche.
     Mientras tanto yo tenía algunos sentimientos encontrados primero estaba feliz porque mi novio había despertado, sin embargo también me preocupaba su nueva condición y como íbamos apoyarlo. Todo era realmente difícil, justo como el doctor nos explicó, tenía que estar con alguien supervisando las 24 horas, sobre todo por que necesitaba respirar por medio de una máquina entonces tendríamos que estar al tanto de que no se movieran las mangueras, de que todo estuviera perfectamente bien conectado porque sin ese soporte vital podria sufrir un paro respiratorio. El problema no era ahora ya que seguía en el hospital y pues había enfermeras que estaban monitoreandolo al mismo tiempo, este tema lo platiqué anoche con mis suegros, según la mamá de mi novio dijo que iban a mover la habitación de Ángel a un cuarto que había en la planta baja porque ya no podría subir con la silla de ruedas a su antiguo cuarto, también dijeron que iban a contratar una enfermera de planta que estuviera atendiendolo cuando todos los demás estuviéramos ocupados y como el papá Ángel es médico, nos dejaba mas tranquilos ya que cualquier problema él sabría como manejar la situación. Definitivamente había muchos cambios que iban a suceder en su vida y en la nuestra.

     Yo tenía mucha ansiedad de poder verlo ahora que ya estaba enterado de su situación por eso necesitaba hacerle saber que estaría con él incondicionalmente. En la noche estuve investigando en internet todo lo que tenía que ver con la cuadriplejia, así como todos los cuidados que se deben tener. También me encontré con muchos casos de personas que pudieron sobrellevar su condición y tener una vida lo más normal posible, muchos de ellos que tenían una lesión mas leve pudieron volver a ser independientes. Yo sabía que sí bien mi novio no podría ser independiente por sí mismo, podía aprender a vivir así, aceptarse tal cual era porque su familia y yo lo amamos como tal. Todo eso quería decírselo yo misma, así que terminé de desayunar me arreglé, metí algunas cosas en una mochila, me despedí de mis padres y me dirigí hacia el hospital.

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Cuando llegue a la habitación le pregunté a la enfermera si podía pasar y me dijo que sí, que ya había atendido a Ángel, que en este momento estaba recibiendo su alimentación:

- Vaya llegaste justo a tiempo para la hora de visitas. ¿Es tu novio?
-Si, es mi novio.
-Es un joven muy apuesto y a pesar de su estado sigue dando de que hablar. Unas nuevas emfermeras, jovencitas, estaban preguntando cual era su nombre, pero yo como su jefa, las regañe y las mandé a otro piso mejor.
-¿En serio?- me dio mucha curiosidad lo que me estaba diciendo la enfermera, porque justamente Ángel siempre ha estado envuelto en casos como estos, ya que a la gente en general siempre les ha parecido un joven atractivo e interesante.
-Si, pero no debes de preocuparte, se nota que te quiere un montón.
-Lo sé- lo sabía, nunca entendí cómo es que Ángel y yo conectamos de una forma tan hermosa que podía verlo en su mirada, la forma en que me amaba, como me protegía y cuidaba de mi. Por eso es que ahora yo estaba propuesta a devolverle todo ese amor y cuidados ahora que mas lo necesitaba.

     Entre a la habitación, lo primero que vi fue que Ángel estaba viendo la tele, me dio mucha risa porque estaba en el canal de fútbol soccer y yo sabía que él odiaba ese deporte.

-Hola mi amor, buenos días- Me sente a lado de él: Toda la noche estuve pensando en ti, te he extrañado tanto- lo llené de besos cuidadosos y mi corazón se emociono al ver una sonrisa dibujarse en su rostro. Ese era mi propósito, hacerle saber que lo amaba sin ninguna duda.

     Vi en internet que a veces las personas en este estado pueden sufrir espasmos en los músculos, por lo que masajear estas zonas podrían disminuir esto, así que comence a darle masajes en sus brazos. Como Ángel era un joven que realizaba bastante deporte antes del accidente, tenia unos músculos grandes, lo que mas me gustaba era que sus brazos eran bastante fuertes, y auque habia bajado mucho de peso aún conservaba un volumen considerable, no como antes, pero se miraba bastante bien.

-¿Oye, sabías que mañana comenzarán tus rehabilitaciones? recuerda que si parpadeas un vez es "no" y dos veces es un "sí".
*Ángel parpadea dos veces*
-¿Estas nervioso?
*parpadea una vez*
-¿Quieres que esté allí?
*parpadéa dos veces*
Sonrió y me doy una media vuelta para que no vea mis mejillas sonrojadas. Este era el nivel de noviazgo que tenía con él, mi corazón siempre se emociona de saber que me quería cerca, aún me sonrojo como la primera vez que comenzamos a salir. Después de recuperar la postura me volteo y lo miro detenidamente: -¿me amas?
*parpadea una vez y luego sonríe*
-Eres un mentiroso de lo peor jajaja, pero ¿sabes qué? Yo sí te amo y te voy a amar siempre.
Ángel me mira y puedo ver sus ojos llenos de agradecimiento al escuchar lo que acabo de decir. Por eso lo amaba tanto, porque era una persona sensible y agradecida con los demás.
     Después me percaté que aún estaba el canal de fútbol y me reí bastante: -Sabes por que me dijiste que no me amas, no te voy a quitar ese canal. Te tendrás que volver fan del soccer de ahora en adelante- lo dije mientras miraba como volteaba los ojos hacia atras en señal de descontento.
-Jajaa a ver intentemos de nuevo, ¿me amas?
*parpadea dos veces*
-Bueno, solo por esta vez. Vamos a ver una pelicula juntos. -tome su mano y la coloqué encima de mi cabeza mientras recostaba mi cabeza de lado en la cama. Amaba cuando mi novio me acariciaba la cabeza, ahora no puede, pero el simple hecho de tener su mano así me hacia sentir bien.

     No sé cuanto tiempo estuvimos viendo películas, hasta que entró una enfermera a interrumpirnos para retirarle la sonda en su nariz.

-Se la voy a retirar pero puede resultar incómodo.
Mientras la señora sacaba el tubo pude ver en su rostro que de verdad era horrible ser alimentado por una sonda. No sabía si sentía dolor o era la sensación de incomodidad misma. Acto seguido quiso toser pero parecía que no podía hacerlo.
-Tranquilo, relajate, ya paso, deja que el aire entre a tus pulmones. -dijo la enfermera mientras le dio un masaje en el pecho y verificó su traqueostomia. Ángel se relajo poco a poco mientras cerraba los ojos.
-Bien, ya viste que no es tan dificil. Si te mantienes tranquilo todo fluye mejor.

     Estaba tomando notas mentales de como actuar en estos casos y que cuando estemos solos pueda manejar la situación.

-¿Estaban viendo películas- la enfermera le pregunto y Ángel parpadeo dos veces.
-¿Qué pelicula era? -volteo para preguntarme.
-Estábamos viendo Interestellar, es una de nuestras películas favoritas.
-Oh, ¿de qué trata?
-Pues es una pelicula de ciencia ficción que trata temas como la extinción de la especie humana y como buscan de formas desesperadas no desaparecer por lo que comienzan la exploración en el espacio buscando planetas que puedan habitar, todo esto usando teorías de la física, hay agujeros de gusano y todo eso.
-Wow se escucha bastabte compleja pero interesante, la buscaré ahora que regrese a casa.
-Sí, se la recomiendo bastante.
-¿Tú me la recomiendas Ángel?- se dirigió a mi novio otra vez y él respondio con dos parpadeos. Al menos me hacia feliz ver que podiamos comunicarnos con él aunque no fuera hablando.

     Cuando la enfermera salió de la habitación, me subí en su cama y me recoste en una orilla a su lado, abrazandolo con cuidado, coloqué mi cabeza en su pecho, pude escuchar latir su corazón más allá del monitor al que estaba conectado y de pronto mi pecho comenzó a latir en sincronía con el suyo. Esta era la verdadera conexión que teníamos, mi novio estaba vivo y con eso me bastaba para ser feliz.







Amor en tiempos de tragedia...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora