Amor en tiempos de tragedia...

Capítulo 23: Juego

~Sandra~

Cuanto la película terminó giré mi cabeza para verlo pero ya sé había quedado dormido por lo que con cuidado le di un beso en la frente y salí de la habitación con mucho silenciosamente para no despertarlo. En la sala estaba sentada mi suegra con la enfermera Marta, ambas estaban disfrutando de una taza de té: —Hija ven, siéntate, ¿no quieres un poco de infusión de limón?— la señora Ángeles me dijo mientras levantaba su taza en el aire.
     —No, muchas gracias suegra, tengo que regresar a casa. Además Ángel ya está dormido.
     —Oh, ya veo, ¿quieres que te lleve?
     —No como cree, ahorita tomó el camión que me lleva a casa— dije un poco apenada.
     —Como crees, ya es noche. Ahorita te llevo rápido yo, aprovechando que Marta está para que cuide de mi hijo. 
     —Si muchacha, nos quedamos más tranquilas de que llegues segura a casa— Marta dijo mientras le dio un sorbo a su taza. 

Yo observé a las dos mientras insistían y no me quedó de otra que aceptar que me llevara a casa, sobre todo porque tenían razón, a veces de noche se ponía peligroso salir, sobre todo solo y más si eres una mujer joven, por eso antes del accidente, mi novio me llevaba siempre a casa, era todo un protector conmigo, por eso siempre estaré agradecida. 

En el camino a casa iba platicando tranquilamente sobre temas irrelevantes con la madre de mi novio hasta que de pronto unas palabras sin contexto salieron de su boca: —Me da gusto de que estés en la vida de mi hijo, has sido un gran apoyo y eso lo aprecio mucho.
     —El gusto es mío señora, gracias por abrirme las puertas de su casa y dejarme  ser parte de sus vidas. Su hijo para mi lo es todo.

Sin decir una palabra ella puso su mano encima de la mía y después dijo —lo sé, él también te ama... sabes...tal vez recibamos noticias muy fuertes pronto, pero espero que sigamos siendo tan fuertes como siempre, unidos—. No quisé preguntarle a qué se refería porque estaba segura de que tenía que ver con el intento de asesinato que tuvo Angel con ese "accidente" de auto, por lo que respondi —Aquí estaremos para superar todo.

Mi casa no quedaba tan lejos de donde vivían ellos, aunque por transporte público si se hacía bastantes vueltas el camión,  pero en carro particular se llegaba en menos de 20 min, por lo que el viaje fue relativamente corto. Cuando llegamos a nuestro destino, me despedí antes de bajarme del auto, luego vi que mi madre salió para darle las gracias por traerme a casa.

     —¿Cómo te fue hija?— mamá preguntó mientras me tapaba con su rebozo ya que la noche comenzaba a refrescar y como era verano yo no solía llevar suéter a la facultad.  
     —Bien mami, no tuve mi última clase por eso te mande el mensaje de que pasaría a ver a mi novio a su casa. 
     —Que bueno hija, te ves feliz, se la pasaron bien ¿verdad?—. Mi sonrisa lo describió todo y ella lo entendió por completo, no hacía falta ni siquiera explicarlo. Entramos a casa para seguir platicando y me di cuenta de que estaba en la casa sola: —¿Papá no ha regresado?
     —Paso a casa de tu abuelita ya que se sentía mal— mi madre giró los ojos —ya sabes, se peleó con una de tus tías y llamaron a tu padre como siempre.
     —Entonces va a llegar tarde— dije mientras miraba las fotos familiares de la mesa, mi abuela era una señora de carácter bastante fuerte por lo que este tipo de situaciones eran muy comunes en la familia. —Bueno, iré a mi habitación porque tengo tarea que entregar mañana.
     —Está bien, yo estoy preparando un poco de arroz con leche para cenar. 
     —Que rico, al rato bajo por un poco.

Ya en mi habitación me puse a encender mi laptop para hacer los ensayos que tenía que entregar, pero como siempre me puse a procrastinar un poco en mis redes sociales, de pronto un recuerdo de hace 1 año apareció en mis notificaciones, era un video de un juego de tradición muy importante que se hace en la Universidad cada doce meses aproximadamente con los equipos de fut americano.