Amor en tiempos de tragedia...

Capítulo 41: Ángel

~Sandra~

No pude pegar el ojo en toda la noche, estaba pensando seriamente en cuál sería la mejor manera de actuar, ya no quería ocultarle nada a mi novio, pero me daba nervios pensar en cuál sería su reacción si yo quisiera ir a plantarle cara a Carlos y decirle en su cara todo lo que tenía clavado en mi pecho. además lo más probable es que de ser esa mi decisión, Ángel insistiría en acompañarme y lo que menos quiero es exponerlo, no ahora que está  saliendo de esa crisis mental por la que estaba pasando. No quiero volver a verlo sufrir de esa forma, me rompía el alma verlo derpertandose todas las noches con esa mirada llena de desesperación. 

*Suena la alarma*

     —Mierda— dije en mi mente.

     —Apaga eso, interrumpe mis dulces sueños— la voz adormilada de mi novio sonó a mi lado.

     —¿Eh?— lo voltee a ver y me dio una mirada risueña —¿Qué estabas soñando?

     —Con una bella dama.

     —Ah…—me voltee y tape mi cara con la sabana.

     —¿Qué pasa?

     —Espero que esa bella dama fuera yo.

     —Obviamente.

Me quedé completamente en silencio.

     —Sandy…

     —¿Si?

     —¿Estás bien?

     —Prométeme.

     —No entiendo…

     —Que no importa que tan enojado estés conmigo, que nunca me vas a alejar de ti.

     —Jamás podría hacer semejante cosa, sin embargo tus palabras me mantienen inquieto, quisiera que fueras honesta conmigo, por favor.

     —La llamada de anoche, era mi abogada, la madre de Marcos.

     —Aja…

     —Me dijo que…— no pude terminar de decirle porque su madre entró a la habitación.

     —Muchachos, ya es hora de prepararnos porque tenemos que llegar al aeropuerto.

     —Tenemos tiempo mamá— replicó mi novio

     —No, nada, tenemos que comer bien, arreglar todo y entregar el departamento con una hora de anticipación porque tienen que checar que lo hayamos dejado en buenas condiciones. Además de que tenemos que trasladarnos al hospital del instituto para que revisen el respirador portátil, no quiero que vaya a tener ninguna falla ahora que estemos en pleno vuelo.

     —No hay problema, Sandra me puede dar respiración boca a boca hasta que aterricemos— al escuchar eso, no pude evitar reírme.

      —Deja de bromear, tu papá me encargó que checara eso, él es tu médico personal, no podemos desobedecer sus indicaciones.

     —Tu madre tiene razón, es mejor que revisen que todo esté en orden, así podemos viajar más tranquilas— me puse a pensar en cuál sería mi reacción si de pronto Ángel se quedará sin oxígeno en pleno viaje, sería una situación que no quisiera ni imaginarme.

     —Bueno, pues entonces vamos. Aseguremonos que tenga oxígeno suficiente para llegar al día de mi titulación.

     —Me gusta esa positividad.

******

Desayunamos lo más rápido posible que pudimos, ya que tenemos que tomarnos nuestro tiempo a la hora de alimentar a Ángel, ya que si bien con el paso del tiempo ha logrado masticar más rápido, tenemos que hacerlo con cuidado para evitar que pueda atragantarse y darnos un susto. Al terminar, de ingerir los alimentos, le propuse a mi suegra que ella fuera al hospital con mi novio, mientras yo me quedaba aquí arreglando todo lo que falta hacer aquí, cómo empacar y dejar todo el departamento limpio. Ella me agradeció y se fueron juntos.