la nueva

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Narra Kazutora

— Smiley ataja —le lanzo un paquete de ramitas que me pidió del kiosko— me debi doscientos porque subieron.

— Viejo culiao carero —responde— mañana te los paso.

Me siento en mi puesto, en la última fila al lado la pared y despierto al Baji de un wate. Se durmió a las tres de la mañana por hacerse un tratamiento pal pelo que vio en tiktok.

— Uno al despertar quiere ver ángeles y a mi toca ver un furro —reclama y por weon le pego otro wate— ah weon pesao.

— Agradece que te desperté culiao, toma —le doy un kapo.

— OE ASCUCHEN ASCUCHEN —nos dice el Mikey sentándose en el puesto de adelante que siempre está vacío— taba en dirección y escuché a la tia pame avisarle al director que la niña nueva había llegado.

— ¿Y? —digo sin interés, no entiendo cual es la emoción del enano.

— ¿Cómo que "y"? —me chispea los dedos en la cara— la tia pame dijo que venía pa nuestro curso po, osea que tenemos compañera nueva.

— Justo que ando buscando polola —habla el Mitsuya sentándose al lado del Mikey.

— Cuando deji de comprar huevitos kinder es cuando vai a tener polola —webea el Smiley.

— Oe si los compro pa mis hermanas, no wei tanto —le pega un codazo y suena el timbre pa entrar a clases.

Llega la profe jefe que es de matemáticas y al parecer viene con las pruebas, conchesumadre anhelo un cuatro porque no entendí niuna wea de homotecia. Todos se sientan en sus puestos y la profe tose pa llamar la atención.

— Alumnos y alumnas, tengo que darles un anuncio importante —se sienta en su escritorio— hoy se integra una nueva compañera, espero que puedan integrarla y no la espanten —nos tira el meo palo— señorita Farkas, pase porfavor.

¿Dijo Farkas? ¿escuché bien?

Entra una mina como de 1.60, pelito café y ojitos cafes. Tiene ondas en el pelo y saluda con la mano.

Que mina más linda weon.

— Señorita preséntese porfavor —habla la profe.

— Eeeh, ¿hola? me llamo Akemi —hasta el nombre lo tiene lindo— tengo 17 y no sé que más decir.

— Está bien Akemi, siéntese al lado de su compañero de pelo lila —apunta al Mitsuya y la Akemi asiente.

Se sienta y nos sonríe a los tres. La profe empieza a decir que a todo el curso nos fue como el hoyo en las pruebas y que con cuea la nota más alta fue un 5.3

Perdí la fe en mi 4.

— Oye walala prestame un lapiz —me dice la castaña.

¿Me dijo walala? ¿a mi? qué wea esta otra.

— Me llamo Kazutora, no walala.

— Buen dato, ¿me prestai un lápiz? —oh la culia pesa.

— No —miro a la pizarra y de reojo veo la cara de culo que pone.

— Weon pesao —se da vuelta.

— Teni perso weoncita —me mira feo— que me mirai tanto ¿te gusto acaso?

— Ni aunque me pagaran me gustaría un aweonao como vo —me hace un hoyuo y se da vuelta.

¿Y esta qué? viene recién llegando y se zarpa altoke, ya me cayó mal.

prestame un lápiz [TR chilensis] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora