[PHOTOGRAPH] [NOMIN]

LIII

-Alfa-

Ante el susurro del menor, el nombrado arremetió contra este, pegándolo con fuerza contra la puerta, pegando sus cuerpos con brusquedad.

El menor soltó un quejido de sorpresa ante la acción, sus rostros estaban a escasos centímetros, teniendo una lucha intensa de miradas, dejandose ahogar por la esencia del otro, escuchando sus respiraciones y sintiendo sus latidos palpitar con fuerza.

El Alfa había llevado sus manos hacia las del menor, para subirlas por encima de su cabeza, apretando inconscientemente.

- Me estas apretando fuerte-. Dijo Con las voz algo ahogada el Omega.

Jaemin mentiría si dijera que no estaba nervioso o algo asustado, no era bueno lidiando con las cosas nuevas, eso era sabido.

El aroma intenso a Café y galletas se concentraba cada vez más en aquella habitación, los ojos del mayor se ponían cada vez más brillantes, su fisonomía se agrandaba un poco más y su respiración era algo irregular.

El Omega no sabía en que momento había comenzado a sudar, quizás por los nervios o por el calor, la habitación estaba muy caliente y entre ambos no había una pizca de espacio.

El mayor, se ocultó en el cuello del contrario y aspiro, tratando de obtener la mayor cantidad de su aroma, ahogarse en este, embriagarse, sentir con mayor precisión a su Omega.

- Mío.- sentenció con su voz raspoza, mientras apretaba al Omega contra él, este soltó un suspiro ante el comentario y ante la respiración del mayor contra su cuello, sintiendo su cuerpo vibrar.

- Es tu celo?-. Se atrevió a preguntar Jaemin

El pelinegro negó, aún ocultó en el cuello contrario, dándose el lujo de dejar pequeños besos en aquella zona.

Jaemin iba a hablar nuevamente pero fue interrumpido por los labios del Alfa, un beso brusco y bastante apasionado, seguido cargo al Omega, haciendo que este rodeara su caderas con sus piernas.

Jaemin se aferró a la gran espalda de su novio, sintiendo el otro tipo de calor invadiendo su cuerpo.

Jaeno se dirigió hacia la gran cama y lo depósito alli, colocándose él arriba del menor, sin dejar de besarlo, sin dejar de tocar el cuerpo ajeno, sintiendo la suave piel de este.

Corto el beso y bajo hacia su cuello, besando y mordisqueando cada vez que podía, dejando una que otra marca, pero en la zona en la que se encargó de besar con mayor frecuencia, fue aquella en donde en un futuro sus dientes se clavarian, formando un lazo entre ambos, sellando con más profundidad aquel amor.

El menor se sentía diferente, le gustaba pero no sabía como reaccionar, su cuerpo reflejaba una cosa pero su mente a veces otra. No podía evitar soltar leves suspiros ante los besos que le proporcionaba el pálido.

Este siguió bajando hasta las clavículas de Jaemin, aprovechando para tocar por debajo de la camiseta de este, sintiendo como por un leve segundo el menor se tensaba ante las manos frías del Alfa. Jaemin acariciaba y apretaba la camiseta del Alfa.

Jaemin se animó a meter una de sus manos por debajo de la camiseta de su pareja, sintiendo la piel tersa, el abdomen marcado y uno que otro relieve que se debían a las marcas en su cuerpo.

Ante sentir el tacto del castaño, el mayor se quito la camiseta en un movimiento rápido. Provocando otro juego de miradas entre ambos.

Jaemin no podía creer la situación, trago con fuerza ante la imagen frente suya, cuerpo bien formado, decorado con perlas de sudor, un tatuaje en su costilla derecha, un piercing en su ombligo y otro dibujo de tinta iba de su hombro hacia la espalda.