𝐏𝐫𝐞𝐝𝐚𝐭𝐨𝐫𝐬・[𝐇𝐞𝐫𝐦𝐚𝐧𝐨𝐬 𝐇𝐚𝐢𝐭𝐚𝐧𝐢 𝐱 𝐎𝐜]

CAPÍTULO TRECE

CAPÍTULO TRECE

Límites destruidos,

Entre pasos torpes Sasaki y Ran entraron a aquella habitación de hotel, sus labios moviéndose contra los otros en desesperados besos mientras sus manos recorrían el cuerpo ajeno deshaciéndose de todas las prendas que cubrían sus pieles. Un gemido escapó de los labios de Ren al sentir como uno de sus pechos era tomado por el mayor, apretando y amasando a su gusto mientras ambos se dejaban caer sobre la cama, el más alto sobre la castaña.

— Acomódate. — Sasaki observó al hombre por unos momentos notando su ceño fruncirse y su mirada oscurecerse. — ¿Tengo que repetir mi orden?

Una sonrisa apareció en el rostro de la mujer para finalmente obedecer, acomodándose en la cama observando al oji-violeta terminar de sacar sus pantalones y ropa interior, tomando entre sus dientes un preservativo. Sasaki frunció su ceño al notar al hombre parecer pensar en algo, y con una malvada sonrisa, se retiró de la habitación.

— ¿Qué diablos hace este sujeto? — Se preguntó Ren a sí misma.

La mujer juró sentir su vientre revolverse al ver al más alto volver con una taza en sus manos, siendo su contenido unos cuantos cubitos de hielo.

— ¿Desde cuándo tenemos la suficiente confianza para probar nuestros fetiches y fantasías sexuales?

— Desde ahora. — Ran le miró coqueto. — Así que abre las piernas y prepárate, preciosa.

Los ojos de Sasaki siguieron al mayor quien volvió a su lado, acomodándose entre sus piernas mientras deslizaba sus dedos entre sus pliegues terminando por adentrarlos en su cavidad.

Ren ahogó un gemido sintiendo los dedos ajenos jugar un poco en su interior antes de volverlos a sacar. El oji-violeta miró por unos momentos a la menor, una sonrisa malvada en su rostro mientras tomaba uno de los tres cubos de hielo que había traído consigo y lo llevaba hasta el cuello de la castaña, notando sus ojos cerrados abrirse de golpe ante el contacto del frío con su cálida piel.

Sasaki suspiró, con una de sus manos tomó la nuca del mayor, obligándole a acercarse hasta su rostro para volver a unir sus labios una vez más.
Quizá Ren esperó un poco más de tortura por parte del oji-violeta, jugar un poco con la diferencia de temperaturas que había entre su cuerpo y aquel pequeño cubo de hielo.

Lo último que esperó fue sentir como el sólido era deslizado entre los pliegues de su sexo, arrancando un gemido de su garganta que terminó por ser ahogado en los labios de Ran.

— Nena, me estás volviendo loco. — Ran cerró sus ojos al sentir su falo ser tomado y atendido por la castaña. — Déjame escucharte.

Sasaki cerró sus ojos con fuerza retorciéndose bajo el cuerpo del mayor mientras sentía aquel helado cubo continuar subiendo y bajando entre sus pliegues, a veces subiendo hasta su vientre, otras veces amenazando con ser adentrado en su interior mientras el pulgar ajeno se movía en pequeños círculos sobre su punto nervioso, volviéndole loca.
Sus piernas inconscientemente se enrollaron en la cintura del hombre, obligando al mayor dejar de jugar con aquel sólido el cual tiró en algún sitio sintiéndose desesperado por tomar a la castaña en ese preciso momento.

— No puedo esperar más. — Tomando de sus piernas, Ran acercó a la mujer hasta hacer chocar sus sexos, comenzando un juego de roces mientras sus ojos se mantenían conectados trasmitiendo lo mismo.

Deseo carnal.

Ren estiró su brazo tomando el preservativo que el mayor había traído consigo, y tras sacarlo de su empaque, lo colocó sobre el falo del oji-violeta, deslizando sus dedos de arriba hacia abajo un par de veces antes de sentir como sus manos eran apresadas sobre su cabeza por el contrario. Ran intentaba mantener la calma y no dejarse llevar por el momento, una de sus manos sostenía las manos de la menor sobre su cabeza, y con la otra se ayudó a finalmente adentrarse en la cavidad de la castaña con rudeza arrancando un gemido a ambos. Unas pocas lágrimas placenteras se acumularon en los ojos de Sasaki al sentirse llena, sus labios entreabiertos dejando escapar suspiros mientras Ran iniciaba con un lento vaivén que comenzaba a volverse una tortura para la necesidad que ambos tenían.

— Ran... — La menor le miró con una sonrisa pícara. — Fóllame duro.

Un escalofrío recorrió la espalda de Ran antes de sentir como aquel límite que le detenía de volverse loco caía a pedazos. Sasaki gimió ruidosamente al ser tomada fuertemente de las caderas, la pelvis del mayor comenzando a moverse en fuertes embestidas que parecían ser capaces de destrozarle por completo. Lágrimas comenzaron a salir de sus ojos mientras clavaba sus uñas en los fuertes brazos ajenos, Ran se mantenía inclinado gimiendo a su oído y susurrando cientos de obscenidades que sólo lograban derretirle aún más.

Una de sus manos fue hasta los cabellos del hombre, tirando de ellos con fuerza dejando su cuello descubierto. Sus labios se pegaron a la piel contraria, dejando una fila de marcas que eran constantemente interrumpidas por los gemidos incontrolables escapando de su boca.

Las embestidas del oji-violeta comenzaron a perder el ritmo, volviéndose irregulares y desordenas avisando por un orgasmo acercándose para ambos. Ren cerró sus ojos con fuerza, su cuerpo enteró tembló bajo las caricias ajenas y tras un último y estruendoso gemido la presión acumulada en su centro explotó brindándole un inolvidable y desastroso orgasmo. Ran no tardó en llegar a su clímax también, sus embestidas torpes se volvieron más agresivas, y después de unos pocos segundos, finalmente se liberó sintiendo su cuerpo entero debilitarse.

Con cuidado, el hombre sacó el preservativo haciendo un nudo y lanzándolo por ahí. Sasaki sonrió al sentir al mayor caer rendido sobre su pecho, rodeando su cintura con sus fuertes brazos mientras murmuraba un último par de cosas poco entendibles y terminaba por quedarse dormido.

Tan adorable.

Sus párpados no tardaron en comenzar a pesar también, aun cuando no habían sido varias rondas de sexo, Sasaki podía asegurar haber quedado totalmente exhausta.
Entonces sus ojos finalmente se cerraron, y abrazando aún al mayor, se quedó dormida.

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Háganme el favor y todos ustedes toman una biblia y se van a leer inmediatamente.🤺

Sasaki es muy difícil de conquistar... ¿Quién creen que será el primero en hacerlo? 

No vaya a ser que alguno le rompa el corazón.😇

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