Sugar Rush || Bonten x lectora (Yandere)

~03~Loco

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~

-Adiós Sra. T/n, hasta mañana.-Ichiro se despidió de ti con la mano mientras cerraba la puerta del café.

-Adiós Ichiro, ten cuidado en tu camino a casa.

-Usted también, jefa.

Ya son las diez de la noche y aquí estás todavía delante de tu tienda. Después de comprobar que has cerrado bien tu cafetería, caminas en dirección a tu apartamento. No está muy lejos de aquí, probablemente a unos ocho o diez minutos a pie.

Agarras la bolsa de plástico que llevas en la mano y que contiene tu cena, estás demasiado cansada para cocinar la comida de esta noche, así que te limitas a pedir un simple pollo frito en la tienda de enfrente.

"Dios, tengo hambre. Han pasado unos días desde que empecé a ocupar el puesto de Hana y tengo que admitir que es jodidamente cansado. Ojalá se mejore para poder descansar unos días."

Te detienes en seco al ver un coche negro aparcado no muy lejos de donde está tu cafetería. Es un deportivo Audi negro, no puedes evitar mirarlo con admiración. Siempre has querido tener tu propio coche, pero tus ahorros aún no son suficientes para hacer la compra.

"Maldita sea, ojalá pudiera montar en esa cosa aunque fuera una vez."

Al pasar por delante de el coche sientes un escalofrío que te recorre el cuerpo. Parece que hay alguien dentro... mirándote... intensamente. Apartas la vista del coche y miras al frente sin dejar de sentir un par de ojos mirando a tu espalda.

Cuando estás a unos pocos metros del coche oyes cómo se acelera su motor y su faro delantero se cruza en tu camino.

Vaya por Dios, realmente hay una persona dentro.

El coche no se ha movido de su sitio y se ha quedado allí sin moverse, con sus luces dándote la espalda. Por alguna razón te asustaste, volviste a mirar al coche pero en su lugar te cegaron las luces.

-Debería ir a casa. Ahora.-te susurraste a ti misma y con la cabeza al frente caminaste lo más rápido que pudiste hacia tu casa. No hay mucha gente rondando el barrio en el que estás, así que las calles están casi desiertas. Te sobresaltaste al ver que el coche te seguía lentamente.

"¡Mierda! ¡Mierda! ¡Me está siguiendo! ¿Me van a secuestrar?"

De caminar rápido empezaste a correr. No miraste hacia atrás y comenzaste a correr hacia tu apartamento. Lo único que pasa por tu cabeza ahora mismo es ir a casa lo más rápido posible para poder pedir ayuda a la seguridad de tu apartamento.

Cuando el edificio en el que está tu apartamento está a la vista te sentiste aliviada pero entonces un grito repentino salió de tu boca cuando sentiste que alguien te agarraba por los brazos y tiraba de ti.