Capitulo 40

947 130 11
                                    

Las palabras de Shigaraki te habían hecho dudar sobre lo que conocías, todos se habían marchado para dejarte descansar y pensar las cosas, te volvieron a inyectar algo que nuevamente te dejo inconsciente.

Cuando despertaste no tenías idea del tiempo que llevabas en ese lugar, para ti parecían ser solo un par de horas pero estabas muy equivocada. Alguien entro a la habitación y el olor a comida inundó tus fosas nasales e hizo que tú estómago rugiera.

—Parece que de verdad tienes hambre— se sentó frente a ti y tomando una cuchara acercó la comida a tu rostro pero lo miraste con recelo —¿No pensarás que está envenenada? Hay maneras más rápidas de matarte— segundos después probó la comida y luego te volvió a acercar la cuchara —y no me digas que no usaras la cuchara que ya use, hemos compartido más que eso— inmediatamente los recuerdos de aquel día en el callejón llegaron a tu mente y tus mejillas se sonrojaron.

—No se de que hablas—

—Si insistes podemos repetirlo de nuevo— Dabi se burló.

—Comeré, ahora comeré— dijiste tan rápido como pudiste causando una pequeña risa en el pelinegro, quien comenzó ha alimentarte.

No dejabas de observar a tu alrededor mientras comías, por el momento parecía que tu vida no corría peligro pero no te arriesgarías, si había una oportunidad de escapar la tomarias. Dabi lo noto de inmediato.

—No hay salida—

—Debiste entrar por algún lado ¿O me equivoco?—

—Para ti no hay salida, aunque si repetimos lo de aquella vez— acaricio tu mejilla —tal vez me plantee la idea de ayudarte—

—Ni lo sueñes— respondiste pero no pudiste ocultar el color rojo en tu rostro.

—Es hora de dormir, Shigaraki hablara pronto contigo— nuevamente te dejo inconsciente.

                      ~~~~~

En la UA todos parecían encontrarse intranquilos, hace dos días que nadie sabía nada de ti. Por una parte el no haber encontrado tu cuerpo les deba esperanzas pero temían que estuvieras siendo torturada o peor.

Kirishima ya no tenía su sonrisa habitual mientras que Bakugou parecía molesto con todo el mundo y comenzaba peleas sin sentido por todos lados. Tu tío había abandonado sus clases y se dedicaba a buscar pistas sobre tu desaparición pero no obtenía ningún resultado.

Se había aumentado la seguridad de la escuela por temor de que otro alumno fuera secuestrado pero todo apuntaba a que tú eras el único objetivo.

—No puedo más, necesito hacer algo— Kirishima se había quedado a solas con Bakugou.

—¿Crees que no pienso lo mismo? ¡¿Pero que rayos podemos hacer?!— respondió el rubio.

—¡No lo sé! ¡Pero si no hago algo me volveré loco!— después ambos se quedaron en silencio, no había nada más que decir ni nada que pudieran hacer.

Esa tarde Bakugou recorrió nuevamente aquel camino por el que hace apenas unos días te había seguido, llegó hasta el claro dónde te había visto jugar con la lluvia. El recordar tu sonrisa y como habían pasado tiempo juntos le oprimido el pecho, era la primera vez que sentía tal desesperación, ansiaba verte y cuando te encontrará se aseguraría de no perderte nunca más.

                         ~~~~~

Una vez más abriste los ojos, frente a ti se encontraba Shigaraki, tardaste unos segundos en volver a la realidad.

—¿Ya vas a matarme?— dijiste y el solo sonrió.

—Por que no matamos a todos los que te hicieron daño y así me debes un favor—

—Nunca escucharás esas palabras de mi—

—No me digas que es por qué quieres ser un héroe— la burla impregnaba su voz —que tiene eso de bueno, los héroes pueden ser igual o más despreciables que cualquier villano—

—¡Eso no es cierto!—

—¿Segura? Si tanto les importan los demás por qué no te salvaron o me salvaron— entonces retiro la mano que cubría su rostro —tu y yo somos iguales—

—¡No lo somos! ¡A mí me salvó un héroe!—

—No te equivoques, te salvó tu tío— te miro fijamente —¿Cuántos héroes pasaron cerca de ti y nunca te rescataron?—

—Eso...— no podías responder, tu misma te lo habías preguntado varias veces.

—Si no tuvieras el "privilegio" de tener un héroe en tu familia ¿Que crees que habría pasado contigo?— no respondiste —¡Habrías muerto! ¡Igual que miles de personas que mueren sin que a los héroes les importe!—

—Las cosas no son asi— respondiste pero algo dentro de ti dudaba.

—Eso dices pero ¿Por qué no pudieron encarcelar a tu padre y solo termino en un psiquiátrico? ¿Si quiera los sabes?— lo miraste confundida —veo que te han ocultado más de lo que creía— se acercó a tu rostro —tu padre salio libre por que— comenzó a susurrar —un héroe lo ayudo— Shigaraki se alejó.

—¡Mientes!— en ese momento recordaste que tu tío nunca te permitió saber nada del juicio de tu padre —Eso no puede ser— tu voz perdía fuerza.

—Creo que tienes mucho que asimilar, así que seguiremos está conversación en otro momento— Shigaraki abandono el lugar.

Tenías la mirada perdida, no podías creer en lo que decía, era un villano ¿Cómo podía ser cierto lo que decía?. Pero una parte de ti dudaba, claramente te habían estado ocultando cosas, pero debía haber una razón. Tenía que haberla.

No tenías idea de cuánto tiempo había pasado cuando alguien volvió a entrar.

—Traje la cena—

—No tengo hambre—

—No pase una hora en la cocina para que no pruebes nada— silencio —bien, al menos bebe algo—

—No quiero—

—Con que así serán las cosas— no levantaste la mirada,no querías nada solo deseabas estar sola, escuchabas como el movía varios cubiertos pero no te importaba —es una lastima que no puedo dejar que mueras de hambre—

Segundos después fuistes tomada del rostro.

—Tendré que ayudarte— no podías moverte pero observaste como él bebía del agua y después acercó sus labios a tu rostro

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

—Tendré que ayudarte— no podías moverte pero observaste como él bebía del agua y después acercó sus labios a tu rostro.

—¡Comeré!— soltaste con el rostro completamente rojo al comprender lo que pretendía hacer.

—Todo es mejor si obedeces— aunque Dabi termino de beber el agua, no se alejó de ti por el contrario se acercó más hasta que sus alientos se entrelazaron —pero si no lo haces yo estaré encantado de hacerte cooperar—

—Obedecere— susurraste pero tenías los ojos cerrados por la vergüenza —solo detente—

—¿Por que debería?— su nariz rozo la tuya.

—¡Dabi!— alguien irrumpió en la habitación.

Tu luz más brillante [Bakugou y Tu] [Dabi y Tú]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora