Capitulo 103

467 74 49
                                    

Al día siguiente justo al despertar tu habitación ya se encontraba llena de las chicas pues a pesar de que faltaba bastante para la hora en que te reunirias con Mirio todas aseguraban que aún había detalles que pulir. A penas y lograste salir de tu habitación para desayunar. Cómo era de esperarse el humor de Bakugou lo convirtió en una bomba a punto de explotar, pobre del primer que se atreviera a medir su escasa paciencia y por lo que viste no tardó mucho en suceder pues cuando te llevaban de vuelta a tu habitación una estruendosa explosión se escuchó a tus espaldas.

Las chicas conversaban de sus experiencias amorosas mientras esperaban a que llegara la hora. Poco antes de las cuatro ya te encontrabas vestida y con el cabello arreglado, todas asintieron satisfecha al verte. Tus ojos se abrieron por la sorpresa al ver tu imagen frente al espejo, hace unos meses nunca te hubieras imaginado que te verías así, la ropa que habían preparado para ti era hermosa con tonos cálidos, tus brazos se encontraban en su mayoría descubiertos y la piel de tus piernas era visible, inevitablemente recordaste a Bakugou y todo lo que habías logrado gracias a él. En ese momento sentiste la necesidad de mostrarle lo que había logrado, lo que te había ayudado a lograr así que saliste en su búsqueda.

No tuviste que andar mucho pues al salir de tu habitación él estaba subiendo las escaleras, te detuviste esperando su reacción sin embargo no hubo sonido alguno, el rubio se había quedado sin palabras al verte por lo que Kirishima que venía detrás de él se apresuró a eliminar el silencio antes de que se volviera incómodo.

—Te ves hermosa— sonrió el pelirrojo mientras te observaba, incluso te tomo de la mano para hacerte girar provocando que sonrieras —¿Verdad que se ve hermosa?— le pregunto a su amigo y el rubio finalmente salió del trance en el que se encontraba.

—Si, se ve hermosa— te miro provocando que ocultaras tu mirada en medio de un sonrojo, tu corazón latió con fuerza. El resto de las chicas a penas y lograr ahogar un grito de emoción pues observaban todo ocultas detrás de la puerta de tu habitación.

—Promete que te divertirás— menciono Kirishima y asentiste.

Entonces la voz de Mirio se escuchó en la planta baja, era hora de irte. Pásate al lado de Bakugou solo dirigiéndole un asentimiento, el rubio tuvo que contener las inmensas ganas que le invadieron de tomarte de la mano y detenerte. Una vez que te marchaste Kirishima se le acercó y mostrando las gafas del día anterior sonrió —¿Listo?—

Mirio no dejo de halagarte sobre tu apariencia y mencionar lo alegre que estaba por poder compartir ese día contigo. Tomaron un taxi hasta el que sería su destino, se detuvieron frente a un parque de diversiones.

—Pense que esté sería un buen lugar— caminaron hacia la entrada —despues de todo siempre habías querido venir ¿No es cierto?— asentiste sorprendida de que recordara tus palabras.

Subieron a cada atracción que llamo tu atención, el rubio no dejaba de animarte a escoger pues repetía que el objetivo de ese día era pasar un rato agradable divirtiéndose. Kirishima y Bakugou habían llegado al lugar un poco después que ustedes y hacían su mejor esfuerzo por pasar desapercibidos entre la multitud aún que el rubio aseguraba que llamaban más la atención portando aquellas gafas oscuras, más de una vez tuvieron que correr a ocultarse de ti pues llegó un punto en que la emoción te hizo olvidar a la gente que te rodeaba por lo que corrías de un lado a otro llevando a Mirio de la mano, en ese momento los celos de Bakugou se estaban descontrolando y Kirishima tuvo que hacer hasta lo imposible por qué una explosión no los delatara, sin embargo el pelirrojo sonreía al verte, sabía que siempre habías querido ir aún lugar así pero tú miedo era más que tú deseo así que en ese momento él al igual que Mirio desearon silenciosamente que algún día pudieras vivir tu vida de esa manera sin importar quién o que estuviera a tu alrededor.

Tu luz más brillante [Bakugou y Tu] [Dabi y Tú]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora