Capitulo 84

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Bakugou se giro inmediatamente al escuchar la voz detrás de él, inevitablemente su rostro se cubrió de rojo debido a la vergüenza.

A unos pasos de ahí, el corazón de otro héroe profesional se rompía al ver a la mujer que amaba emocionandose por las palabras de otro, Fatgum se giro con dolor en su pecho para volver a dónde estaban los demás.

—¡Que efusiva confesión!— le respondieron —Pero por más que la idea de una relación prohibida entre una maestra y alumno sea muy tentadora me temo que tendré que rechazarte— Midnight observaba al rubio con una sonrisa —me gusta mi trabajo y no quisiera perderlo, pero búscame cuando seas mayor— le guiño un ojo antes de marcharse.

Una vez pasado el impacto inicial el rubio soltó un grito de frustración pues no entendió como es que había llegado a esa situación, estabas a su lado así que estaba seguro de haberte tomado de la mano. Después de un par de explosiones para calmarse decidió volver en tu búsqueda.

Habías desaparecido tan rápido de entre la multitud que dudabas que alguien hubiera notado tu ausencia, sin embargo Kirishima había observado claramente como aquel encapuchado te arrastraba dentro de la escuela por lo que se apresuro a seguirlos.

No te resististe a la mano que te tomo, habías identificado rápidamente las quemaduras en el dorso de está por lo que solo te dejaste llevar, después de todo podría ser peor si te resistias, no querías llamar la atención.

Dabi te llevo hasta el salón de biología en el último piso de las instalaciones de la escuela, una vez ahí, a solas, se descubrió el rostro. Pero al igual que el rubio, no soltó tu mano y al ver qué no lo apartabas sonrió justo antes de pensar que realmente estabas mal pues las chicas de tu edad normalmente no se dejarían tomar de la mano con esa facilidad, lo que ignoraba es que como tú tío y Kirishima siempre te habían tomado de la mano, tu mente lo relacionaba con algo permitido para las personas en las que confiabas.

—¿Por qué me trajiste aquí? ¿Y si te descubren?— le preguntaste.

—Creí que sería bueno disfrutar de un tiempo a solas, además...— en ese instante fueron interrumpidos por una explosión que iluminó el cielo, seguida de muchas otras. Fuegos artificiales brillaban en el firmamento, sonreiste ante tal escena.

—Son hermosos— murmuraste.

—Como este es el primer festival escolar al que te quedas hasta al final pense que tener la mejor vista sería algo bueno para ti— sonrió —solo quiero que te quedes con un buen recuerdo—

—Gracias— mencionaste sin despegar tu mirada del cielo, Dabi había planeado incordiarte un poco pero al ver la calma y tranquilidad en tu rostro solo se limito a disfrutar de ese momento a tu lado, sintiendo sus manos unidas y observando el brillo en tus ojos, el trabajo podía esperar.

Cuando el último destello desapareció, el pelinegro te atrajo hacia él de un rápido movimiento rodeandote con sus brazos como había deseado hacerlo todo el día.

—Estas jugando demasiado bien— te susurro, te separaste un poco de él mostrando la confusión en tu expresión —nos veremos pronto— fue lo último que dijo antes de desaparecer, ignorando que todo ese tiempo habían sido observados.

Te apresuraste a salir de aquel salón para no levantar sospechas pero en cuanto estabas por llegar a las escaleras una voz a tus espalda te hizo entrar en pánico.

—¿Con quién estabas?— pregunto Kirishima observando la preocupación y los nervios en tu expresión, pues ignorabas que él te había visto hace solo unos segundos en aquel salón, pero solo vio que entraste con un encapuchado así que no reconoció a tu acompañante.

—Con Bakugou— respondiste con rapidez maldiciendo internamente lo rápido que comenzabas a mentir, sin embargo tú preocupación aumento al ver la mirada que te dirigió el pelirrojo, lo conocías tan bien que sabías lo que significaba. Kirishima sabía que mentías.

—Entiendo, será mejor que volvamos con los demás— fue su única respuesta, te quedaste inmóvil viendo como pasaba a un lado tuyo —¿No vienes?— te llamo.

Sacudiste tu cabeza y asentiste, comenzaste a seguirlo escaleras abajo con los nervios a flor de piel, instintivamente observabas cada uno de sus movimientos pues su silencio solo te hacía pensar en lo peor.

En cuanto salieron al patio se encontraron con un Bakugou demasiado molesto, quien sin perder el tiempo se apresuro a exigirte que le dijeras a dónde rayos habías ido.

—Estaba con Eiji— mentiste de nuevo provocando que el pelirrojo abriera los ojos de la impresión, pero es que tu mente era un caos y de todos modos Kirishima ya sabia que le habías mentido.

—Si— acepto con rapidez —fuimos al salón de biología a ver los fuegos artificiales pues como este es el primer festival escolar al que se queda hasta el final pensé que tener la mejor vista sería algo bueno para ella, solo quería que se quedara con un buen recuerdo—

Miraste al pelirrojo con terror, era obvio que había escuchado tu conversación con Dabi y te lo estaba haciendo saber, había recitado las mismas palabras que te había dicho el pelinegro.

La presión era tanta que comenzaste a hiperventilar, el pánico que te invadió era tanto que nada te ayudaría en ese momento. Solo pudiste observar a ambos acercarse preocupados a ti, pero por más que veías el movimiento de sus labios todo sonido se había desvanecido, poco a poco tu visión fue volviéndose negra hasta que tu mente no pudo más y caíste inconsciente.

Para cuando volviste a abrir los ojos te estabas recostada en tu cama, suspiraste aliviada al ver qué te encontrabas en tu habitación y por un segundo pensaste en la posibilidad de que todo lo sucedido solo haya sido un mal sueño, hasta que notaste una figura a tu lado.

—Me alegra ver qué estás bien— dijo Kirishima —te prepare un té para cuando despertaras— te mostró la taza pero nuevamente el pánico te invadió al recordar que él sabía que habías estado con Dabi —y creo que hay algo de lo que tenemos que hablar—

Tu luz más brillante [Bakugou y Tu] [Dabi y Tú]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora