— ¡Se abre la sesión! — anuncia el juezYo me coloqué con Gigi en uno de los asientos del público, observando a mi tía y a Amanda (nuestra abogada de acusación) sentada junto a ella en una mesa aparte, delante de nosotros. Tía Miller parecía inquieta, veía su mano temblar
James, nuestro abogado de defensa abre paso entre la gente de la entrada. Había empezado el juicio y aún no había llegado, algo muy grave que no se solía ver
— ¡Detengan a Donald! ¡Detengan a Donald! — dijo James casi sin aliento, soltando toda la voz que tenía. La gente lo tapaba en la entrada. Cuando consiguió salir y mostrarse, los guardias reaccionaron sosteniéndole el brazo
El tribunal y demás que estaban allí, viendo de frente lo que estaba ocurriendo, soltaron un grito de espanto, al ver el estado de James
Me di la vuelta en el asiento y quedé horrorizada ante la situación
James presionaba la herida que chorreaba sangre y ocupaba el lado izquierdo del vientre, esta manchaba su camiseta blanca. Además, parecía que tenia golpes en la cara, los moretones ocupaban su moflete
Los guardias, que no podían sostenerle más tiempo, dejaron que cayera arrodillado en el suelo del juzgado
— ¡Ha sido Donald! ¡Ha sido Donald! — dijo James, señalándole mientras presionaba la herida con la mano restante. La gente restante miraba y señalaba a Donald con cara de horror
— ¿Qué estáis mirando? ¡Se cierra la sesión! — el juez golpeó multitud de veces con el mazo a la base redonda de madera típica de su trabajo — ¡Llamen ya a emergencias! — solicitó el Juez
Donald se levantó y se dio la vuelta hacia James, con cara de asustado — ¡Yo no he hecho nada! ¡Lo juro por mi madre!
— ¡Mentiroso! ¡Tú estabas ahí! — dijo James expresando dolor e hiperventilando a un ritmo descomunal
La ambulancia ya se empezaba a oír de fondo y de repente, un grupo de médicos vestidos con trajes gordos de su oficio entraron corriendo a la sala sosteniendo una camilla, a la que dejaron en el suelo y a la que subieron a James, que soltaba quejas de dolor
— ¡Eres un mentiroso! ¡Eres un jodido psicópata! ¡Y se va a hacer justicia! — dijo James, perdiendo audiencia y volumen al alejarle de la sala
— Ha terminado el juicio, iros ya, me informaré de lo que pueda y os comento — dijo Amanda caminando rápido hacia nosotras
Mi tía, que estaba sentada en la mesa en la que tendrían que estar James y Amanda, se levantó, me cogió del brazo y me sacó a fuera del juzgado junto a Gigi, nerviosa
La gente se iba de la sala a pelotón, luchando por salir cuanto antes
Veía todo a cámara lenta. Tía Miller sacándonos del juzgado a Gigi y a mi. Gigi mirando hacia atrás, observando al juez. El juez asustado recogiendo sus cosas. El público saliendo del lugar lo más rápido que podían, se podía decir que parecía una estampida. Las sirenas de los coches de policía sonando en el exterior. La ambulancia alejándose del lugar, llevando a James a la UCI (Unidad de Cuidados Intensivos). Móviles grabando en las afueras del juzgado
— ¿Qué ha pasado, mamá? — mientras salíamos por la puerta, vi a una niña intrigada, preguntando a su madre, que parecía más asustada que la pequeña
* * *
"Desgracia en un juzgado local
James Davies, abogado de defensa y licenciado en derecho, fue víctima de un disparo y golpeado por un agresor anónimo . Este se encuentra en buen estado ingresado en el hospital de la ciudad. ¿Qué ocurrió? Pues bien, ya mismo se lo contamos"
ESTÁS LEYENDO
La Sombra Que Esconde El Árbol
RomanceUna novela en la que dos personas pueden poseer el todo y a la vez la nada Para ellos son dos seres que se recomponen del peso de la vida cotidiana lo mejor que pueden, aún estén pasando por la posible peor época de su existencia Para ellos no es...