Gigi MillerAl ver a Jonathan Wade, me escondí atrás del todo, al fondo del callejón. Mejor que se apañara Grace porque yo no sabía que decir al respecto y menos con los guardias de detrás de Jonathan que me ponían nerviosa. ¿Y si se lo contaba a todo el mundo?
— Em... — Jonathan parecía que no sabía que decir, al igual que Grace, aunque a ella se la notaba más — tengo que entrar, ya sabes... en teoría tendría que estar ya dentro... — dijo algo tímido, apretando los labios y jugando con los dedos de sus manos
— ... eh si, si, claro... luego te veo... si te encuentro, claro... quiero decir, cuando acaben los premios... puede ser que te vea... Jon... Jonathan — Grace soltó una sonrisa tonta y agachó la cabeza, un claro gesto de vergüenza e incomodidad
— Vale, pues... voy a entrar, y luego... cuando acaben los premios, te puedo buscar
— Vale... adiós — dijo Grace haciendo el gesto con la mano al mismo tiempo. Se la escapó un gallo al despedirse y me contuve por no reírme
La conversación había sido rara, me había incomodado hasta a mi
Jonathan entró con los guardaespaldas y cerró la puerta suavemente
No pude contenerme más y estallé a carcajadas
— ¿Qué ha sido eso? — casi lloraba de la risa
— ¡No te rías! ¿vale? Casi me da un infarto — dijo Grace, que apoyó su espalda en la pared y se frotó la cara con las manos
— Eso ya lo sabía, y vaya gallo que te ha salido
— Te vuelvo a repetir que no me está haciendo ni una pizca de gracia. ¿Qué habrá pensado de nosotras? ¡De mi! ¡¿Y si cree que me iba a colar porque soy una ladrona?!
— Yo con el " a lo mejor te veo Jonathan" me creería lo que acabas de decir, ha pensado que eres una ladrona fijo — dije y tal vez, con demasiada sinceridad
— No ayudas — se tapó los ojos con las manos por la vergüenza que tenía
— Que no, que es broma anda, si él estaba más embobado que tú — mentí un poco para hacerla sentir mejor, aunque si es verdad que él también parecía bastante cortado
— Si seguro — suspiró — por cierto ¿le he dicho que nos veíamos luego? — se giró hacia mi y cruzó los brazos
— Si — afirmé
— Mierda, mierda, mierda — Grace se creyó que no la escuchaba al pronunciarlo con sus labios, pero pude leerlos sin complicación
— Tranquila, si él ha dicho lo mismo que tú — intenté tranquilizarla
— ¿En serio? — me miró rápidamente
— Que si, que ha dicho que seguramente te vea — Grace estaba tan embobada que no había prestado atención a lo que había dicho Jonathan ni a lo que había dicho ella misma
— ¿Pero tú has escuchado algo de lo que ha dicho? —
— Bueno... no — dijo con sinceridad
Grace se quedó pensando durante un instante y yo me miraba en el espejo del móvil, por si se me había ido el maquillaje, pero seguía todo a la perfección. Al final, Grace se lanzó y me hizo una pregunta que ella no podía responder
— ¿Crees que debería esperarle o irme? — se colocó un pco el pelo, empezaba a hacer viento y frío, me estaba congelando, pero aguantaría
— ¿A que viene la pregunta? ¿En serio te quieres ir?
— No, pero... ¿y si Jon ha dicho lo de vernos para no hacerme el feo?
— ¿De qué hablas? Se ve claramente que quería verte
— ¿Lo dices para no hacerme sentir mal, no?
— Si, claro. Tú calla y ve a la entrada, que estoy segura de que por aquí no va a salir Jonathan
Grace Keller
Caminé decidida hasta salir del callejón y llegar a la entrada, o por lo menos, hasta llegar a lo más cerca que pude de la entrada. Estaba llena de gente, no conseguía ver nada. Intentaba asomarme, pero solo veía cabezas y el cielo de la noche
La gente empujaba de un lado a otro, casi me asfixio entre la multitud. Me taparon y ya no sabía ni dónde estaba, si me habían movido hacia el otro lado del edificio o me había adentrado más. Además, perdí de vista a Gigi
Respiré ondo, agobiada, e intenté abrir paso hasta llegar a ver la alfombra roja que pasaba por fuera del edificio y se adentraba en él
Muchas celebridades salían de este, saludando, firmando autógrafos y otros caminaban rápidamente sin llegar a correr para irse lo antes posible y no tener que aguantar a la prensa
Jon, salió con sus guardaespaldas (no fue el único que tenía contratadas a estas personas). El sonreía y avanzaba hasta el final de la alfombra, pero yo notaba que no estaba contento, a lo mejor no quería que lo notarán
Me puse de puntillas, para intentar que me viese y el chico de los profundos ojos azules buscaba entre la multitud algo o a alguien, giraba la cabeza de un lado a otro. Los periodistas acercaban sus micrófonos o sus móviles para sacarle algunas palabras, pero él abría paso
De repente, encontró mi mirada y solté una sonrisa apretada, el hizo completamente lo mismo
Una limusina negra le esperaba al final de la alfombra, para sacarle de allí. En esta se montó y seguidamente sus guardaespaldas. El conductor del vehículo avanzó rectamente y el chico de los profundos ojos azules desapareció de mi vista
* * *
Tal vez fui muy ingenua al pensar que nos íbamos a ver, él tendría cosas que hacer, ¿en que estaba pensando? Era una persona muy conocida, era un gran actor, de estos que tienen millones de fans y otros millones de cartas y mensajes al móvil ¿y yo pensaba que tendría tiempo para verme?
Avancé recto, al igual que la limusina que ya no veía y busqué mi móvil en el bolsillo para llamar a Gigi y así poder volver a casa
Pasé por una calle vacía (comparada con la calle en la que estaba el edificio de los premios, en esta no había nadie) que daba esquina y busqué el numero de Gigi en mi móvil
Y al girar en la esquina, despistada, me choqué contra una chaqueta negra, ancha y larga, que pertenecía a un cuerpo más alto que yo.
— ¿Jon? — miré un poco hacia lo alto para poder mirarle a los ojos, era algo más alto que yo o para ser sincera, mucho más alto que yo.
Me alejé unos centímetros de él, creí que estábamos muy pegados el uno al otro — creía que estabas... quiero decir, que te habías ido en la limusina... ¿y como te has cambiado tan rápido? — ahora vestía más informal, con ropa ancha, ya no llevaba el traje negro y blanco— Tuve que salir en coche para que no me siguieran, porque ¿te he dicho que nos veríamos luego, no? — se aseguró
— Si... creo que si — froté mi brazo estirado con mi mano, nerviosa
— ... ah y me he cambiado en el coche, no quería estar con el traje, llega a ser muy incómodo — me encantaba la sonrisa desdeñosa que ponía — ¿damos una vuelta?
— ¿Por el centro no vamos, no? — empezamos andar hacia delante, por la dirección en la que iba yo antes de encontrarme con él
— A no ser que quieras que fotos tuyas estén en internet — soltó una pequeña risa
— Si por lo menos no fuera con estas pintas, iría — dije disconforme. Jon me inspeccionó de arriba a abajo mientras andábamos
— Para poder llamar a como vas " pintas " me tendrías que haber visto a mi cada vez que voy a rodar — sonreí disimuladamente y agaché la cabeza
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La Sombra Que Esconde El Árbol
RomansaUna novela en la que dos personas pueden poseer el todo y a la vez la nada Para ellos son dos seres que se recomponen del peso de la vida cotidiana lo mejor que pueden, aún estén pasando por la posible peor época de su existencia Para ellos no es...