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Lentamente, giro la manija de la puerta tratando de hacer el menor ruido posible. Ingreso despacio hacia aquella oficina, el silencio era espeluznante. Rápidamente, se dirigió hace el escritorio y busco con la mirada el manojo de cartas que iban a ser enviadas. De entre sus ropas saco un sobre, muy similar a los que se encontraban ahí, lo mezclo y volvió a dejarlas en su lugar. Suspiro, finalmente está hecho pensó. 

Francia ya había sido traslado con anterioridad, por lo que, esa orden no seria nada nuevo para los soldados. Esperaba que lo aceptaran sin preguntar y solo cumplieran con el mandato. Si llegaba a ser descubierta por el germano, este no dudaría en buscar a quien lo había hecho. No tardaría en dar con ella, inconscientemente acaricio su cuello, ¿Él la mataría? Se preguntó. Si se enteraba de lo que había estado haciendo todo este tiempo, ¿Él la asesinaría? Si supiera el porqué ella permanecía a su lado, ¿Acabaría con su vida? Un escalofrío recorrió su cuerpo. No debería hacerse esas preguntas, no sacaría nada bueno de ellos. 

Camino hacia la puerta para intentar salir, pero cuando intento tomar el pomo esta se abrió. Una intensa mirada roja la atravesó, sintió su cuerpo temblar. ¿Por qué estaba él ahí? Según tenía entendido, él estaba en una reunión importante y demoraría lo suficiente para que ella entrar y saliera. El pelirrojo la mira de pies a cabeza, un poco confundido. 

Ella abrió lentamente los labios, pero no salió ni una sola palabra. Levanto la mano y le acaricio la mejilla - Hast du nach mir gesucht? /¿Me estabas buscando? - Preguntó. 

Ella aceptó el gesto y sonrió lo más natural posible - ja / Si - dijo con su melodiosa voz - Ich wollte wissen, ob du schon zurückgekommen bist, obwohl mir gesagt wurde, dass es dauern würde, weil du beschäftigt warst. / Quería saber si ya habías regresado, aunque me dijeron que tardaría porque estabas ocupado. - Su mirada se suavizó, ella cogió la mano de este - Ich wünschte, ich könnte mit dir zu Mittag essen, ich habe ein paar Dokumente für dich / Deseaba poder almorzar contigo, tengo unos documentos para ti - Ofreció dulcemente. 

Él le sonrió - Bereiten Sie das Esszimmer vor / Preparen el comedor - ordeno a uno de sus escoltas - Ich würde gerne wissen, was diese Papiere enthalten / Me gustaría saber que contienen esos papeles - levanto la su mano y beso el dorso de esta, le sonrió - willkommen zurück / Bienvenida - susurro. 

Sintió sus mejillas sonrojarse - Es ist mir eine Freude, hierher zurückzukommen / Estoy feliz de volver - menciono antes de que esté la jalara y depositara un beso en sus labios. 

- Lass uns gehen / Vamos - aun confundida por lo ocurrido camino junto a él hacia el comedor. 

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La puerta se abrió de golpe, dejando ver a un molesto americano entrando. El par de orbes azules brillaban en furia, barrio el lugar con la mirada en busca de cierta persona. Cuando lo encontró se dirigió hacia él, su paso era firme y sin vacilación - Mexico! - llamó. El mencionado al escucharlo, solo a tino a seguir su camino, ignorándolo completamente. Esto enfureció mucho más al norteamericano - Mexico! - Camino mucho más rápido detrás del latino hasta que pudo alcanzarlo para tomarlo por el brazo - Don't you listen to me?! / - ¡¿No me escuchas?!- le reclamó.

- ¡¿Qué quiere pinche gringo?! - le respondió molesto.

- Didn't I tell you clearly to stay away from that communist! / ¿No te dije claramente que te mantuvieras alejado de ese comunista? - protesto mientras apretaba su agarre.

- Mira hijo de la chingada - dijo mientras alejaba su brazo con fuerza - Primero háblame bien, en español entiendes -  cruzo los brazos frustrados - Segundo, no tengo por qué hacerte caso.

- México - volvió a llamarlo - Estar junto al comunista no te traerá nada bueno - menciono serio.

El tricolor levantó la ceja incrédulo - ¿Me estás amenazando?

- No - respondió rápidamente - Solo no quiero verte cerca de él - Intento agarrarlo de nuevo, pero este retrocedio. 

- Estas pendejo - Expreso con asco - Si crees que haré lo que quieres - contraatacó - No eres nadie, para que me des órdenes.

- Estamos en una guerra México, no puedes distraerte en cosas estúpidas - recriminó.

El latino rio levemente - La razón por la que estoy aquí, es porque me atacaron, no para defender tu maldito trasero, idiota.

El de estrechas se frotó la cien, cansado - No sé por qué discutimos de nuevo - le respondió - Solo céntrate en lo que tienes que hacer.

El tricolor dio unos pasos mientras lo miraba desafiante - Recuerda gringo, solamente permanezco a tu lado porque quiero rescatar a Filipinas.

El ojiazul chasqueo la lengua, no le gustaba recordar lo que había sucedido. Él nunca perdía, él nunca sería derrotado. - No necesito de tu ayuda - dijo molesto.

- No me importa si la quieres o no - menciono aun tratando de no darle una madrisa al gringo - Solo quiero ver que esté bien, y que se aleje de ti. - el contrario pareció querer decir algo, pero el latino extendió sus alas y emprendió vuelo - Estaré listo para la batalla así que no me busques otra vez.

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La comida fue tranquila hasta el final, cuando ella le extendió unos papeles. Agradeció mentalmente el haberlos llevado consigo, ya que no habría tenido tiempo de ir por ello a su habitación. Él leyó rápidamente el contenido de estos, y los deposito sobre la mesa. Sonrió ampliamente, hacían relucir sus afilados diente, cruzo las manos y la miro. 

- Offenbar planen sie einen Einfall auf französisches Territorium / Al parecer planean una incursión en territorio francés - dijo alegre - Dann muss ich ihn wohl begrüßen / Entonces tendré que darle una buena bienvenida - menciono con sorna. - Dass die Königreichsdivision nach Bordeaux geht / Que la división Das Reich se dirija a Burdeos - ordenó a un de sus soldados - Zu diesen Papieren / En cuanto a estos papeles - menciono extendiéndole algunos - Es würde Empire mehr interessieren / Le interesaría más a Imperio. 

Ella tomó un poco de vino - Ich werde ihn besuchen gehen, wenn du mich lässt / Iré a visitarlo si me lo permites - dijo recogiendolos.

Él pareció pensarlo un poco - Es wäre gut, wenn Sie in Zukunft Beziehungen aufbauen würden / Sería bueno que entablaras relaciones a futuro - formulo, aunque se refería más al pequeño hijo de Imperio Japones - Gib ihm diese Dokumente dann / Dale esos documentos entonces - finalizó, ella solo asintió.

Se levantó y se dirigió a él, él extendió su mano para tomar la de ella. Se sentó en su regazo - Ich habe dich vermisst / Te extrañé - susurro mientras lo abrazaba y deposito un casto beso en los labios del contario. La intensa mirada de este la encendió, cogió su rostro y profundizo el contacto. Ella jadeó y eso fue inicio a otro encuentro pasional entre los dos. 

Nota 1: La intervención de Elvira Chaudoir, doble agente en la segunda guerra,  fue importante para la conspiración contra los alemanes, ya que gracias a ella es que el 6 de junio de 1944, el día del desembarco en Normandía, la división Das Reich ...

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Nota 1: La intervención de Elvira Chaudoir, doble agente en la segunda guerra,  fue importante para la conspiración contra los alemanes, ya que gracias a ella es que el 6 de junio de 1944, el día del desembarco en Normandía, la división Das Reich se hallaba cerca de la región de Burdeos, y no en Normandía, lo que habría podido ser desastroso para las fuerzas aliadas. Y así lo hizo, siendo una más de los muchos y muchas espías que ayudaron a difundir diferentes mentiras para conseguir que fuese un éxito y una de las claves en el triunfo final de la Segunda Guerra Mundial por parte de los aliados. 

Secretos de un pasado tormentosoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora