𝐋𝐀 𝐕𝐄𝐑𝐃𝐀𝐃 𝐐𝐔𝐄 𝐍𝐀𝐃𝐈𝐄 𝐂𝐔𝐄𝐍𝐓𝐀

Capitulo 19

(...)

Han pasado aproximadamente dos semanas desde aquella noche dónde hice el juramento, Draco se la a pasado cuestionandome sobre por qué lo ignoro y mis hermanos de igual manera, suficiente tuve con la pelea que tuvimos aquella noche que regresamos al castillo. Las cosas se están complicando más de lo que pensé y ahora éstoy más débil hacía el horrocrux que vive dentro de mí. Mis manos en ratos se tornan de un color obscuro y mi comportamiento yo no lo controló. Todas las noche voy a arreglar el armario pero es inútil, ningún arreglo a tendió efecto, la única vez que a tenído algún tipo de efecto fué la vez que metí una manzana dentro, salió podrida por dentro pero lo intenté una segúnda ves y funcionó, lo volví a intentar al otro día y tenía abolladuras, estoy segura que Potter ya descubrió todo lo que éstoy haciendo durante las noches.

Estoy recargada sobre el lavabo del baño, tratando de luchar conmigo misma. Mis manos están de un color obscuro, en mi espalda se pueden apreciar mis ventas marcadas del mismo color de mis manos, y mi sudor excesivo ya parece normal.

Alguien entró dándo portazo y sus pasos me buscó por toda la habitación.

Mattheo: ¡Eli, Dumbledore le está mostrando recordatorios a Potter sobre el día que conoció a papá! —abrió de igual manera la puerta del baño y me vió retorciendome cómo si me estuvieran lastimando en el cuello, se hiba a acercar a mi pero Tom lo detuvo del hombro derecho—

Tom: ¿Estás bien..? —ignore su pregunta. Era demasiado estúpida, además no era porque no quisiera responder, si no por qué en verdad no podía hacerlo—

Elizabeth: Vayanse ¡Po-por favor! —respondi lo más claro que pude. Sentía un ardor recorrerme de pies a cabeza—

Mattheo: Tenemos que matarlo —se giró hacía Tom— estamos a tiempo.

Tom: No podemos Mattheo, es el único horrocrux que está seguro.

Mattheo: ¿¡Prefieres un maldito horrocrux que a tú hermana!?

Volvi a retorcerme con más fuerza y más consecutivamente. Ya no podía retenerlo, Ya no podía más.

Elizabeth: ¡Salgan de aquí ya! —solte un quejido— Tengo que controlarlo, matarlo no es un opción Mattheo.

Mattheo: Al carajo.. —saco su varita pero Tom se la arrebato—

Tom: ¡No vas a cometer otra estupidez!

Mattheo: ¿¡Ésto te parece una estupidez!? —trate de ahogar mi grito pero fué demasiado audible—

Tom: ¡Entiende que si matas el horrocrux la matas a ella! —mattheo lo vió en silencio y luego se giró hacía mí con una mirada de preocupación— No hay nada que podamos hacer..

Elizabeth: Vayan a seguír con el armario.. —sujete con más fuerza el lavabo, aferrándome a él—

Mattheo: ¿¡Por qué mierda te aferras a ése armario!? ¡Se supone que ésa misión es de Malfoy!

Elizabeth: ¿¡QUE PARTE DÉ QUE HICE UN JURAMENTO INQUEBRANTABLE TÚ CEREBRO DE MIERDA TODAVÍA NO ENTIENDE!? —grite con todo el volúmen que mi garganta me permitió. No le quería gritar, pero está ya no era yo, era el horrocrux—

Normalmente cuándo toma el control completo de mi es cómo si fuera papá. No tengo ningún tipo de sentimientos, sólo siento desprecio hacía todo mundo, sin excluir a mis hermanos, éso sin mencionar que bajo esté efecto no me duele decir cosas hirientes hacía las personas que amo.

Elizabeth: ¡JURÉ CUMPLIR SUS MISIONES PORQUE ES TAN INEPTO E INSERVIBLE CÓMO SU ESTÚPIDO PADRE, NO SABE HACER NADA Y LO ÚNICO QUE HACÉ ES HECHAR TODO A LA MIERDA!