Capítulo 7 •Ahora estamos en muchos problemas•

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—¡Hey! —me llamó Michael—

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—¡Hey! —me llamó Michael—. Espera, voy contigo —dijo con una sonrisa.

Asentí, Michael se apresuró a llegar a mi lado.

—¿Por qué quisiste acompañarme? —pregunte curiosa.

—Porque aprovecharé para hablar con la chica que cantó —dijo mientras subía y baja las cejas rápidamente.

Solté un risa.

—De acuerdo, vamos —sonreí.

Caminamos hasta llegar a la parte trasera del escenario, las personas que se encontraban ahí nos observaron frunciendo el ceño.

—¿Crees que haya sido buena idea venir? —me susurró Michael al oído.

—Claro que si —susurre de vuelta.

—Disculpen, jóvenes —se escuchó una voz femenina detrás de nosotros, giramos para ver de quien se trataba—. No pueden estar aquí, les pido que abandonen los camerinos, por favor.

Bueno, tan siquiera lo dijo de una manera amable.

—Sólo queríamos preguntarles algunas cosas a los estudiantes que actuaron —dije.

—Lo siento, chicos, pero la demostración ha terminado, será mejor que regresen con sus compañeros.

¡Genial! Y yo que quería saber más acerca de la Leyenda.

Solté un suspiro y me resigne.

—De acuerdo, muchas gracias —gire a ver a Michael—. Vamos.

Salimos de ahí y nos encontramos con Agustín y Valentina.

—¿A dónde fueron? —preguntó Valentina.

—Karol quería saber más acerca de la Leyenda de su pueblo y fue a preguntar pero no pudo —habló Michael.

—¡Qué mal plan! —me dijo Valentina—. Pero tal vez Agustín sepa, ¿verdad, Agustín?

Valentina lo miró y yo hice lo mismo.

Agustín se puso nervioso.

—Y...yo...yo no sé nada —dijo el castaño.

—Claro que si la has de saber, Agustín —dijo Michael—. Me contaste que toda tu vida has vivido en El beso del Diablo, cuéntale a Karol la Leyenda, para que no se quede con la intriga.

—Pero... —interrumpí a Agustín.

—Vamos, Agus, me ayudarías mucho, lo que me digas lo integraré al trabajo que me dejaron hacer —dije.

Agustín soltó un suspiro.

—De acuerdo... Pero te la cuento en el transporte, ya es demasiado tarde y el último autobús sale en 15 minutos —dijo.

—Cierto, vamos a dejarlos, Valentina —dijo Michael.

Michael y Valentina nos fueron a dejar a la parada y yo me quede sola con Agustín esperando el transporte.

—Puedes empezar a contarmela en lo que esperamos —dije con una sonrisa.

Agustín me observó preocupado y después miró el reloj de su celular, el cual marcaba 8:26 p.m.

—Karol... —hizo una pausa—. Esta Leyenda es... Muy delicada en nuestro pueblo, nadie habla de ella desde hace muchísimos años.

—¿Pero por qué?

—Porque como dijeron en la demostración es 100% real... Es una de las pocas Leyendas que no se han modificado es... La auténtica.

El autobús llegó, nos apresuramos a subir, tomamos uno de los asientos de hasta atrás.

—Bueno, eso de que sea una Leyenda auténtica es fantástico —dije.

—¡Uy si, muy fantástico! —dijo con sarcasmo y fruncí el ceño.

—Agus, en verdad no entiendo nada.

—Te contaré todo, Karol, al fin ya no se puede hacer nada. Ya lo han despertado... —fruncí el ceño.

—¿Qué?

Agustín me interrumpió.

—Hace 300 años. En El beso del Diablo habitaban muchos gitanos —suspiró—. Algunos eran practicantes de magia negra, otros simplemente curaban a la gente de enfermedades raras —Agustín me observó—. Como contaron en la demostración, una gitana le pidió a la luna casarse, esta se lo concedió y la gitana se casó con un hombre de tez morena. A cambio de eso, la luna le pidió al primer hijo que tuviera con aquel hombre. Todo iba bien —Agustín suspiró—. Hasta que el niño nació, un 10 de Septiembre de 1717, era un niño demasiado hermoso, el gitano creyó que ese hijo no era de él por las características que el niño poseía, así que mató a su esposa y al niño lo abandono en un monte, pero lo que no cuentan es que el gitano se quitó la vida poco después de hacer eso. El niño desapareció de la faz de la tierra... Muchos eran los que contaban que habían visto a una mujer hermosa cargarlo entre sus brazos mientras desaparecía en la oscuridad de la noche.

—Pero... O sea...

Agustín me interrumpió.

—Aguarda aún no he terminado —guarde silencio y puse atención—. Aquella mujer hermosa era la luna. Todos piensan que la luna es hermosa, pero tiene su lado oscuro —susurró ya que la gente nos estaba escuchando—. Después de lo que pasó con el “hijo de la luna” comenzó ha haber muchas masacres en el pueblo, muchos dicen que fue él... El hijo de la luna. Porque él creció con un rencor enorme hacia la humanidad, y... ¿Quién no lo haría? Si estuvieran en el lugar de él. Su madre lo ofreció. Su padre mató a su madre y después lo abandonó. Hace 100 años fue la última vez que el hijo de la luna pisó la tierra dejando una maldición para los habitantes, dijo que cada que alguien contara su Leyenda él iba a regresar e iba a ocasionar muchos problemas en el pueblo, él no envejece, él es una pesadilla, puede ser hermoso pero él es malo... Y ahora estamos en muchos problemas.

Hijo de la Luna Donde viven las historias. Descúbrelo ahora