Sex Intructor® | 𝐏.𝐌 |

Primera vez®

Capítulo cuatro.

Narra Ninette.

- Quiero que sea un momento realmente especial para ti -murmuró- tampoco quiero que te enamores, si no que desees más el sexo después de esto

Tomó aire y jalando de su mano en mi cintura hacia él, me tomó de los brazos y los puso delicadamente sobre su cuello para después tomarme de nuevo por la cintura.

Empezó a tararear una melodía perfecta, la reconocí como Sweat de ZAYN. Sus pies hicieron que los míos se movieran al compás de la canción. Estábamos bailando, en mi lugar favorito. Estoy adorando realmente este momento. Recargué mi cabeza en su hombro sin alcanzarlo totalmente. Él puso su mandíbula al raz de mi cabeza y siguió el compás.

Su respiración era constante y regular, la mía era inconstante e irregular.

Dio un paso atrás y subió sus manos a mi rostro. Sus ojos oscuros vieron directamente a los míos y acarició mi mejilla sus pulgares.

Sus ojos bajaron a mis labios y sin esperar mucho, los suyos envolvieron los míos.

Los movió constantemente hasta hacerme querer más. Deseaba el contacto de su piel con la mía. Bajó sus manos de nuevo a mi cintura y dejó un beso casto en la comisura de mis labios.

- Quítate la blusa -ordenó en un susurro.

Sin quitar mis ojos de los suyos, tiré del borde de esta para quitarla y dejarla sobre una de las sillas de metal.

Payton miró directamente mis pechos y lamió sus labios. Se acercó y con la llema a de sus dedos tocó la piel de mi abdomen, inmediatamente mi piel se erizó ante su contacto. Él sonrió al ver la reacción de mi cuerpo ante esa simple acción.

Su mano fue subiendo hasta el broche de enfrente y se acercó a mí oído.

- ¿Te la quitas tu o te lo quito yo? -susurró dejando besos sobre mi cuello.

Sus besos bajaron a mi pecho y siguió hasta la separación de estos, al llegar al broche volvió a verme y subió a mis labios, besándome con un poco más de rudeza.

Mis manos fueron a su cabello jalándolo entre mis dedos. Sus manos fueron a mis piernas y dio un suave apretón para yo después brincar y enredarlas en su cintura.

Mis ojos se abrieron de par en par cuando sentí un bulto duro en mi entrepierna.

Él tan solo me miró con un brillo lujurioso y con sus manos en mi trasero me hizo restregarme sobre del bulto. Abrí la boca con sorpresa y escuché su risa grave, sentí el sonrojo en mis majillas y volvió a besarme.

En algún punto sentí mi espalda chocar con una pared, sus labios devoraban los míos vorazmente, su lengua lamió mis labios y al permitir el paso sentí todo en mi estallar.

Sus manos apretaban y masajeaban mi trasero, era una sensación deliciosa.

Sus besos pararon y me miró.

- Abre la puerta -murmuró en una voz tan grave y sensual que sentí una presión en mi vientre.

Me bajó de sus brazos y yo saqué las llaves de mi sudadera que estaba en el piso. Abrí la puerta y el calor de mi casa lo agradecí.

Sentí los pasos de Payton tras de mi y con nervios caminé adentrándome en la casa.

Subí las escaleras y caminé en dirección a mi habitación, pero antes de poder terminar de subir las escaleras, sus manos me tomaron de la cintura y me volteó a él. Sus labios besaron los míos y sus manos exploraron mi torso sin tocar mis pechos.