Encuentro casual

930 80 0
                                    

A la mañana siguiente madelen se despierta, pensando en sobrevivir y evitar pensar en esa mujer que la trae hecha un ocho, mientras que la otra mujer despierta quejándose del dolor y la incomodidad, luego de reponerse, comienza su rutinario fin de semana, calificar talleres, a su manera, solo pone su firma sin molestarse en leer, pero al llegar a ese nombre tan llamativo, madelen Rodríguez.
Un nombre poco común con un apellido algo común.

Se detiene a leer cada pregunta con cautela, tiene mala caligrafía, pero su ortografía es casi impecable, su comprensión lectora es muy profunda, es un deleite leer sus pensamientos, la mayor queda más fascinada con la sutilidad con la que piensa esa chiquilla, es encantadora, al terminar de leer le pone la firma y un, "buen trabajo" en su perfecta caligrafía y ortografía, luego sigue sin ni siquiera leer el resto. Y allí acaba su trabajo, se toma un copa de vino y se arregla para salir a casa de su amiga, quedaron para salir a cenar y hablar de sus vidas, ya sabe las preguntas que le hará, pero tratará de evadirlas, o solo darle una mirada fulminante, sabe que su amiga en ocasiones llega a temerle a sus miradas.

Se arregla para ir a recoger a su amiga, no confía en los gustos de su amiga porque a veces llega a lugares baratos a comer comidas dignas del lugar, toma su bolso, no sé molestó en mirarse al espejo, sabe que siempre se ve divina.

Ya se encuentran en un lugar de clase media, al menos la vista se ve bien, da con una vista a toda la ciudad, para ser de clase media está muy bonito, traen la comida, la mayor la prueba y parece gustarle, solo se molestó en comer cinco bocados, es su forma de decir que le gustó, pero no come más, en cambio su amiga lo disfruta, se podría decir que la rubia es mucho más rica que lilith, pero ella es mucho más humilde, más querida, en cambio lilith es todo una inalcanzable y quizás sus millones no llegarían a superar los millones de su amiga.

Al terminar la rubia le pregunta.

- qué te pasó ayer?
- nada, no fue nada.
- por qué llegaste así, ayer?
- simplemente tenía ganas y ya, no quiero hablar más del tema.
- está bien, y si mejor nos tomamos una foto.
- solo una, sabes que no gusto de fotos.
- aww mi amor solo una. le habla como una niña pequeña, sabe que a su amiga le molesta mucho
- ya, antes que me arrepienta. Dice con evidente molestia.

Se toman la foto, a simple vista parece ser la pelinegra más sonriente y coqueta, lo de coqueta es real, pero lo de sonriente no

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Se toman la foto, a simple vista parece ser la pelinegra más sonriente y coqueta, lo de coqueta es real, pero lo de sonriente no. La rubia pública la foto en sus redes sociales, etiqueta a su amiga. No le pone frase, solo corazones rojos.

Mientras tanto, madelen no pudo con la curiosidad y decidió echarle una mirada al perfil de Instagram de lilith, y ve la foto recién publicada, se veía tan hermosa, hasta sentía envidia de la mujer que estaba al lado de esa pelinegra, sin querer reacciono a la foto, trato de quitarlo pero no pudo, salió del perfil y rogaba que nadie viera su reacción, en especial lilith.

El teléfono de lilith suena con la notificación, decide mirar y sonríe a la pantalla al ver quién reacciono a la foto.

- y esa sonrisa de satisfacción?
- nada, no es nada.

A la rubia ya le estaba molestando está sequedad y silencio tan exagerado de su amiga.
La rubia mira la notificación en su teléfono y ve que reacciona una chica que ella no conoce pero es muy hermosa, es llamativa a su manera, su nombre era "Made Rodri" tenía su nombre a medias. Esa chiquilla le saco una sonrisa a su amiga y lo iba a investigar...

Amor enfermoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora